Dura batalla contra las bacterias de hospital
El aumento de la edad de los enfermos ingresados aumenta la vulnerabilidad ante las infecciones
La erradicaci¨®n total de las infecciones hospitalarias o nosocomiales (IN) es pr¨¢cticamente imposible, pero algunos hospitales est¨¢n ganando terreno en esta batalla. Los m¨¦dicos saben que han de convivir con estas infecciones porque el 50% de ellas son imprevisibles. El simple intento de reducirlas ya resulta dif¨ªcil porque cada vez ingresan pacientes de mayor edad y con m¨¢s patolog¨ªas. En el ¨²ltimo a?o han aumentado globalmente en Espa?a, pero algunos centros est¨¢n ganando terreno e incluso consiguen que algunas de las bacterias m¨¢s peligrosas retrocedan.
Se calcula que el 5-15% de las personas ingresadas, dependiendo del tipo de hospital, sufre una infecci¨®n contra¨ªda en el propio centro y que el 1% de los afectados fallece, lo que representa en Espa?a m¨¢s de 3.200 muertes al a?o. Adem¨¢s, en un 2,5% de los infectados se produce un agravamiento de su estado, que prolonga el ingreso hospitalario entre 4 y 10 d¨ªas. Del gasto sanitario que generan las infecciones nosocomiales en Espa?a nadie se atreve a dar cifras, pero en Europa algunos estudios lo estiman en 800 millones de euros, con tres millones los pacientes infectados.
El hospital Macarena de Sevilla reduce un 70% las infecciones por algunos organismos
Las bacterias de hospital afectan cada a?o a tres millones de europeos y matan a 3.200 espa?oles
Seg¨²n el Estudio de Prevalencia de las Infecciones Nosocomiales en Espa?a (EPINE), que realiza cada a?o desde hace 15 la Sociedad Espa?ola de Medicina Preventiva, Salud P¨²blica e Higiene (SEMPSPH), en 2005 la tasa de infecciones fue del 6,9% frente al 6,5% del a?o anterior. "Ha sido una sorpresa. El incremento de cuatro d¨¦cimas no es normal. Quiz¨¢ debamos atribuirlas al envejecimiento de la poblaci¨®n; a mayor edad, m¨¢s vulnerable es el paciente. Ahora la media de la persona que ingresa en un hospital es de 60 a?os, frente a los 50 de hace muy poco", explica Josep Vaqu¨¦, jefe del Servicio de Medicina Preventiva del hospital Vall d'Hebr¨®n de Barcelona, y uno de los coordinadores del estudio, que analiza 90 datos de 55.000 pacientes de 250 hospitales espa?oles, Aun as¨ª, el incremento es chocante. "El control de las infecciones nosocomiales es cada d¨ªa m¨¢s eficaz; eso est¨¢ claro", concluye. De hecho, Espa?a est¨¢ ligeramente por debajo de la media europea, que est¨¢ en el 7%, un valor considerado "aceptable" por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS).
En el hospital Macarena de Sevilla llevan 10 a?os combatiendo los microorganismos de hospital con un programa espec¨ªfico. "Gracias a ¨¦l hemos conseguido rebajar la tasa de infecciones hasta el 6,5%", afirma el infect¨®logo Jes¨²s Rodr¨ªguez Ba?os, director de la Unidad de Enfermedades Infecciosas y coordinador del Programa de Vigilancia y Control de la Infecci¨®n Nosocomial de este hospital. "Pero lo m¨¢s relevante es que la incidencia de infecciones por determinados microorganismos se ha reducido el 70%", a?ade.
Especialmente importante es la pr¨¢ctica erradicaci¨®n de la bacteria Staphylococcus aureus multirresistente: los casos anuales de infecci¨®n por este organismo han pasado de 200 a menos de 30. "El dato tiene m¨¢s m¨¦rito si tenemos en cuenta que hay hospitales que han desistido de controlarla debido a su complejidad", se?ala Rodr¨ªguez Ba?os. Tambi¨¦n han reducido unas 10 veces las infecciones por Acinetobacter baumannii, otra de las bacterias m¨¢s dif¨ªciles de controlar. Con este programa, el hospital sevillano ha conseguido evitar hasta el 20% de los sondajes urinarios y ha mejorado un 35% la profilaxis antibi¨®tica para la cirug¨ªa. Tambi¨¦n en las ¨¢reas de UCI y quir¨²rgicas las infecciones han disminuido sensiblemente, aunque precisar un porcentaje resulta dif¨ªcil ya que m¨¢s del 90% de las IN se producen aqu¨ª.
Dos han sido las claves para obtener estas reducciones. Por un lado, el enfoque multidisciplinar, con participaci¨®n directa de especialistas en enfermedades infecciosas, medicina preventiva, medicina intensiva y microbiolog¨ªa; por otro, "la actividad a pie de cama", en palabras de Rodr¨ªguez Ba?os: "Medimos variables y buscamos resultados cada d¨ªa; luego intentamos mejorar las pr¨¢cticas de control. Es decir, hacemos una evaluaci¨®n continua".
