Barcelona se convierte en puerto base del mayor crucero del Mediterr¨¢neo

Desde esta semana, el viejo Mediterr¨¢neo es surcado por un nuevo barco, el Voyager of the Seas, perteneciente a la naviera Royal Caribbean y que tendr¨¢ como puerto base la ciudad de Barcelona. Es el mayor que navegar¨¢ por el Mare Nostrum. Pesa 147.000 toneladas, mide 311 metros de eslora, 48 de manga y 68 de altura. En su interior hay 1.557 camarotes dobles, alguno de ellos de m¨¢s de 100 metros cuadrados, sin contar la terraza.

El Voyager of the Seas admite un total de 3.114 pasajeros y 1.181 tripulantes. Como homenaje a Barcelona, la zona comercial ha sido denominada Rambla of the Seas, seg¨²n inform¨® la compa?¨ªa.El Voyager of the Seas parti¨® el viernes de Barcelona en viaje inaugural. Un viaje corto, porque vuelve hoy por la ma?ana al puerto para prepararse e iniciar las rutas tur¨ªsticas el pr¨®ximo martes.

Lleno, el barco es una peque?a torre de Babel. No s¨®lo porque es m¨¢s alto que la estatua de Col¨®n, sino porque entre sus pasajeros hay una media de 55 nacionalidades mientras que entre la tripulaci¨®n esa media sube hasta 66. No todos, claro est¨¢, hablan distintas lenguas. Pero la variedad idiom¨¢tica es m¨¢s que notable. La lengua oficial en el Voyager es el ingl¨¦s, pero el castellano, el franc¨¦s, el italiano, el portugu¨¦s y el alem¨¢n son idiomas hablados por buena parte de los empleados del buque.

La naviera propietaria del Voyager, la Royal Caribbean, es noruega en origen, aunque hoy s¨®lo el 23% de las acciones siguen en manos del pa¨ªs n¨®rdico. El 28% es estadounidense y el resto cotiza en Bolsa. La compa?¨ªa es una de las principales empresas cruceristas del mundo. Tiene 29 barcos con l¨ªneas en el Caribe, el Pac¨ªfico californiano, Hawai, y Alaska y proyecta establecerse tambi¨¦n en Australia. Dispone de una cuota de mercado del 22%, aunque el porcentaje de su participaci¨®n en Europa es menor: el 10%, y en Espa?a se queda en el 8%, unas cifras que pretende mejorar con el Voyager, un barco, aseguran sus directivos, que no va a competir en el mercado "con los precios, sino con la calidad". En Europa la Royal Caribbean opera desde Roma, Venecia, Harwich, Southhampton y Barcelona.

La empresa fletar¨¢ seis nuevos barcos de aqu¨ª a 2009, uno de ellos mayor incluso que el Voyager. Se llamar¨¢ G¨¦nesis 1 y tendr¨¢ capacidad para 5.400 personas. La intenci¨®n de la naviera es alcanzar en cinco a?os el 20% de cuota de mercado en Espa?a, con un crecimiento sostenido del 30%.

El crucerista medio, seg¨²n una encuesta efectuada entre el p¨²blico espa?ol, es un adulto de entre 35 y 54 a?os que opta por un barco u otro en funci¨®n del servicio que se le ofrece, en primer lugar; en segundo lugar tiene en cuenta el itinerario, luego el tipo de camarote. El precio figura como quinto criterio para contratar un crucero y el idioma del mismo, en sexto.

El mercado de cruceros ha crecido de modo espectacular desde 1992. Hasta esa fecha, el puerto de Barcelona contemplaba el movimiento de pasajeros de este tipo de barcos como un elemento casi residual. De Barcelona salen cruceros de modo regular desde 1959, seg¨²n explic¨® el director del Puerto, Josep Oriol, pero sobre todo desde finales de la d¨¦cada de 1960 hasta los Juegos Ol¨ªmpicos, la media de viajeros apenas rozaba las 100.000 personas. Desde entonces, la cifra no ha dejado de crecer, hasta alcanzar el pasado a?o la cantidad de 1.224.575, la mitad de ellos, aproximadamente, tienen origen o destino (o ambas cosas) en Barcelona, y el resto pertenece a buques que parten de otros puertos y que hacen escala en Barcelona. El crecimiento ha sido tan espectacular que el Puerto de Barcelona ha habilitado una zona para el atraque de estos grandes barcos. Una de estas terminales ha sido costeada con capital privado.

El Voyager of the Seas tendr¨¢ como base el puerto de Barcelona hasta el pr¨®ximo mes de noviembre. En esa fecha, con la bajada de las temperaturas, la empresa lo trasladar¨¢ al Caribe. "Nos vamos a hibernar, como los osos", asegura Jos¨¦ Mar¨ªa Falceto, director hotelero del barco, nacido en una localidad de Huesca pero formado en Estados Unidos.