"Baroja es interesante porque en Espa?a la novela estaba lejos del pensamiento"

"Quien lee una novela de P¨ªo Baroja sigue con otra", sostiene Francisco Flores Arroyuelo (Bilbao, 1939), profesor en la c¨¢tedra de Literaturas Rom¨¢nicas y Etnograf¨ªa de la Universidad de Murcia. Es un autor que "engancha" y que "revolucion¨®" la novela en Espa?a al ser uno de los primeros en introducir en ella el pensamiento moderno, a?ade este especialista, quien el pasado mi¨¦rcoles inaugur¨® en San Sebasti¨¢n las jornadas Baroja y el pensamiento. Coordinado por F¨¦lix Mara?a, este ciclo, que concluir¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 25, ha sido organizado por la Diputaci¨®n de Guip¨²zcoa para conmemorar el 50? aniversario de la muerte del escritor donostiarra.

Pregunta. ?Qu¨¦ llev¨® a P¨ªo Baroja a interesarse tanto por el pensamiento filos¨®fico?

"Ser¨ªa una tonter¨ªa de los nacionalistas no reconocer a un escritor por no ser de su credo"

"Baroja ser¨ªa tambi¨¦n muy cr¨ªtico con la sociedad actual"

Respuesta. Baroja empez¨® interes¨¢ndose, sobre todo, por la ciencia. Era m¨¦dico y la medicina que se explicaba en la universidad madrile?a donde estudi¨® le parec¨ªa una cosa de magos m¨¢s que otra cosa. Se form¨® en el concepto de la ciencia de Claude Bernard, un investigador y m¨¦dico franc¨¦s que cre¨® la escuela de la doctrina experimental. Eso le llev¨® a otra serie de pensadores.

P. ?Cu¨¢les fueron sus pensadores de referencia?

R. Al principio est¨¢ muy clara la influencia de Schopenhauer. De hecho, la tesis doctoral de Baroja fue sobre el dolor, lo que indica claramente por d¨®nde se orient¨®. Sus novelas del comienzo son en el fondo una meditaci¨®n sobre el dolor, aunque en trabajos posteriores muestra tambi¨¦n su inter¨¦s por el vitalismo de Nietzsche. El primer Baroja es sumamente interesante, porque en Espa?a la novela iba por otros derroteros, estaba lejos del concepto de ciencia, de pensamiento, de los fil¨®sofos modernos.

P. ?Se puede decir entonces que Baroja revolucion¨® de alg¨²n modo la novela en Espa?a?

R. Si. Bueno, ¨¦l solo no; estaba Unamuno, que tambi¨¦n prest¨® gran atenci¨®n al pensamiento. Unamuno fue m¨¢s fil¨®sofo que Baroja, pero Baroja fue un fil¨®sofo encubierto. Pens¨® que a trav¨¦s de la novela se pod¨ªa explicar.

P. ?Se le puede considerar como un pensador?

R. En principio fue un aprendiz de pensador y luego comenz¨® a difundir el pensamiento de Schopenhauer, Nietzsche,... ?l es un pensador, sobre todo, sobre una valoraci¨®n del dolor como motor de la persona humana y es es verdaderamente original.

P. ?Se debat¨ªa entre el pesimismo y el vitalismo?

R. Era un hombre pesimista, pero, al mismo tiempo, defend¨ªa el vitalismo. Es decir, ante la poltrona, el no hacer nada, la comodidad, la indiferencia ante la vida, ¨¦l predicaba la necesidad de reaccionar, tener voluntad, trabajar hondo e ir a la verdad. Se habla mucho de su pesimismo, pero tambi¨¦n es un hombre vitalista. Por eso, cre¨® personajes como Andr¨¦s Hurtado, de El ¨¢rbol de la ciencia, que era muy introvertido, pero tambi¨¦n el Juan de Aguirre de Las inquietudes de Shanti And¨ªa.

P. ?Qu¨¦ opina de la recurrente pol¨¦mica entre nacionalistas vascos y no nacionalistas en torno a la figura de Baroja?

R. ?l era antinacionalista y lo dec¨ªa. Me parecer¨ªa una tonter¨ªa por parte de los nacionalistas vascos no querer reconocer los valores de un escritor porque no sea de su credo. Una cosa no quita la otra.

P. El escritor donostiarra aparece como un hombre cr¨ªtico con la sociedad en la que le toc¨® vivir. ?C¨®mo cree que ver¨ªa la Espa?a actual?

R. Hoy tambi¨¦n ser¨ªa muy cr¨ªtico. La vida ha cambiado, hay m¨¢s dinero, se viaja m¨¢s, pero hay mucha gente con torpeza en la cabeza. Y el problema est¨¢ ah¨ª. Hay que leer, pensar, reflexionar, querer m¨¢s a la gente.

P. ?Y que dir¨ªa del llamado conflicto vasco?

R. Ver¨ªa el Pa¨ªs Vasco integrado en Espa?a, como una parte m¨¢s. A lo largo de los siglos los vascos han estado formando la historia de Espa?a. Ah¨ª est¨¢n Elcano, San Ignacio, Unamuno,...