Tamara Rojo, un anzuelo de lujo

El Palau de la M¨²sica de Barcelona no es un espacio esc¨¦nico apropiado para la danza, resulta peque?o para bailar y, adem¨¢s, hay porcentaje elevado de localidades con visibilidad reducida o nula. El Festival del Mil.leni se ha convertido en sus siete a?os de existencia en un atractivo evento para las fiestas navide?as pues aprovecha la escasez de programaci¨®n de conciertos para atraer, con nombres medi¨¢ticos, a numeroso p¨²blico a su programaci¨®n. Es lo que ocurri¨® el pasado viernes por la noche con la actuaci¨®n de la bailarina Tamara Rojo, ¨²ltimo premio Pr¨ªncipe de Asturias de las Artes. Su nombre fue el reclamo para una Gala de Ballet que aglutin¨® a otras estrellas de la danza de opaco brillo. Un reclamo que llen¨® el Palau de la M¨²sica y dej¨® a los cr¨ªticos relegados a las ¨²ltimas filas de platea, pero vali¨® la pena estirar el cuello y agudizar la vista para ver una pirouette o un attitude de la Rojo, la reina de la noche.

Coqueta en el grand pas de deux de Don Quijote y sublime en el del cisne blanco de El lago de los cisnes, Tamara Rojo hechiz¨® y entusiasm¨® en sus dos intervenciones, aunque el p¨²blico se qued¨® con las ganas de verla bailar m¨¢s. Sus dos breves intervenciones pasaron como un suspiro. Como cisne blanco despleg¨® encanto sobrenatural y en Don Quijote, la pasi¨®n envolvi¨® su certero baile. El juego con el abanico, sus ojos negros y su p¨ªcara sonrisa, am¨¦n de sus afiladas y seguras puntas hipnotizaron al p¨²blico. En los dos pasos a dos su pareja fue el magn¨ªfico bailar¨ªn I?aki Urlezaga, que como Tamara Rojo pertenece al Royal Ballet.

Del resto de participantes en la Gala de Ballet hay que apuntar que el bailar¨ªn cubano Lienz Chang, brillante en otras ocasiones, decepcion¨® por su falta de forma f¨ªsica. ?l abri¨® el programa bailando el paso a dos de Cascanueces con la espa?ola Raquel L¨®pez, a la que le faltan muchas horas de barra. El cubano tampoco estuvo a la altura en el solo L'home en noir, pero estuvo correcto en el d¨²o Gotan, que bail¨® con Alba L¨®pez.

El excelente bailar¨ªn Maximiliano Guerra bail¨® con precisi¨®n con Paola Vismara Diana y Acte¨®n, pero no pudieron bailar el pas a deux porque Vismara sufri¨® una lipotimia. Por su parte, los j¨®venes Altankhuyag Dugaraa y Ganchimeg Choijilsuren, del Ballet de la ?pera Nacional de Mongolia exhibieron una excelente t¨¦cnica todav¨ªa por controlar. Ambos interpretaron los pasos a dos de El Corsario y Paquita. Dugaraa ejecut¨® con energ¨ªa y soltura el solo de The Opener.