El mensaje de la piedra de Mosc¨²
Cuando hayamos terminado de re¨ªrnos a carcajadas por la presunta piedra esp¨ªa utilizada por los brit¨¢nicos en Mosc¨², tendremos que hacernos un par de preguntas serias. Unas preguntas que no tienen nada que ver con la evoluci¨®n de las t¨¦cnicas que utiliza la segunda profesi¨®n m¨¢s vieja del mundo. No tengo idea de hasta qu¨¦ punto son ciertas estas acusaciones concretas, pero no me cabe duda de que Gran Breta?a esp¨ªa a Rusia y Rusia esp¨ªa a Gran Breta?a. El bulldog y el oso llevan m¨¢s de un siglo enfrent¨¢ndose en lo que Rudyard Kipling llamaba "el gran juego", y no parece que vayan a dejar de hacerlo en un futuro pr¨®ximo. Q, exc¨¦ntrico inventor de los artilugios de James Bond, estar¨ªa orgulloso de esa piedra de Mosc¨². Y la pr¨®xima vez que paseemos por el parque de nuestro barrio, debemos fijarnos a ver si encontramos alguna piedra rusa.
Cuando se dedica dinero p¨²blico a promover la democracia, debe hacerse a trav¨¦s de una instituci¨®n que sea lo m¨¢s transparente posible e independiente
El bulldog y el oso llevan enfrent¨¢ndose m¨¢s de un siglo en lo que Kipling llamaba "el gran juego", y no parece que lo vayan a dejar en un futuro pr¨®ximo
Lo m¨¢s peligroso que est¨¢ haciendo el r¨¦gimen de Putin con la piedra es la vinculaci¨®n de la supuesta trama de espionaje brit¨¢nico con las ONG
Lo importante no es el espionaje. De lo que se trata es de saber, por un lado, qu¨¦ nos dice este episodio sobre la actitud del r¨¦gimen de Putin hacia la democracia en Rusia y su antiguo imperio, y por otro, qu¨¦ lecciones podemos extraer nosotros, como ciudadanos que vivimos en democracias, sobre los medios que emplean nuestros pa¨ªses para promover la democracia en otros territorios. En primer lugar, los putinistas y la democracia. No les gusta. Ven que va devorando el viejo imperio ruso, empezando por Polonia en los a?os ochenta, pasando por la revoluci¨®n rosa de Georgia y la revoluci¨®n naranja de Ucrania, hasta llegar al enfrentamiento actual con el presidente Lukashenko en Bielorrusia y las cr¨ªticas de medios de comunicaci¨®n independientes y ONG a la posici¨®n dominante que mantienen ellos en Rusia.
Revoluciones de colores
Consideran que el virus de las revoluciones de colores y el veneno de la democracia los propagan las ONG. Y creen, o al menos afirman creer, que lo hacen inspiradas y financiadas por las potencias occidentales. Es, en un ¨¢mbito menor y otras circunstancias, una visi¨®n de la pol¨ªtica cl¨¢sica del Kremlin, llena de conspiraciones propias de la guerra fr¨ªa, digna de lo que podr¨ªa esperarse de un antiguo dirigente del KGB como Vlad¨ªmir Putin. Tras la revoluci¨®n naranja en Ucrania, los tecn¨®logos pol¨ªticos del Kremlin -¨¦se es el elegante apelativo que reciben- han decidido que las ONG son el nuevo campo de batalla entre los poderes blandos de Rusia y Occidente.
Lo m¨¢s peligroso de lo que est¨¢ haciendo el r¨¦gimen de Putin con la piedra, por tanto, es el hecho de haber vinculado la supuesta trama de espionaje brit¨¢nico con las ONG rusas. Sucede en un momento en el que Rusia acaba de aprobar una ley que otorga al Kremlin enormes poderes para vigilar y controlar a las ONG, incluido el derecho de suspender sus actividades si amenazan la soberan¨ªa o la independencia del pa¨ªs. El coronel Sergu¨¦i Ignatchenko, portavoz del FSB (Servicio Federal de Seguridad), asegura que Marc Doe, uno de los diplom¨¢ticos brit¨¢nicos acusados de controlar en secreto la piedra, hab¨ªa autorizado varios pagos a ONG rusas, entre ellos 23.000 libras (33.000 euros) al Grupo de Helsinki en Mosc¨². Lyudmila Alexeyeva, del Grupo de Helsinki, coment¨®: "Est¨¢n preparando a la opini¨®n p¨²blica para cuando el Gobierno tome la medida de cerrarnos, cosa que ahora pueden hacer gracias a la nueva ley". As¨ª podr¨¢ celebrar Rusia su presidencia del G8.
?Qu¨¦ debemos hacer? Lo primero, tenemos que hacer que las amenazas contra las ONG sean un factor importante en nuestras relaciones con Rusia. As¨ª lo ha hecho ya Angela Merkel, alej¨¢ndose de forma prometedora de la cobarde actuaci¨®n de su predecesor, Gerhard Schr?der. Tambi¨¦n Condoleezza Rice. En este aspecto, la UE necesita tener una postura com¨²n y claramente articulada. Adem¨¢s, debemos llevar a cabo un debate sincero y detallado sobre lo que es y no es juego limpio para los pa¨ªses occidentales que pretenden promover la democracia en otros lugares. Los lectores ya han podido ver en estas p¨¢ginas alguna muestra de ese debate que, sin duda, continuar¨¢, pero hay un l¨ªmite en lo que de verdad se puede conseguir con art¨ªculos de opini¨®n. El siguiente paso debe consistir en que un grupo internacional de analistas independientes examine todas las pruebas, escuche a todas las partes interesadas y proponga una serie de normas.
