El Betis se apunta a la vida con su triunfo frente al AZ Alkmaar
El Bertis reivindic¨® ayer su fatalismo vital. A¨²n le queda un partido para confirmar la bonanza, pero ayer, con una victoria clara sobre el AZ Alkmar de Van Gaal, se mereci¨® que crean en ¨¦l.
Un partido de f¨²tbol, al fin y al cabo, es una manera de vivir un fen¨®meno concreto. M¨¢s bien dos, uno por cada lado del campo y del marcador. Los holandeses interpretaron su trabajo como lo manda su capataz, Louis Van Gaal: el jugador que lleva la pelota, o la iniciativa, marca los actos de los dem¨¢s. Si uno se escora a un lado, los dem¨¢s tienen que esforzarse para que el esquema base, el ideal, no se rompa. Si sale todo bien, se le denomina f¨²tbol total. Al reves, se denosta como falta de imaginaci¨®n.
BETIS 2 - AZ ALKMAAR 0
Betis: Contreras; Varela, Melli, Juanito, Luis Fern¨¢ndez; Joaqu¨ªn (?scar L¨®pez, m. 83) Rivera, Arzu, Edu; Robert (Israel, m. 80) y Dani (Tardelli, m. 62).
AZ Alkmaar: Timmer; Steinsson, Jaliens, Mathijsen, De Cler; Landzaat, Molhoek (De Zeeuw, m. 32); Meerdink, P¨¦rez, Van Galen (Huysegens, M. 63); y Arveladze.
Goles: 1-0. M. 70. Tardelli, a pase de Joaqu¨ªn. 2-0. M. 78. Robert, le roba un bal¨®n al central y marca a placer.
?rbitro: Nikolai Ivanov (Rusia). Amonest¨® a Contreras, P¨¦rez, De Cler y Melli.
Unos 45.000 espectadores en el Ruiz de Lopera.
El Betis, sin embargo, vive de la sorpresa, de que los individuos desborden el esquema y llenen de imaginaci¨®n lo que para otros es norma. El AZ Alkmaar apret¨®, lleg¨® a dominar, pero se encontr¨® con lo que no aparece en las libretas ni en las hojas de c¨¢lculo de los programas especializados. Los dos refuerzos de invierno, dos jugadores que apenas hab¨ªan aportado nada, pusieron la diferencia. Uno por calidad -Tardelli-, abri¨® el marcador y el camino, y el otro -Robert-, por insistencia, lo redonde¨® con un robo de cartera a un central falto de recursos y fe. Ayer, lo personal venci¨® a lo met¨®dico. Pero pod¨ªa haber sucedido al reves. Y eso es bueno. Al menos para el f¨²tbol.
El Betis sali¨® a impresionar. Y, en cierto modo, lo consigui¨®. Los holandeses se aplicaban de manera cartesiana en el cierre de los huecos y los espacios. El peligro de los b¨¦ticos lleg¨® por la cabeza de uno de sus centrales: Juanito. En un par de ocasiones, en los minutos 13 y en el 30, el defensa gaditano remat¨® a puerta con peligro. Hasta entonces, poco hab¨ªan logrado los avances por la banda de Joaqu¨ªn o las combinaciones de Arzu y Rivera.
Los holandeses ense?aron la dentadura muy cerca del descanso, en el minuto 43, cuando Luis Fern¨¢ndez tuvo que sacar una pelota que parec¨ªa colarse por el palo izquierdo de Contreras. Pero ning¨²n sistema es mejor que otro.
El comienzo de la segunda mitad parec¨ªa que iba a ser el que le iba a dar la raz¨®n a la visi¨®n cartesiana liderada por Van Gaal. Pero no. El Betis sac¨® al terreno de juego toda la heterodoxia que ten¨ªa a mano. Tardelli lleg¨® en diciembre del Sao Paulo con vitola de conflictivo. Y de genial. Ayer, lo fue lo suficiente. Con desmarque y toque sutil desmoron¨® de golpe la trama t¨¢cticA de Van Gaal. Horas de estudio y de an¨¢lisis del contrincante se fueron al garete. Y el intuitivo gan¨®.
No s¨®lo por su calidad y eficiencia, que ayer no se le puede negar al Betis, sino por que el orden marcial del AZ no contemplaba encajar un tanto en contra. O, al menos, as¨ª lo pareci¨®, cuando se vineron a bajo -entrenador incluido- tras recibir el gol b¨¦tico.
Robert, incordi¨®n donde los haya, se dio cuenta de los nervios de los holandeses, alos que pareci¨® hab¨¦rseles salido la cadena. Presion¨® a un defensa timorato y marc¨®. Van Gaaal bram¨® y el AZ no supo reaccionar, no supo encontara l¨ªneas perpendiculares o papalelas, de libreta, que desactivaran las ganas de los individuos del Betis. El orden de Van Gaal fall¨® porque demostr¨® no tener paln alternativo, capacidad de improvisaci¨®n.
Pero a¨²n es pronto para decir qui¨¦n vencer¨¢ en este asalto. El Betis se reivindic¨® ayer con un gran resultado. S¨®lo le queda cre¨¦rselo.
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