Lluvia r¨¦cord de dividendos empresariales
Las principales sociedades cotizadas espa?olas reparten a sus accionistas m¨¢s de 8.200 millones en un mes
Las grandes empresas cotizadas espa?olas repartir¨¢n durante este mes de julio m¨¢s de 8.200 millones de euros en dividendos a sus accionistas. Es la mayor concentraci¨®n de pagos a los socios vivida jam¨¢s en la Bolsa espa?ola, equivalente a lo que hace pocos a?os se repart¨ªa a lo largo de todo un ejercicio. Los buenos resultados empresariales, el prestigio recobrado por el dividendo y algunas operaciones especiales explican ese r¨¦cord.
Los beneficios de las empresas del mercado continuo, que crecieron un 40% en 2005, ha permitido mejorar la retribuci¨®n al accionista
Telef¨®nica M¨®viles abonar¨¢ en julio 2.772 millones a sus accionistas en el mayor dividendo pagado jam¨¢s por una empresa cotizada espa?ola
En contra de lo que a veces se cree, la renta variable no recibe ese nombre por las fluctuaciones constantes que experimenta la cotizaci¨®n de las acciones. La renta que var¨ªa, en el caso de t¨ªtulos representativos de la propiedad de una empresa como son las acciones, es el dividendo. El precio de los t¨ªtulos de renta fija, como los bonos, tambi¨¦n var¨ªa, pero de antemano se conoce el importe del cup¨®n. En las empresas no se conoce cu¨¢l ser¨¢ el cup¨®n o dividendo que se cobrar¨¢, pues depende de los resultados de la empresa y de su pol¨ªtica de retribuci¨®n al accionista: es, por tanto, variable. Pero esa variaci¨®n, en los ¨²ltimos a?os, s¨®lo tiene un signo, ascendente.
El dividendo como concepto entr¨® en crisis en la antesala de la burbuja tecnol¨®gica. Repartirlo era como admitir que la empresa no sab¨ªa d¨®nde invertir esos fondos para sacarle una mayor rentabilidad. Juan Villalonga, al frente de Telef¨®nica, decidi¨® suprimirlo y los inversores lo aplaudieron. Las firmas de Internet cuyas cotizaciones tocaron los cielos hace seis a?os no es que no repartiesen dividendos, es que directamente no lograban beneficios, pero ten¨ªan igualmente el benepl¨¢cito del mercado.
Fortaleza de los beneficios
Con el estallido de la burbuja el dividendo fue recobrando protagonismo. Las empresas capaces de generar flujos de caja s¨®lidos y recurrentes y de repartirlos a sus accionistas se convirtieron en refugio de los inversores. El dividendo recuper¨® el prestigio perdido y desde entonces no ha hecho m¨¢s que crecer. La retribuci¨®n a los accionistas v¨ªa dividendo o mediante devoluciones de nominal o prima de emisi¨®n ha aumentado a un ritmo medio del 30% anual en los ¨²ltimos tres ejercicios, y este a?o se acent¨²a la tendencia al alza.
La primera explicaci¨®n al incremento de los dividendos es la buena evoluci¨®n de los resultados. Muchas empresas pagan en 2006 los dividendos con cargo a los beneficios de 2005 y el pasado ejercicio fue excelente desde el punto de vista de los resultados empresariales. Los beneficios de las empresas del mercado continuo crecieron m¨¢s del 40% el pasado a?o gracias a la combinaci¨®n de un fuerte crecimiento org¨¢nico con una agresiva y rentable pol¨ªtica de adquisiciones.
El aumento de los beneficios, sin embargo, no lo explica todo. Las empresas han decidido mejorar activamente la retribuci¨®n a sus accionistas para ganarse la confianza del mercado y han emprendido pol¨ªticas de dividendo m¨¢s agresivas.
Y a eso se han sumado algunos dividendos extraordinarios relacionados con operaciones corporativas, entre ellos los dos mayores que se reparten en julio.
De las 35 empresas del Ibex, 16 han anunciado dividendos para el presente mes de julio. En total repartir¨¢n 8.229 millones entre pagos ordinarios y extraordinarios.
Telef¨®nica M¨®viles protagonizar¨¢ el mayor dividendo pagado jam¨¢s por una empresa cotizada espa?ola. Son 2.772 millones de euros, a raz¨®n de 64 c¨¦ntimos por acci¨®n, de los que 43,5 tienen consideraci¨®n de dividendo ordinario y 20,5, de extraordinario. El principal beneficiario del pago de ese dividendo es Telef¨®nica, que controla el 92,5% del capital y obtendr¨¢ ese porcentaje del dividendo, pero la causa del pago no es tanto la matriz como los minoritarios. Ese dividendo se aprob¨® para endulzar las condiciones de la fusi¨®n por absorci¨®n de Telef¨®nica M¨®viles por parte de Telef¨®nica. El objetivo era acercarse a los 11 euros por acci¨®n que se fijaron como precio de las acciones en la oferta p¨²blica con la que sali¨® a Bolsa la filial. Al final, sin embargo, las condiciones aprobadas supusieron valorar las acciones de M¨®viles en 10,84 euros, efectuando los ajustes por dividendos correspondientes.
