El sonido

Son la banda del momento y tambi¨¦n el mejor grupo exportable con el que cuenta la m¨²sica popular del momento. Por eso da m¨¢s rabia que el sonido de la esperada presentaci¨®n en Madrid de su tercer disco, Techar¨ª, fuese tan deficiente. S¨®lo en los momentos en los que el maestro Pepe Habichuela puso su guitarra al servicio de la carism¨¢tica voz de Marina el sonido dej¨® escapar matices apreciables. Gran problema en una numerosa formaci¨®n que ataca todos los temas como la carga de la Brigada Ligera. No obstante la cuesti¨®n ac¨²stica, que no fue menor, Ojos de Brujo mantuvo ese nivel de m¨¢quina de fusi¨®n con gusto a flamenco que se traduce en canciones hechas m¨¢s para bailar o, cuando menos, entregarse con los ojos cerrados al ritmo que dibujan canciones como R.D.S., Tahit¨¢, Color o Nada en la nevera. Marina, la cantante, y el percusionista, Max, mantuvieron algunos de esos duelos r¨ªtmicos de scat cl¨¢sicos del grupo, convirti¨¦ndose en los momentos ¨¢lgidos de un concierto que el p¨²blico disfrut¨® sobremanera. Si llegan a sonar como de ellos se espera, seguro que se salen.