John Fogerty resume en un disco su carrera y la del grupo Creedence Clearwater Revival

The long road home (Fantasy/Universal) parece un disco l¨®gico y comercialmente infalible: re¨²ne los cl¨¢sicos temas de Creedence Clearwater Revival (CCR) con canciones grabadas por su cabecilla, el gran John Fogerty, a partir de 1973; sin embargo, hasta el pasado a?o hubiera sido imposible. La recopilaci¨®n, que se publica hoy en Espa?a, es el primer fruto visible de la reconciliaci¨®n entre Fogerty y Fantasy Records, la discogr¨¢fica californiana que creci¨® con los ¨¦xitos de CCR; la resoluci¨®n del enfrentamiento m¨¢s enquistado del show business estadounidense.

John Fogerty pas¨® 30 a?os luchando a cara de perro con Saul Zaentz, propietario de Fantasy. El rockero se consideraba damnificado por las bajas regal¨ªas con que Zaentz compens¨® los inmensos ¨¦xitos de Creedence Clearwater Revival. A Fogerty le dol¨ªa que la millonada generada por CCR permitiera convertir una peque?a independiente de Berkeley en una compa?¨ªa fuerte, que adquiri¨® Prestige, Stax y otros cat¨¢logos hist¨®ricos; a¨²n m¨¢s, Zaentz se transform¨® en poderoso productor cinematogr¨¢fico, responsable de t¨ªtulos de ¨¦xito y prestigio tipo Alguien vol¨® sobre el nido del cuco, Amadeus o El paciente ingl¨¦s.

La guerra entre personalidades tan fuertes provoc¨® momentos rid¨ªculos: Fogerty atac¨® a su antiguo jefe con temas como Zaentz kan't dance ("Zaentz no sabe bailar / pero te robar¨¢ tu dinero"). El aludido le demand¨®, alegando que una canci¨®n de Fogerty, Old man down the road, se parec¨ªa a una composici¨®n a?eja de CCR, cuyos derechos editoriales controlaba. As¨ª que Fogerty debi¨® defenderse de una acusaci¨®n de autoplagio; el m¨²sico gan¨® pero sus costes legales le dejaron a¨²n m¨¢s amargado. Por su parte, Fogerty llev¨® a juicio al bajista Stu Cook y el baterista Doug Clifford, que siguieron girando como Creedence Clearwater Revival o con variaciones sobre el nombre hist¨®rico.

The long road home recuerda lo esencial: que Fogerty, al frente de CCR, reinvent¨® el rock & roll en plena borrachera psicod¨¦lica, con temas rotundos -Born on the bayou, Proud Mary- que evocaban la mitolog¨ªa del Sur Profundo (una regi¨®n que entonces Fogerty no conoc¨ªa). Adem¨¢s, Fogerty a?adi¨® a su rock rudo una carga cr¨ªtica -Fortunate son, Who'll stop the rain- que reflejaba la polarizaci¨®n social que trajo la guerra de Vietnam. En solitario, Fogerty opt¨® por canciones m¨¢s festivas, aunque recientemente conden¨® la intervenci¨®n en Irak con D¨¦j¨¤ vu (all over again). Tuvo un n¨²mero uno en 1985 con Centerfield, pero su trayectoria se resinti¨® por agrios conflictos con la industria y largos silencios.

En 2004, Zaentz vendi¨® Fantasy; al poco, Fogerty volvi¨® a firmar con su antiguo sello. Conviene saber que Fogerty sigue a la gre?a con sus ex compa?eros, a los que no ha perdonado que se alinearan con Zaentz en aquellas batallas. El libreto de The long road home especifica qui¨¦n toc¨® qu¨¦ en cada grabaci¨®n para destacar la superior aportaci¨®n creativa de Fogerty. Adem¨¢s, ¨¦ste ha a?adido cuatro ¨¦xitos de CCR en versiones hechas en 2005, en un nada sutil alarde de que su banda actual es mejor que la original. Genio, figura... y resentimiento.