El trabajo desarrollado por la enfermer¨ªa ha sido esencial. Las enfermeras han hecho un seguimiento exhaustivo y continuo de las pr¨¢cticas hospitalarias para detectar los errores. "La metodolog¨ªa, pues, se basa en un trabajo global, con participaci¨®n activa de todo el hospital", resume Rodr¨ªguez Ba?os, enfoque que comparten Luis Mart¨ªnez y Rafael Cant¨®n, jefes del Servicio de Microbiolog¨ªa de los hospitales Marqu¨¦s de Valdecilla de Santander y Ram¨®n y Cajal de Madrid, respectivamente, donde vigilan, como en el caso sevillano, que la tasa de IN no se dispare.
Ambos especialistas destacan "la conveniencia de un abordaje multidisciplinar". Cant¨®n, por su parte, avisa de que "la presi¨®n asistencial" con la que trabajan los profesionales puede llegar a provocar que la vigilancia nosocomial "pase a segundo plano". Mart¨ªnez recuerda que "el verdadero peligro aparece cuando no existe la concienciaci¨®n colectiva que requiere combatir las IN".
Despu¨¦s de 10 a?os el hospital Macarena ha sacado conclusiones. "Los m¨¦dicos tal vez cre¨ªmos que la tecnolog¨ªa podr¨ªa acabar con las infecciones hospitalarias. Y no ha sido as¨ª. Al contrario, todos los d¨ªas descubrimos que cualquier instrumento, por sofisticado que sea, puede convertirse en un peligroso foco infeccioso si no se cumplen las normas de higiene m¨¢s b¨¢sicas", explica Rodr¨ªguez Ba?os. "La primera regla de oro para evitar las IN es lavarse las manos las veces que haga falta; m¨¢s de 50 veces al d¨ªa si es necesario", recalca. Lavado correcto, uso de guantes y utilizaci¨®n adecuada de sondas y cat¨¦teres venosos es la primera norma. "En una medicina cada vez m¨¢s tecnificada tendemos a olvidarnos de las cosas sencillas. Reivindicamos estos gestos, obvios si se quiere, pero absolutamente eficaces para combatir los microorganismos", advierte.
"Lo importante", insiste, "es el esfuerzo que los 4.500 profesionales del hospital vienen haciendo a diario para reducir la tasa de infecciones en un ¨¢rea sanitaria en la que se atiende a m¨¢s de medio mill¨®n de usuarios". Es frecuente la organizaci¨®n de seminarios y conferencias, con una elevada participaci¨®n. En la jornada celebrada el 31 de enero pasado se impartieron charlas y talleres cada media hora sobre higiene de manos y uso correcto de guantes entre las 7 de la ma?ana y las 9.30 de la noche. M¨¢s de 1.400 profesionales pasaron por esos talleres, en los que se les record¨® que para ganar la batalla contra las bacterias de hospital hay que mantenerse permanentemente en alerta.
Enfermer¨ªa, clave en la prevenci¨®n
Cada d¨ªa, enfermeras formadas espec¨ªficamente para combatir infecciones hospitalarias recorren el hospital Macarena de Sevilla de punta a cabo realizando tareas de recogida de datos epidemiol¨®gicos. Asimismo, vigilan que todo el mundo cumpla las normas, dan consejos, imparten informaci¨®n y formaci¨®n sobre la marcha... Y revisan el cumplimiento de las medidas indicadas. En sus visitas a los pacientes, las enfermeras resuelven las dudas de familiares, enfermos y compa?eros y, seg¨²n el infect¨®logo Jes¨²s Rodr¨ªguez Ba?os, no se retraen a la hora de recordarle a quien sea las normas m¨¢s elementales. "Ellas saben que la elevada carga de trabajo que tienen los sanitarios y la necesidad constante de incorporar nuevos procedimientos a su pr¨¢ctica favorecen, a veces, el olvido de las medidas de higiene m¨¢s sencillas", precisa.
Las enfermeras reciben a media ma?ana la informaci¨®n del Servicio de Microbiolog¨ªa sobre los nuevos casos de infecci¨®n diagnosticados; luego informan a los pacientes y dictan las medidas de control que tomar; anotan los datos epidemiol¨®gicos que, una vez analizados, servir¨¢n para conocer si est¨¢n siendo eficaces o no las medidas de control. La enfermera especialista debe asegurarse, entre otras cosas, de que se realiza una limpieza exhaustiva de la habitaci¨®n del enfermo afectado y de que la informaci¨®n, tanto a ¨¦l como a sus familiares, es la correcta y ha sido entendida. Tambi¨¦n se ocupan de coordinar que se cumplan las medidas de prevenci¨®n de infecciones nosocomiales en el traslado de los pacientes infectados. Finalmente, los datos obtenidos a diario se analizan y comentan en el equipo de control de infecciones, as¨ª como cualquier incidencia o problema que haya surgido al respecto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.