Los nuevos violentos
Una nueva generaci¨®n de malhechores ha irrumpido en Catalu?a imponiendo m¨¦todos diferentes de delincuencia, que se ha cebado sobre el estamento m¨¢s d¨¦bil y desprotegido: el domicilio y la familia.
El fen¨®meno ha llegado de los pa¨ªses del este de Europa, especialmente de Ruman¨ªa y Albania, de la mano de ex miembros de la polic¨ªa y del ej¨¦rcito que han configurado bandas paramilitares, y han tomado el relevo de las antiguas bandas aut¨®ctonas que en la d¨¦cada de los a?os 1970 y 1980 se dedicaban especialmente al atraco y asalto de las entidades bancarias.
Estas nuevas bandas, muy jerarquizadas y disciplinadas, no dudan en utilizar los m¨¦todos m¨¢s violentos y agresivos, entre los que se encuentran la extorsi¨®n, el secuestro o incluso la tortura para conseguir de sus v¨ªctimas el mayor beneficio posible.
Los expertos en seguridad aseguran que los dirigentes de estos grupos de malhechores trabajan con m¨¦todos y t¨¦cnicas avanzados, sumamente profesionalizados, que en muchas ocasiones rivalizan con los utilizados por las polic¨ªas locales.
Pero adem¨¢s, los nuevos violentos utilizan en muchos casos los m¨¦todos propios de las guerrillas suramericanas, empleados en los ¨²ltimos a?os por las organizaciones paramilitares de Colombia, Argentina y Brasil.
La rapidez con que llevan a cabo sus acciones, se complementa con la celeridad con la que desaparecen del lugar del crimen. Las operaciones efectuadas por estas nuevas bandas contra el ¨¢mbito familiar, ha dejado atr¨¢s a los murcigleros o silenciosos, que delinquen de manera mucho m¨¢s artesanal y que, como las bandas violentas actuales, se dedican a robar en domicilios.
Los murcigleros, aparecidos en el Levante espa?ol hace poco menos de tres a?os, prefieren asaltar los domicilios por la noche, mientras las v¨ªctimas estaban durmiendo, y tienen especial cuidado en no despertarlos para pasar ellos al mismo tiempo totalmente inadvertidos.
La aparici¨®n de las organizaciones violentas de delincuentes organizados ha aparecido en un momento clave, mientras en Catalu?a se produce un relevo policial, y los cuerpos de seguridad del Estado son desplazados por la polic¨ªa auton¨®micas. El relevo de los cuerpos de seguridad est¨¢ creando momentos de confusi¨®n y descoordinaci¨®n, que ha sido explotado por estas organizaciones.
Las organizaciones sindicales del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y de la Guardia Civil propugnan la revisi¨®n del modelo policial espa?ol impuesto en cada comunidad aut¨®noma y reclaman la estructuraci¨®n de un nuevo concepto policial, que permita crear una instituci¨®n de ¨¢mbito estatal, plenamente aceptada al mismo tiempo por todas las administraciones. La propuesta trata de repetir el modelo policial utilizado en Estados Unidos, donde hay un cuerpo estatal llamado FBI.
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