Las compa?¨ªas de m¨®viles imponen penalizaciones por zanjar contratos

Las compa?¨ªas de m¨®viles quieren mantener a sus clientes a toda costa. Telef¨®nica M¨®viles, Vodafone y Amena han introducido cl¨¢usulas de permanencia para penalizar a sus clientes de contrato (un total de 20 millones) con 150 euros si ¨¦stos se acogen a promociones, especialmente la obtenci¨®n de un terminal subvencionado, y no se mantienen en la compa?¨ªa durante 18 meses. Tratan as¨ª de frenar la sangr¨ªa de la portabilidad, un mecanismo que permite cambiar gratis de compa?¨ªa conservando el n¨²mero, y que, s¨®lo en 2005, usaron m¨¢s tres millones de abonados.

M¨¢s de 300.000 abonados cambian de compa?¨ªa cada mes llev¨¢ndose su n¨²mero de tel¨¦fono m¨®vil gracias a la portabilidad, un procedimiento regulado legalmente por el que se mantiene el n¨²mero y que ha desatado una competencia feroz entre las operadoras. Para arrebatarse los clientes, las compa?¨ªas ofrecen generalmente planes de precios atractivos y, sobre todo, terminales de gama media y alta. Seg¨²n sus c¨¢lculos, s¨®lo en la subvenci¨®n de terminales gastan al a?o m¨¢s de 1.000 millones de euros.

Las compa?¨ªas siempre han tratado de rentabilizar ese gasto obligando a los clientes a un tiempo m¨ªnimo de permanencia. Hasta el momento todas ellas ten¨ªan un compromiso de permanencia que el cliente firmaba cuando se acog¨ªa a una promoci¨®n o se cambiaba de compa?¨ªa. Ahora han dado un paso m¨¢s y han introducido esos compromisos de permanencia en el mismo contrato.

La cl¨¢usula es pr¨¢cticamente la misma en las tres compa?¨ªas: los usuarios que quieran acceder a un m¨®vil subvencionado o a un plan de tarifas especiales, si se dan de baja antes de 18 meses, tienen que pagar 150 euros.

Amena introdujo esa cl¨¢usula hace m¨¢s de un a?o, y Vodafone hizo lo propio hace un mes, si bien mediante una cl¨¢usula optativa que el cliente puede o no suscribir. Ahora se suma a ellas Telef¨®nica M¨®viles. Aprovechando el env¨ªo de la factura correspondiente al mes de marzo, Movistar ha remitido una carta a sus m¨¢s de 10,5 millones de clientes de contrato inform¨¢ndoles de que a partir del 1 de mayo, todos los contratos incluir¨¢n la citada cl¨¢usula de permanencia.

Dicha cl¨¢usula ser¨¢ de aplicaci¨®n tanto a los nuevos clientes como a los antiguos que se acojan a alg¨²n tipo de promoci¨®n, bien de tarifas, bien de terminal. La modificaci¨®n contractual ha sido comunicada a la Secretar¨ªa de Estado de la Sociedad de Informaci¨®n, el Instituto Nacional de Consumo, a la Agencia de Protecci¨®n de Datos y a la Comisi¨®n del Mercado de las Telecomunicaciones, adem¨¢s de a los usuarios.

Y es que, como aclaran las compa?¨ªas, se trata de una cl¨¢usula completamente legal, que aplican muchas empresas de servicios como, por ejemplo, las de conexi¨®n a Internet o las televisiones de pago.

Los nuevos contratos tanto de Vodafone como de Movistar han aprovechado la modificaci¨®n contractual para introducir en los mismos los derechos de los usuarios que contempla el nuevo marco legal establecido en el real decreto 424/2005, que regula las condiciones para la prestaci¨®n de servicios de comunicaciones electr¨®nicas, el servicio universal y la protecci¨®n de los usuarios. En el mismo se incluyen las compensaciones por corte del servicio, deficiente calidad o el derecho a una facturaci¨®n transparente.

Las cl¨¢usulas de permanencia s¨®lo afectan a los clientes de contrato, que supone alrededor de la mitad de los 42 millones de l¨ªneas m¨®viles que hay actualmente en Espa?a.

Por otra parte, la Comisi¨®n Europea va a presentar hoy un plan para reducir dr¨¢sticamente en la Uni¨®n el coste de las llamadas hechas con tel¨¦fono m¨®vil de un pa¨ªs comunitario a otro para acercarlas lo m¨¢s posible a las tarifas que a escala nacional se cargan cuando las llamadas pasan de una red a otra. Con datos del septiembre, esas llamadas internacionales, tambi¨¦n llamadas roaming o de itinerancia, oscilan entre los 20 c¨¦ntimos y los 13,08 euros entre diferentes compa?¨ªas y pa¨ªses, informa Ricardo M. de Rituerto.

Decisi¨®n de Bruselas

El Consejo Europeo de la pasada semana llam¨® la atenci¨®n sobre la trascendencia que tendr¨ªa para la competitividad europea la reducci¨®n de los gastos de roaming, una jungla sin ley en la que el consumidor es sistem¨¢ticamente perjudicado. La competencia y la liberalizaci¨®n del mercado telef¨®nico europeo no se ha traducido en los precios y los ciudadanos tienen grandes dificultades para conocer las tarifas que se les aplican.

Desde el pasado a?o, Vivian Reding, la comisaria de Sociedad de la Informaci¨®n, viene apelando infructuosamente contra los costes "excesivamente altos" de la itinerancia y lamentando que sigan sin reflejar a la hora de la verdad la impresi¨®n de precios baratos que crean los anuncios. En octubre, Reding hizo p¨²blica las dispares tarifas vigentes, que por una llamada de cuatro minutos entre dos pa¨ªses de la UE pueden variar entre los 20 c¨¦ntimos y los 13,08 euros. En el cuadro, llamadas hechas con compa?¨ªas espa?olas desde Chipre, Grecia, Irlanda y Letonia a Espa?a var¨ªan entre los 2,80 euros que aplica Amena en todos los casos, a los 7,20 que desde Chipre y Letonia carga Vodafone, que es sistem¨¢ticamente la m¨¢s cara. Entre ambas queda Movistar.