Todas las caras de Venezuela
ESTE VOLUMEN recoge los cinco libros de cuentos escritos por Uslar: Barrab¨¢s y otros relatos (1928), Red (1936), Treinta hombres y sus sombras (1949), Pasos y pasajeros (1966) y Los ganadores (1980). Hay ah¨ª m¨¢s de cincuenta a?os de trabajo, simult¨¢neos a la intensa labor del autor en la vida p¨²blica y literaria de su pa¨ªs -despu¨¦s de su ¨²ltimo libro de cuentos a¨²n public¨® dos novelas: La isla de Robinson (1981) y La visita en el tiempo (1990)-. Una de las ideas centrales del conciso y excelente pr¨®logo del ensayista Gustavo Guerrero a estos Cuentos completos es que, en el relato, Uslar supo darse una libertad que, en los otros g¨¦neros, limitaba con la dimensi¨®n pol¨ªtica de su figura: "Ninguno de los varios autores que fue nos resulta hoy tan l¨²cido, vers¨¢til y cercano como el cuentista", afirma. De este modo, se apuesta por un Uslar cuentista que podr¨ªa ganarse una posteridad nueva y en cierto modo inesperada, independiente del bronce y del prohombre.
Como muchos escritores latinoamericanos del XX, en Uslar aparece la voluntad de representar escenas, paisajes, situaciones y personajes caracter¨ªsticos de la vida nacional mediante tratamientos est¨¦ticos contempor¨¢neos: hacer literatura moderna con materia aut¨®ctona. En Barrab¨¢s aparece a¨²n una impronta modernista, con relatos basados en la mitolog¨ªa b¨ªblica o en el tratamiento erudito de fuentes cl¨¢sicas. Hay una notoria voluntad de cincelar una prosa art¨ªstica, atravesada de aires ¨¦picos: "Miralejos: muchos hombres, mucha tierra y un amo".
Pero en los libros posteriores el foco es m¨¢s realista, con t¨¦cnicas cercanas a las del montaje inspirado en el cine y el mon¨®logo interior. El conuco -la peque?a explotaci¨®n agr¨ªcola del interior venezolano- pasa a ser el escenario por excelencia. El campesino trastornado por la sequ¨ªa (como en 'Lluvia', uno de sus cuentos c¨¦lebres), el loco ('El patio del manicomio'), el titiritero, el obrero, el hu¨¦rfano, el soldado, el hacendado, el marinero pintan un vasto mural de situaciones t¨ªpicas. Seg¨²n Guerrero, son textos "en la frontera entre antropolog¨ªa, folclore y literatura". En los ¨²ltimos libros aparece tambi¨¦n la vida urbana de Caracas, el miedo, la violencia, la soledad, la represi¨®n. Algunas de las mejores sorpresas suceden cuando se alejaba del color local, como el interesante 'Sime¨®n Calamaris', en que un estudiante de medicina acaba asumiendo la identidad del hombre cuyo cad¨¢ver debi¨® diseccionar.
El estilo de Uslar es, en el cuento, sensiblemente menos marm¨®reo que en la novela y alejado de la solemnidad a la que tiende en el ensayo. Las escenas rurales, cargadas de simbolismo tel¨²rico y violencia soterrada, recuerdan a veces a Horacio Quiroga, aunque sin su delirio genial. Es la inmersi¨®n en un mundo duro y ¨¢spero, apenas sostenido sobre la nobleza y la lealtad, valores transversales a los r¨ªgidos estratos sociales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.