Un corneado en el encierro m¨¢s emocionante

Tras varias jornadas de carreras monocordes, de manadas agrupadas y poca atenci¨®n de los astados por los mozos, los toros de Fuente Ymbro protagonizaron ayer un encierro muy emocionante y peligroso, que se sald¨® con un herido de pron¨®stico menos grave por asta. La manada salt¨® protegida por los cabestros, pero pronto dos de los burracos tomaron la cabeza. Uno, llamado Zarandejo, se pas¨® toda la cuesta de Santo Domingo mirando a la acera izquierda, hasta que gir¨® y derrot¨® contra la derecha, corneando en el gl¨²teo a un mozo, el pamplon¨¦s Iker Pellicer Gonz¨¢lez, de 27 a?os.

Tras el golpe, el animal qued¨® parado en medio de la calle, y se descolg¨® del resto de la camada. ?sta, muy abierta, corr¨ªa ya por la plaza del Ayuntamiento, en la que un animal cay¨® junto a un mozo, pero sin cornearle. La velocidad de los dos primeros astados provoc¨® que a partir de la curva entre Mercaderes y Estafeta, en la que ninguno tropez¨® gracias al tratamiento antideslizante del suelo, el grupo se disgregase. Primero, un fuente ymbro seguido de tres hermanos y un cabestro. Por primera vez en lo que va de fiestas, los corredores pod¨ªan elegir cabezas, aunque algunos acabaron atropellados por el trepidante ritmo de los animales. En Estafeta, y hasta la llegada al callej¨®n, se produjeron numerosas ca¨ªdas. Hasta cuatro personas: el riojano Miguel ?ngel P¨¦rez, de 30 a?os; Dami¨¢n Carrillo, madrile?o de 29; C¨¦sar Gonz¨¢lez, de Guadalajara, de 30 a?os; y el navarro J. M. E. G., de 39 y vecino de la localidad navarra de Artajona, tuvieron que ser trasladados de urgencia. En el caso del alcarre?o, con un traumatismo tor¨¢cico menos grave y rotura de tres costillas.