Mientras tanto, hay que preguntarse urgentemente qu¨¦ estamos haciendo ya. Cada pa¨ªs act¨²a de forma distinta, pero, dado que en este momento el que est¨¢ en el punto de mira del Kremlin es Gran Breta?a, hablemos de Gran Breta?a. "Sabemos", dijo el coronel del FSB Sergu¨¦i Ignatchenko, seg¨²n cita Novosti, "que Marc Doe se presentaba como representante del Global Opportunities Fund (Fondo de Oportunidades Mundiales) en reuniones con miembros de ONG". El Fondo de Oportunidades Mundiales es el nuevo gran programa del Ministerio de Exteriores brit¨¢nico, el Foreign Office, para "promover acciones sobre temas mundiales en ¨¢reas de importancia estrat¨¦gica para el Reino Unido". Su cap¨ªtulo sobre la "reunificaci¨®n de Europa" tiene entre sus prop¨®sitos el fomento de "la democracia y el imperio de la ley, incluida la protecci¨®n de los derechos humanos".
Una idea excelente. Ahora bien, si resulta que Marc Doe era un esp¨ªa brit¨¢nico que colocaba piedras transmisoras un d¨ªa y entregaba d¨®lares para la democracia al d¨ªa siguiente, las repercusiones para las acosadas ONG en Rusia ser¨¢n espantosas. Ninguna otra cosa ser¨ªa m¨¢s comprometedora para los dem¨®cratas rusos. Incluso aunque el Gobierno brit¨¢nico insista en que Doe -que figura como segundo secretario y consejero pol¨ªtico- no era un esp¨ªa que se ocultaba bajo la tapadera diplom¨¢tica, sino un agradable diplom¨¢tico que se interesaba por la geolog¨ªa local, ser¨¢ una afirmaci¨®n imposible de demostrar. Siempre quedar¨¢ la sospecha, entre otras, en la mente del p¨²blico ruso. Las ONG quedar¨¢n manchadas por el roce del espionaje.
La moraleja es que, cuando se dedica dinero p¨²blico a promover la democracia en primera l¨ªnea, debe hacerse a trav¨¦s de una instituci¨®n que sea lo m¨¢s transparente e independiente posible. En Gran Breta?a ya tenemos una instituci¨®n as¨ª: es la Fundaci¨®n Westminster para la Democracia. Si visitan su p¨¢gina web (www.wfd.org) ver¨¢n exactamente a qu¨¦ se dedica, podr¨¢n leer sus informes y ver a qui¨¦n ha apoyado. Su dinero (en la actualidad, la discreta suma de 4,1 millones de libras , mucho menos que el Fondo de Oportunidades Mundiales) procede casi por entero del Foreign Office, pero las decisiones sobre c¨®mo gastarlo las toma una junta de gobierno aut¨®noma, formada por representantes de todos los partidos pol¨ªticos presentes en la C¨¢mara de los Comunes y un n¨²mero ligeramente menor de directivos independientes, no afiliados a ning¨²n partido. Su principal mecenas es el presidente de la C¨¢mara, con el apoyo de los l¨ªderes de todos los partidos, y recorre el mundo bajo la bandera del rastrillo que representa al Parlamento m¨¢s antiguo del mundo.
Yo fui uno de los fundadores de la Fundaci¨®n Westminster y pertenec¨ª a su junta, como miembro independiente, durante muchos a?os. Cuando hab¨ªa propuestas de ayudar a ONG en un pa¨ªs, la Embajada brit¨¢nica nos asesoraba. A veces hac¨ªamos caso de sus consejos; a veces, los ignor¨¢bamos. Y as¨ª tiene que ser. Como la mujer del C¨¦sar, la promoci¨®n de la democracia no s¨®lo tiene que estar por encima de toda sospecha, sino que tiene que dar la imagen de que est¨¢ por encima de toda sospecha. Y en este ¨¢mbito rondan muchas sospechas; algunas, seguramente, justificadas. Como coment¨® el jefe de los servicios secretos exteriores de Rusia, Sergu¨¦i Lebedev, en una de sus escasas entrevistas, "las misiones humanitarias y las organizaciones no gubernamentales son muy atractivas para todos los servicios secretos del mundo. Los servicios secretos necesitan una tapadera, una m¨¢scara, una pantalla". No tengan la menor duda de que sabe de lo que habla.
Ahora leo que el presidente del Parlamento ruso, Bor¨ªs Gryzlov, est¨¢ pensando en interpelar sobre este asunto a sus colegas del Parlamento brit¨¢nico. Deber¨ªa hacerlo. Y sus colegas brit¨¢nicos deber¨ªan estar en condiciones de responder que la tarea de promover la democracia, un objetivo totalmente leg¨ªtimo, se est¨¢ llevando a cabo de forma escrupulosa y transparente, y que el encargado es un organismo p¨²blico independiente bajo la supervisi¨®n y la ense?a del padre de todos los Parlamentos. La Fundaci¨®n Westminster para la Democracia. Ser¨ªa un buen modelo de actuaci¨®n no s¨®lo para Gran Breta?a, sino para todas las democracias.
Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia
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