Roncagliolo gana el Alfaguara con 'Abril rojo'
El escritor peruano, de 30 a?os, describe la situaci¨®n pol¨ªtica de su pa¨ªs con un 'thriller' violento
![Jes¨²s Ruiz Mantilla](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F6a8979ac-e7b3-4e49-a28d-8ef780472c20.jpg?auth=adca90b9344430353a3efa521c6f05b31de12fb2c013241bb04b919b8e0a8605&width=100&height=100&smart=true)
Habla con el mismo desparpajo del boom literario latinoamericano que del crack, la generaci¨®n que ¨¦l considera anterior a la suya, o del thriller, un g¨¦nero en principio cinematogr¨¢fico que Santiago Roncagliolo ha transformado en literario con Abril rojo, novela que consigui¨® ayer el Premio Alfaguara 2006, dotado con 175.000 d¨®lares (148.000 euros) y una escultura de Mart¨ªn Chirino.
Se lo otorg¨® un jurado presidido por la escritora mexicana ?ngeles Mastretta, e integrado adem¨¢s por colegas suyos como Carme Riera, Fernando Iwasaki y Antonio Caballero, y en el que tambi¨¦n participaban la cineasta Isabel Coixet, el cr¨ªtico Juan Antonio Masoliver R¨®denas y el editor Juan Gonz¨¢lez. Todos -a excepci¨®n de Coixet- estaban presentes y acompa?ados en la mesa de Jes¨²s de Polanco, presidente del Grupo PRISA. ?ste prometi¨® todo su apoyo al autor, que ha publicado novelas como Crecer es un oficio triste o Pudor y que colabora diariamente en la publicaci¨®n electr¨®nica Boomeran, donde, dijo, "hoy escribir¨¦ sobre este d¨ªa".
El blog de Santiago Roncagliolo |
Art¨ªculos publicados por el ganador en EL PA¨ªS |
A las 16.30 se anunci¨® el fallo de un premio al que se han presentado m¨¢s de 500 autores. Antes de que el galardonado hablara ante el auditorio de la sede del Grupo Santillana en Madrid, que se conect¨® por videoconferencia con sus sedes en Am¨¦rica para conocer el resultado, los miembros del jurado, uno a uno, explicaron las razones por las que Abril rojo se hab¨ªa impuesto entre las siete finalistas.
Mastretta ley¨® el acta en el que se destaca, entre otras cosas, "la eficacia expresiva, la fuerza dram¨¢tica de una novela que arrastra al lector desde la primera p¨¢gina". M¨¢s o menos en esos t¨¦rminos fueron comentando la novela quienes la hab¨ªan le¨ªdo y que cuenta las peripecias del fiscal F¨¦lix Chacaltana Sald¨ªvar, solitario, pusil¨¢nime, amante de la poes¨ªa, de las tradiciones m¨¢s rancias y, seg¨²n Roncagliolo, "de la ley".
La violencia
Chacaltana ha de enfrentarse a la investigaci¨®n de una serie de asesinatos que ocurren en su pa¨ªs y que sirven al autor para hacer un an¨¢lisis de aquello de lo que se ha apoderado el silencio: "La violencia en nuestro pa¨ªs la sufrieron los campesinos, sobre todo, y super¨® en n¨²mero a lo que han vivido Argentina, Chile o Uruguay. Lo que ocurre es que han sido v¨ªctimas de un sistema en el que los peruanos eleg¨ªamos nuestros gobiernos y en cierto modo todos somos culpables", asegur¨® Roncagliolo ya desde su casa de Barcelona.
All¨ª, en camiseta, con la pierna escayolada (rota en un partido de f¨²tbol -quiz¨¢s emulando a Fernando Torres, ya que se confiesa atl¨¦tico, "acostumbrado a perder", dijo-), con el tel¨¦fono sonando y reci¨¦n duchado, escuch¨® alabanzas y amenazas de una dura promoci¨®n: la que le espera con su novela por Espa?a y por Am¨¦rica Latina y Estados Unidos. Atendi¨® a consejos de antiguos ganadores del premio, como Manuel Vicent, Clara S¨¢nchez o Emma Wolf y Graciela Montes, ganadoras de la edici¨®n anterior, que le felicitaron desde Buenos Aires, y comparti¨® an¨¢lisis como los de Iwasaki, peruano tambi¨¦n como ¨¦l, quien dijo que la novela "trata de los temas latinoamericanos de siempre pero de forma completamente distinta".
El autor, adem¨¢s, respondi¨® a preguntas que le formulaban desde Argentina, M¨¦xico, Miami, Colombia, Chile, Per¨²... Cuestiones que le sirvieron para armar un discurso de lo que para ¨¦l es la literatura y otras cosas. "Esta novela surge de una pregunta: ?qu¨¦ tiene que ocurrir para que una persona decida matar a alguien?"; o, dicho de otro modo: ?cu¨¢l es el origen de la violencia?, ?qu¨¦ nos conduce a devorarnos los unos a los otros? Eso es lo que late en Abril rojo. Eso y c¨®mo la pol¨ªtica influye en las esferas m¨¢s ¨ªnfimas de nuestra intimidad. "En los a?os setenta viv¨ª en el exilio, en el 2000 vine a Espa?a a vivir como emigrante, por mucho que lucho por alejarme, la pol¨ªtica se ha empe?ado en fastidiarme la paciencia".
![De izquierda a derecha, Carme Riera, Jes¨²s de Polanco y ?ngeles Mastretta.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/7BVU2SCZYBARTF7CCUMZYGTLBU.jpg?auth=fc2f662800bf3a16344761dcd5e95787afe690d750720cb75f8673a01d961aa5&width=414)
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