Por cinco euros a la semana
La Guardia Civil detiene en Navarra a una banda de contratistas de mano de obra que explotaba a trabajadores portugueses
La Guardia Civil, actuando en colaboraci¨®n con las autoridades portuguesas, detuvo el viernes a nueve ciudadanos portugueses y uno espa?ol, todos residentes en distintos lugares de la Ribera navarra, acusados de explotar y mantener en r¨¦gimen de "semiesclavitud" al menos a 43 trabajadores portugueses. Seg¨²n declar¨® el delegado del Gobierno en la Comunidad foral, Vicente Ripa, la red de engajadores (contratistas, intermediarios) hab¨ªa captado a los trabajadores entre mendigos y personas sin techo ni instrucci¨®n en diferentes albergues y estaciones de Lisboa y Oporto, y los hab¨ªa trasladado a los concejos de Arguedas, Valtierra y Tudela. All¨ª, los sin techo realizaban tareas agr¨ªcolas a destajo, seis d¨ªas a la semana, en jornadas de entre ocho y 18 horas, a cambio de cama, comida y entre tres y diez euros semanales. Dentro de los descuentos que les hac¨ªan por gastos ocasionados, ten¨ªan que pagar incluso la gasolina de las furgonetas que les trasladaban al lugar de trabajo.
Los detenidos alegan que reten¨ªan las n¨®minas para que no se gastaran el dinero en alcohol
Los detenidos han afirmado que reten¨ªan los sueldos a sus operarios para que no se lo gastaran en alcohol y pudieran trabajar "en buenas condiciones".
Varios sindicatos lusos ven¨ªan denunciando desde hace algunos meses situaciones de explotaci¨®n ilegal de trabajadores en Espa?a. En noviembre pasado, a ra¨ªz de la muerte de seis obreros (cinco de ellos portugueses, todos subcontratados legalmente) en la construcci¨®n de un puente de la autov¨ªa del Mediterr¨¢neo cerca de Almu?¨¦car (Granada), este diario inform¨® de que diversas mafias de engajadores lusos trasladaban cada d¨ªa a cientos de personas al otro lado de la frontera para trabajar, muchas veces en peores condiciones que los espa?oles, en la agricultura y la construcci¨®n.
A pesar de que las autoridades laborales espa?olas alegaban no haber recibido ninguna denuncia concreta, en la Cumbre de ?vora, celebrada pocos d¨ªas despu¨¦s, los ministros de Trabajo e Interior de ambos pa¨ªses decidieron intensificar las inspecciones laborales y la coordinaci¨®n policial transfronteriza para perseguir ese tipo de delitos.
El caso detectado ahora gracias a la denuncia de uno de los trabajadores ha permitido saber que las cosas son a¨²n peores de lo que se pensaba. La llamada Operaci¨®n Fado ha descubierto que la mayor¨ªa de los trabajadores viv¨ªan y dorm¨ªan en estado de semi-indigencia y no ten¨ªan contrato ni eran dados de alta en la Seguridad Social.
Seg¨²n la Guardia Civil, algunos estaban subcontratados por empresas dedicadas a labores agrarias, pero tampoco recib¨ªan sus n¨®minas, ya que ¨¦stas eran ingresadas por los due?os de las explotaciones directamente en las cuentas corrientes de los patrones.
Los medios lusos destacaban ayer que algunos de los trabajadores liberados han declarado que estaban contentos con sus condiciones de vida y de trabajo. "Son personas que provienen de condiciones sociales vulnerables, algunos no ten¨ªan ni consciencia de que estaban siendo explotados", dijo al diario Publico el c¨®nsul luso en Bilbao. "Y cuando los contactamos, no manifestaron deseo de regresar (a Portugal)", a?adi¨® Rui Gomes.
En los registros realizados en las instalaciones donde descansaban los trabajadores, los agentes comprobaron la precariedad en la que viv¨ªan: "Llegaban incluso a carecer de aseos, teniendo que realizar las necesidades, en algunas ocasiones, en la v¨ªa p¨²blica", expuso la Guardia Civil.
Las investigaciones, que comenzaron a principios de febrero de este a?o, detectaron que la banda de contratistas estaba bien asentada en esa pr¨®spera zona agr¨ªcola de Navarra. Todos, ocho hombres y dos mujeres de edades entre los 22 y los 44 a?os, ten¨ªan all¨ª su residencia fija, aunque la mayor¨ªa eran naturales del norte de Portugal, lo que induce a pensar que el negocio funcionaba bien y desde hac¨ªa tiempo.
El delegado del Gobierno en Navarra, Vicente Ripa, que compareci¨® en rueda de prensa junto al teniente coronel de la Guardia Civil ?ngel Moreno, destac¨®, seg¨²n Europa Press, que el Gobierno espa?ol quiere "una inmigraci¨®n ordenada, legal e integrada, con derechos y obligaciones, y con el contrato de trabajo como premisa".
Seg¨²n dijo Ripa, la Inspecci¨®n de Trabajo en Navarra realiz¨® en 2005 hasta 7.259 actuaciones en la econom¨ªa irregular, con el resultado de 315 infracciones, 80 de ellas con trabajadores extranjeros implicados.
Seg¨²n a?adi¨®, las sanciones impuestas a empleadores por mantener una relaci¨®n irregular con trabajadores extranjeros supusieron unas multas de 502.032 euros, el 80% del total (632.750). Sus datos revelan que el Gobierno ten¨ªa m¨¢s informaci¨®n que la alegada en la Cumbre de ?vora.
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