Los italianos dejan el az¨²car
ARJ cerrar¨¢ su ¨²nica planta en Espa?a, tras 32 a?os de actividad
El sector remolachero azucarero en los ¨²ltimos a?os ha sido cosa de tres: Azucarera Ebro, la cooperativa Acor y Azucareras Reunidas de Ja¨¦n (ARJ). A partir de la pr¨®xima campa?a, ser¨¢ s¨®lo cosa de dos ante la decisi¨®n de ARJ de cerrar su ¨²nica planta en Espa?a ante la imposibilidad de mantener abierta la misma por falta de remolacha, tras la reforma de la OCM.
El grupo ten¨ªa una cuota de producci¨®n de casi 80.000 toneladas y con su salida en el sector s¨®lo quedan Azucarera Ebro y la cooperativa Acor
"Nos vemos forzados al cierre en contra de nuestra voluntad. Desde nuestra llegada a Espa?a hemos luchado para ganar cuota de mercado y mantener la actividad en una posici¨®n competitiva con el resto de las industrias, se?ala el presidente de la empresa Ivo Pessi. Pero, cuando las condiciones impuestas por Bruselas desincentivan el cultivo y no hay posibilidades para disponer de remolacha suficiente como para mantener la actividad de una factor¨ªa, la ¨²nica salida es dejar la actividad".
ARJ, propiedad en su mayor parte de la familia italiana Maraldi, se constituy¨® en Espa?a en 1968 para iniciar su actividad en el sector remolachero azucarero en 1973 con una producci¨®n de az¨²car de 6.680 toneladas anuales. Con la entrada de Espa?a en la UE en 1986, sobre una cuota nacional de un mill¨®n de toneladas, ARJ cont¨® con una asignaci¨®n de 69.739 toneladas de az¨²car. Esta cifra se increment¨® en los ¨²ltimos a?os hasta 79.137 por la reestructuraci¨®n que se produjo en el sector con la fusi¨®n entre Ebro y Sociedad General Azucarera.
Con esta cuota de producci¨®n, frente a unas cifras m¨ªnimas medias por planta para tener una posici¨®n de competitividad superior a las 100.000 toneladas, ARJ ha vivido desde su constituci¨®n en medio de los otros dos grandes grupos, siempre con la aspiraci¨®n de lograr aumentar su cuota.
La planta de ARJ en Linares era la ¨²nica f¨¢brica remolachera que contaba con dos ciclos de producci¨®n. Con la remolacha en las provincias andaluzas cubr¨ªa la campa?a de verano, con 37.717 toneladas. Por este motivo, este a?o la planta seguir¨¢ abierta hasta que se molture la remolacha del sur, pero no funcionar¨¢ ya en invierno para las 41.420 toneladas de remolacha de la zona centro.
?ltima cosecha
La ubicaci¨®n de la planta en Ja¨¦n no respondi¨® a criterios log¨ªsticos o econ¨®micos, sino que fue la ¨²nica opci¨®n que se brind¨® al grupo para instalarse en el sector. Ello le supuso una fuerte competencia con el resto de las industrias y soportar unos costes mayores, por la distancia de la planta hasta las zonas de cultivo. Sin embargo, gracias a la pol¨ªtica seguida por el grupo se hab¨ªa logrado una f¨¢brica competitiva en la que se han invertido unos 18 millones de euros en los ¨²ltimos a?os. En lo que afecta a la producci¨®n, el grupo desarroll¨® planes de ayuda y asesoramiento a los cultivadores para aumentar los rendimientos por hect¨¢rea y mejoras en la calidad de la materia prima. Esos resultados se concretaron en un incremento de la producci¨®n de remolacha del 50% y en una mejora de cuatro grados en la calidad.
El presidente de ARJ, Ivo Pessi, lamenta que la reforma de la OCM de la remolacha suponga una puerta abierta para que los agricultores abandonen la actividad. Pero, desde la perspectiva industrial, considera inviable mantener la planta ante la inexistencia del cultivo.
Biomasa como alternativa
Ja¨¦n fue el punto elegido por ARJ para su desembarco en Espa?a y all¨ª va a seguir en el futuro aunque de forma diferente.
Con la planta abierta hasta el pr¨®ximo verano, pero con la decisi¨®n de cierre ya adoptada, el grupo italiano ha constituido la sociedad Linares Biodi¨¦sel Techonology para fabricar y comercializar productos biocarburantes y los derivados de aceite y biomasa. Para el desarrollo de esta actividad se construir¨¢ una nueva planta en el t¨¦rmino de Linares, en Ja¨¦n, cerca de la actual, con una capacidad para la producci¨®n de 100.000 toneladas de biodi¨¦sel a partir de aceites de colza, palma, soja o girasol de cultivos realizados tanto en las provincias andaluzas como en Castilla-La Mancha.
La inversi¨®n para poner en marcha esta planta ser¨¢ de 25 millones de euros, de los que el 30% lo aportan los accionistas del grupo y el 70% con cr¨¦ditos. En principio, parte de esos aceites ser¨¦n importados hasta el desarrollo de unas siembras suficientes en la zona y muy especialmente de colza. No se descarta tener una instalaci¨®n para envasado del az¨²car comunitario producido por el grupo.
Finalmente, la firma italiana ha encargado un estudio a la Universidad de Ja¨¦n , con la presencia de la organizaci¨®n agraria UPA, para ver la posibilidad de obtener bioetanol a partir del ram¨®n del olivo.
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