El otro gran pago del mes de julio es el que abona Endesa ma?ana a sus accionistas y que ha generado pol¨¦mica desde que empez¨® a hablarse de ¨¦l. Son 2.218 millones de euros, a raz¨®n de 2,095 euros por acci¨®n que se descomponen en 0,8284 euros de dividendo complementario ordinario con cargo a los resultados de 2005 y 1,2666 euros de dividendo extraordinario por plusval¨ªas contables derivadas de desinversiones (sobre todo la venta de Auna). El pago de Endesa forma parte de un plan de reparto de dividendos de 7.000 millones en cinco a?os, que la el¨¦ctrica presidida por Manuel Pizarro lanz¨® como defensa frente a la OPA hostil de Gas Natural. Cuando se propuso el dividendo, ¨¦ste actuaba como una especie de contraopa. Los que aceptaran la oferta de Gas Natural no lo cobrar¨ªan. Pero la entrada en juego de E.ON y de los jueces y la consiguiente dilataci¨®n de los plazos ha hecho que el dividendo se reparta con las ofertas a¨²n sobre la mesa, lo que tendr¨¢ consecuencias sobre las mismas.
La alemana E.ON restar¨¢ 2,095 euros por acci¨®n de los 27,5 de su oferta p¨²blica de adquisici¨®n sobre Endesa, mientras que Gas Natural descontar¨¢ s¨®lo el dividendo extraordinario. Eso s¨ª, los t¨ªtulos de la gasista -con los que pagar¨ªa parte de su oferta- descontar¨¢n a su vez pasado ma?ana un dividendo de 53 c¨¦ntimos.
Los dividendos de Telef¨®nica M¨®viles y Endesa suman casi 5.000 millones, de los que m¨¢s de 3.000 son extraordinarios. Adem¨¢s de Telef¨®nica M¨®viles y de Endesa, tambi¨¦n Inditex, que retribuye a sus accionistas una vez al a?o, descompone su dividendo en ordinario y extraordinario. Pero en este caso no se trata de razones corporativas, sino de que la buena marcha de la empresa genera un exceso de caja que prefiere entregar a los accionistas.
Puntuales a su cita de julio llegan tambi¨¦n las otras dos grandes el¨¦ctricas (Iberdrola y Uni¨®n Fenosa) y Repsol, todas ellas con dividendo r¨¦cord que son el reflejo de la buena evoluci¨®n de sus resultados. Todas ellas pagan dividendos de forma semestral, mientras que los principales bancos remuneran a sus accionistas cada tres meses, esta vez tambi¨¦n de modo creciente. Bankinter, Popular y BBVA pagan dividendo en julio y Santander en agosto.
En general, la retribuci¨®n a los accionistas est¨¢ siendo considerada cada vez m¨¢s un factor de atracci¨®n para analistas e inversores. "Invertir en compa?¨ªas con una alta y sostenible tasa de crecimiento del dividendo es una de nuestras principales recomendaciones de inversi¨®n", indica Sharon Bell, de Goldman Sachs International, que a?ade que la estrategia de apostar por ese tipo de compa?¨ªas ha dado un 10% de rentabilidad relativa adicional en los ¨²ltimos nueve meses.
El nuevo tratamiento fiscal perjudica a las rentas medias y bajas
La fiscalidad de los dividendos ha sido siempre un elemento clave a la hora de comparar la rentabilidad por esta v¨ªa frente a la renta generada por otro tipo de activos. La teor¨ªa se?ala que puesto que las empresas ya tributan por los beneficios que obtienen, no debe gravarse adem¨¢s el reparto de esos beneficios a los due?os de la compa?¨ªa, sus accionistas. ?sa es la justificaci¨®n de la deducci¨®n por doble imposici¨®n de dividendos que actualmente figura en la normativa del impuesto sobre la renta.
Tal y como est¨¢ ahora configurada, esa deducci¨®n llega a generar un impuesto negativo o cr¨¦dito fiscal para el caso de los contribuyentes con los tipos marginales m¨¢s bajos.
Con el sistema actual, el contribuyente integra el 140% del dividendo percibido en su base imponible, pero luego se aplica una deducci¨®n en la cuota del 40%. El juego de esas dos variables se traduce en que los dividendos quedan, en la pr¨¢ctica, exentos para un tipo marginal del 28%. Para los contribuyentes con tipo marginal inferior a esa cifra, los dividendos no s¨®lo no tributan, sino que generan un cr¨¦dito fiscal que da derecho a recuperar toda la retenci¨®n y adem¨¢s a descontar parte de la cuota a pagar por otras rentas. En cambio, para los contribuyentes con los tipos marginales m¨¢s altos se traduce en una tributaci¨®n desde el primer euro de dividendo y para contribuyentes con un tipo marginal del 45% es en la pr¨¢ctica del 23%.
Con la reforma fiscal en marcha, se fija una tributaci¨®n lineal del 18% acompa?ada de una exenci¨®n para el cobro de los 1.500 primeros euros, pero, a cambio, se elimina la deducci¨®n por doble imposici¨®n y la vinculaci¨®n al tipo marginal del contribuyente. La aplicaci¨®n combinada del tipo ¨²nico y la exenci¨®n crea una situaci¨®n en la que salen perjudicados -en la tributaci¨®n por dividendos- los contribuyentes con las rentas m¨¢s bajas, pues dejan de lograr ese cr¨¦dito fiscal, y favorecidos aquellos con las rentas m¨¢s altas.
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