Espa?a es el pa¨ªs europeo con menos trabas para la pensi¨®n de viudedad

Las condiciones para acceder a una pensi¨®n de viudedad en Espa?a son las m¨¢s laxas de la Uni¨®n Europea, aunque la cuant¨ªa es a¨²n muy baja. Esa prestaci¨®n, que cobran 2,2 millones de personas, se concede de forma vitalicia e independientemente de las rentas. En el resto de Europa suele estar vinculada a los ingresos familiares o tiene car¨¢cter temporal. La mayor dependencia econ¨®mica de la mujer durante a?os explica la excepci¨®n espa?ola.

Una viuda con propiedades inmobiliarias, un salario y divorciada de su c¨®nyuge tiene derecho a una pensi¨®n ordinaria en Espa?a. Es pr¨¢cticamente el ¨²nico pa¨ªs de la Uni¨®n Europea donde ese tipo de perfil no supone una rebaja o directamente la p¨¦rdida del derecho a la pensi¨®n, seg¨²n datos de varios estudios de expertos y del Ministerio de Trabajo.

La situaci¨®n de dependencia que la mayor¨ªa de las mujeres ha mantenido durante a?os respecto a su c¨®nyuge explica esta estructura en Espa?a. "La principal finalidad de la pensi¨®n es suplir rentas de la unidad familiar. Y hace unos a?os la mayor¨ªa de las mujeres no trabajaba", explica C¨¦sar G¨®mez Garcill¨¢n, subdirector general de Gesti¨®n de Prestaciones del Instituto Nacional de la Seguridad Social.

Italia, culturalmente pr¨®xima a Espa?a, es el pa¨ªs cuyo modelo de viudedad m¨¢s se asemeja. Pero la situaci¨®n comienza a cambiar. En Italia conviven dos reg¨ªmenes: uno anterior a 1995, que permite compatibilizar la pensi¨®n con otras rentas, y el moderno, que vincula el derecho a los ingresos percibidos.

Cambios en el futuro

Algo similar ocurrir¨¢ pronto en Espa?a. El acuerdo de pensiones que Gobierno, patronal y sindicatos firmar¨¢n este mes traslada al Parlamento la responsabilidad de pensar en qu¨¦ quedar¨¢ esta prestaci¨®n para los nacidos a partir de enero de 1967. "A medida que la mujer se va incorporando al trabajo, desaparece la finalidad de la pensi¨®n como sustituci¨®n de rentas", a?ade el experto de la Seguridad Social. En la actualidad, la pensi¨®n asciende al 52% de la base reguladora del c¨®nyuge (el 70% si tiene cargas familiares o si la pensi¨®n constituya la principal fuente de ingresos). El Gobierno ha renunciado, al menos por el momento, a retirar esa prestaci¨®n a los beneficiarios con ingresos m¨¢s altos, como en un principio se plante¨®.

Un pa¨ªs con alto nivel de bienestar social como Dinamarca no tiene establecida una pensi¨®n de viudedad. En Suecia es temporal y en Noruega est¨¢ vinculada a los recursos. En los pa¨ªses n¨®rdicos, alrededor del 60% de las mujeres trabaja fuera de casa.

Lo que s¨ª ocurre en esos Estados es que, cuando existe pensi¨®n de viudedad, se extiende a las parejas de hecho. Algo menos de la mitad de los pa¨ªses tienen reconocida alg¨²n tipo de ayuda en caso de convivencias sin matrimonio, principalmente cuando existen hijos. En Espa?a el acuerdo de pensiones introducir¨¢ por primera vez la prestaci¨®n para parejas de hecho, con requisitos de convivencia y de dependencia econ¨®mica.

La menor protecci¨®n por viudedad corresponde en general a los pa¨ªses del Este. En Letonia, por ejemplo, no existe prestaci¨®n salvo excepciones; en Lituania se cuantifica en un 20% de la pensi¨®n del fallecido y en Eslovaquia dura un a?o.

Uno de los elementos m¨¢s homog¨¦neos es la p¨¦rdida del derecho por nuevo matrimonio o si la pareja se divorci¨® antes del fallecimiento. En Espa?a ninguna de estas circunstancias resta el derecho (s¨®lo lo reduce en caso de que el fallecido se hubiera vuelto a casar). En este terreno, Polonia es m¨¢s ben¨¦vola que Espa?a: los beneficiarios conservan la prestaci¨®n aunque vuelvan a casarse.