Nace la Casa Roja de Legazpi
Un proyecto a base de puertas gana el concurso para el centro de arte del Matadero
El concurso para la conversi¨®n del matadero de Legazpi en emblema de los espacios de arte contempor¨¢neo del Ayuntamiento de Madrid tiene, desde ayer, ganador dotado con 30.000 euros de premio: el proyecto presentado por Alejandro V¨ªrseda, Jos¨¦ Ignacio Carnicero e Ignacio Vila, tres arquitectos de 33 a?os, que han denominado su propuesta The Doors. El t¨ªtulo incluye un gui?o sem¨¢ntico -menos transgresor de lo que lo fuera el grupo musical estadounidense- y se sustancia en una f¨®rmula que ofrece un m¨ªnimo de arquitectura y un m¨¢ximo de versatilidad en la creaci¨®n de espacios singulares.
"El principal desaf¨ªo que hemos afrontado ha sido el de aplicar una actuaci¨®n enormemente respetuosa con la arquitectura preexistente, pero con una versatilidad de usos desplegada en una gama muy amplia de funciones", dice Alejandro V¨ªrseda. No considera la ausencia de arquitectura como d¨¦ficit creativo: "En ocasiones, los arquitectos actuamos de manera poco respetuosa con el arte ya consolidado y aqu¨ª, en el matadero de Legazpi, la buena arquitectura ya exist¨ªa", precisa. El conjunto de 16 edificios fue una de las obras maestras del arquitecto municipal Luis Bellido. De estilo ecl¨¦ctico, en ladrillo y caliza, con estructura de acero roblonado, data de principios del siglo XX.
Tres arquitectos proponen administrar los espacios art¨ªsticos a base de cancelas
Para garantizar tal respeto, la oferta de los tres arquitectos se ci?e a un sistema de puertas interiores desplegadas en dos niveles, de seis y de 12 metros de porte cada uno, sobre dos pabellones de sendas naves, de 5.227 y de 4.745 metros cuadrados de superficie, respectivamente, que componen un ¨¢mbito que segmenta cinco grandes espacios distintos. Las puertas, un centenar de unidades, de seis metros de altura por tres de anchura cada una en la planta inferior, y de igual longitud y la mitad de anchura en la superior, adoptan una significaci¨®n que asume la pluralidad de usos que se ha exigido a los concursantes. De ellos se demandaba un escenario polivalente, capaz de albergar eventos tan distintos como un concierto de m¨²sica; la principal pasarela de moda madrile?a; un recinto para alojar la colecci¨®n de Arco y una sala de exposiciones permanentes; adem¨¢s, un centro de formaci¨®n con taller, hemeroteca, aulas y despachos para la direcci¨®n y servicios. V¨ªrseda, Carnicero y Vila han ideado durante un mes y medio de trabajo una inteligente combinatoria de apertura, cierres y enfilamientos de las puertas, que propiciar¨¢ delimitaciones, transformaciones, ganancias y segmentaciones del generoso espacio interior del matadero. "Para respetar de manera plena el dise?o original", explica Jos¨¦ Ignacio Carnicero, "hemos dispuesto que las puertas se encastren en los pilares originales del edificio de Luis Bellido".
De esta manera tienen un papel doble: como bisagras e hitos que pueden convertirse en soportes para anunciar los eventos que se desarrollar¨¢n dentro; o bien como cancelas, cuyo alineamiento cierra espacios y los delimita; en la parte superior, las puertas ser¨¢n contraventanas, con el fin de reducir al m¨¢ximo el impacto solar sobre los lienzos.
Cada una de las puertas podr¨¢ revestirse de planchas de madera, fibra de vidrio o del material que se desee, con miras a su sinton¨ªa crom¨¢tica o textural con la de la muestra a exhibir. Se dispondr¨¢ adem¨¢s de una sistema de rieles para trasladar las obras de arte al modo de los empleados en los mataderos para el transporte de reses en canal. "Tambi¨¦n hemos trazado un deambulatorio perimetral y una terraza que mirar¨¢ al futuro parque de la M-30", a?ade Carnicero. Los arquitectos desear¨ªan que a su alegr¨ªa por el premio se sumara la de realizar el proyecto. "No sabemos a¨²n si el suelo ser¨¢ de lin¨®leum o de hormig¨®n, pero hemos propuesto que sea rojo, ya que el forjado del matadero, durante d¨¦cadas se ti?¨® de sangre de reses", dicen. Por ello, algunos le llaman ya la "Casa Roja de Legazpi".
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