Pozo, h¨®rreo y huerta

Desanimado por la escasa acogida de sus pr¨¦dicas, el ap¨®stol Santiago emprendi¨® el regreso a Galilea en una nave de piedra cuya vela (la pedra Dos Cadr¨ªs) y el casco (la pedra de Abalar) se guardan como reliquias on¨ªricas en el santuario de la Virgen de la Barca. La leyenda sirve como reclamo para que hoy, a ocho kil¨®metros de este lugar, en la aldea de Santa Mari?a, la Casa de Trillo d¨¦ cobijo y sustento a los forofos del turismo rural gallego. Su origen se remonta al a?o 1558, y a trav¨¦s de los siglos ha visto crecer entre sus muros a ilustres personajes de la sociedad coru?esa. Uno de ellos, Pedro de Agar y Bustillo, ejerci¨® en Madrid como presidente de la Regencia durante el siglo XIX. Su foto y la de otros familiares ilustran la piedra vista de la escalera, a gusto de su actual propietario y heredero de los Agar, Jes¨²s Trillo. Con mimo, otros objetos de la casa han sido restaurados junto a algunos detalles m¨¢s contempor¨¢neos. La mayor de las seis alcobas exhibe una cama con dosel, dos butacas de mimbre y una mesita dispuesta frente a la galer¨ªa, con vistas al ¨¢rbol centenario del jard¨ªn. En el sal¨®n, diversas piezas de artesan¨ªa se exponen en una vitrina, mientras que en un rinc¨®n cuelga una original colecci¨®n de meigas. El resto de la propiedad ofrece un h¨®rreo, un pozo artesanal y una gran huerta de frutales.

Casa de Trillo (607 79 48 18; www.casadetrillo.com). Santa Mari?a, 1. Mux¨ªa (A Coru?a). Habitaci¨®n doble, 48 euros m¨¢s IVA (desayuno casero incluido)