La empresa ¨¢rabe que iba a gestionar seis puertos de Estados Unidos aplaza el acuerdo
La Casa Blanca utilizar¨¢ el retraso para despejar en el Congreso las dudas sobre seguridad
La tormenta causada por la perspectiva de que las operaciones de seis puertos estadounidenses vayan a ser manejadas por la compa?¨ªa estatal de Dubai DP World se redujo ayer ligeramente al conocerse que el grupo ofreci¨® aplazar la entrada en vigor de sus actividades. De esta forma, la Casa Blanca, que recibe cr¨ªticas de dem¨®cratas y republicanos por defender la operaci¨®n, logra un respiro para calmar las agitadas aguas del Congreso.
Todo est¨¢ ya, en la pol¨ªtica de EE UU, condicionado por las elecciones legislativas de oto?o y por las consecuencias del uso y abuso de la l¨®gica de la guerra contra el terrorismo. Por esa raz¨®n, la noticia de que DP World, al adquirir la empresa brit¨¢nica P&O, se encargar¨ªa de la gesti¨®n de los puertos de Nueva York, Nueva Jersey, Filadelfia, Baltimore, Miami y Nueva Orleans -adem¨¢s de otros 24 en 17 pa¨ªses- desat¨® las alarmas entre los congresistas y senadores de los Estados afectados, alegando razones de seguridad y protestando por no haber tenido conocimiento de la operaci¨®n.
En las protestas coincidieron republicanos y dem¨®cratas. Hillary Clinton pidi¨® una revisi¨®n m¨¢s profunda de las condiciones de la operaci¨®n. Nueva Jersey lleg¨® incluso a presentar una querella para impedir la operaci¨®n hasta que no se despejen las inquietudes.
George W. Bush respondi¨® que Dubai es aliado de EE UU en la guerra contra el terrorismo y que la operaci¨®n econ¨®mica era impecable. Bloquearla, explic¨® el presidente, hubiera enviado un mensaje de discriminaci¨®n: EE UU admite inversiones de todo el mundo excepto de pa¨ªses ¨¢rabes. "Nadie tiene que preocuparse por la seguridad en este caso". Su consejera de Seguridad, Frances Townsend, reiter¨® que los Emiratos han sido "un aliado vital en Afganist¨¢n y en la lucha contra la financiaci¨®n del terrorismo". Y Robert Kimmitt, n¨²mero dos del Tesoro, declar¨® que "no hubo ni una sola preocupaci¨®n de riesgo para la seguridad nacional en el proceso de revisi¨®n de la operaci¨®n, que dur¨® 90 d¨ªas". Pero Bush tuvo que admitir que supo de la operaci¨®n al mismo tiempo que todo el mundo, y que pidi¨® informaciones a posteriori, y su portavoz, Scott McClellan, reconoci¨®: "Probablemente deber¨ªamos haber informado antes al Congreso".
En vista de la pol¨¦mica, Dubai Ports World ha dicho que sigue adelante la compra a P&O -por 6.850 millones de d¨®lares, 5.750 millones de euros, lo que har¨¢ de la compa?¨ªa estatal de Dubai la segunda del mundo en servicios y gesti¨®n portuaria- porque no tiene sentido paralizarla por un debate sobre seis puertos que suponen menos del 10% del volumen de la operaci¨®n, pero que se aplaza su aplicaci¨®n en EE UU: "Eso significa que DP World no ejercer¨¢ el control sobre las operaciones de P&O en EE UU, ni cualquier otro tipo de actividad, a la espera del desenlace de las actuales discusiones", se?al¨® la compa?¨ªa. La Casa Blanca agradeci¨® el aplazamiento y dijo que lo utilizar¨ªa para despejar las dudas de seguridad suscitadas en el Congreso.
El debate es intenso en los medios. "No tengo ninguna simpat¨ªa hacia el presidente y los l¨ªos pol¨ªticos en los que est¨¢ metido, pero no me sumar¨¦ a este frenes¨ª: en este caso, tiene raz¨®n. El acuerdo debe seguir adelante. El Congreso debe centrarse en las escuchas, no en esto", escribe Thomas Friedman en The New York Times, que tambi¨¦n le dice a Bush que est¨¢ "cosechando lo que sembr¨®".
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