"La pintura es compartir; as¨ª lo he sentido toda la vida"

Ana Izura (Tafalla, 1943) ha encontrado en la pintura la mejor forma de compartir su vida. "Siempre he pensado que no tiene sentido realizar una obra que te desahoga en el momento si luego no le va a servir a nadie", afirma la artista. "La pintura es compartir; as¨ª lo he sentido toda la vida". Lo vio claro ya de ni?a, cuando Gaspar Montes Iturrioz supervisaba sus primeros trabajos. Por eso no se esconde. Izura, quien presenta actualmente su primera exposici¨®n individual en Ir¨²n, se muestra ante el espectador con todos sus altibajos an¨ªmicos y le regala su pasi¨®n por la naturaleza, hilo conductor de toda su trayectoria art¨ªstica.

La muestra, que permanecer¨¢ abierta en la casa de cultura Amaia hasta el pr¨®ximo 19 de julio, no es una antol¨®gica, pero resume tres lustros de la actividad creadora de esta artista, desde principios de los a?os noventa hasta hoy. "Es un picoteo para que la gente vea mi evoluci¨®n", explica ella. Lo primero que queda claro en este recorrido es que la naturaleza siempre ha sido su asuntoestrella: hace a?os, en forma de paisajes de colores intensos; hoy, en manifestaciones m¨¢s sutiles, como gotas de agua o detalles de la hierba. Y tambi¨¦n que a lo largo de su carrera ha ido saltando de una disciplina a otra sin traumas, del dibujo a la pintura, el grabado o la escultura. "No creo en las disciplinas. Todas me sirven en un momento dado para expresarme", apunta.

"No creo en las disciplinas. Todas me sirven en un momento dado para expresarme"

La artista, licenciada en Bellas Artes, estudi¨® pintura y grabado en Madrid y bebi¨® de las corrientes europeas durante sus a?os en B¨¦lgica y Par¨ªs. No ha dejado jam¨¢s de estudiar. "Hay que llenar el saco, porque si no luego no te sale nada. Hay que investigar, probar, leer, escuchar m¨²sica, porque la pintura es vida, una actitud de vida", sentencia la artista. "Tener un don para pintar no es ning¨²n m¨¦rito. Con eso no se hace nada. Luego hay que trabajar muy duro".

Izura demuestra en esta exposici¨®n que a lo largo de estos a?os no s¨®lo se ha dejado contaminar por la naturaleza. Tambi¨¦n se ha hecho permeable al arte de la calle, que reivindica con su serie Grafittis, y ha ido evolucionando de materiales m¨¢s limpios a otros reciclados. "Ahora mismo me ser¨ªa imposible pintar en un soporte completamente inmaculado", confiesa la pintora. "Necesito que haya sido vivido o machacado". Una de sus piezas m¨¢s recientes -no llevan t¨ªtulo, porque no le gusta hacer "literatura"- surge precisamente de un viejo lienzo abandonado que ha recortado para recrear un paisaje con pintura, cristales, papel vegetal y otros materiales.

Izura siempre se mueve a caballo entre la figuraci¨®n y la abstracci¨®n. "Quiz¨¢ sea porque soy contradictoria", dice. "Cuando algo me inspira despego, me voy, pero de repente vuelvo a agarrarme a la realidad". La artista ha vivido durante muchos a?os en Madrid. De vuelta a casa, reparte su tiempo entre la creaci¨®n y la ense?anza. Vuelve a compartir. ?Un ejemplo? El libro de autor dedicado a los caracoles que ha realizado con algunos alumnos.