Ritmo negro a todo color

Espect¨¢culo de nueva creaci¨®n, el que acaba de presentar el director esc¨¦nico J¨¦r?me Savary en el Festival Castell de Peralada. Y sobre ese punto, ¨¦l mismo insisti¨® mucho, el pasado s¨¢bado por la noche, al finalizar la funci¨®n, que supuso el estreno en Espa?a del montaje, con el ritmo de los blues a¨²n de fondo. "Hay que crear nuevos musicales, no todos pueden ser My fair lady", coment¨®, trompeta en mano. Tras una serie de viajes a Nueva Orleans en busca de los int¨¦rpretes id¨®neos, J¨¦r?me Savary ha ideado una revista negra que, partiendo de la figura de Jos¨¦phine Baker, rinde homenaje a La revue n¨¨gre original de los Champs Elys¨¦es de la d¨¦cada de 1920 y repasa la historia del jazz.

J¨¦r?me Savary recrea 'La revue n¨¨gre' de los felices veinte y repasa la historia del jazz

El montaje es una revista musical que va pasando p¨¢ginas hacia atr¨¢s y hacia adelante en el tiempo. El presente se sit¨²a en Nueva Orleans despu¨¦s de la sacudida del hurac¨¢n Katrina a finales de agosto de 2005. El pasado se remonta hasta la exposici¨®n colonial de 1932 en los Jardins des Plantes de Par¨ªs, en la que se exhibieron tribus de africanos congole?os medio desnudos para regocijo del mill¨®n y pico de espectadores que se concentraron para verles. A partir de aqu¨ª, a trav¨¦s de uno de los personajes, el pianista Old Joe, interpretado en Espa?a por un catal¨¢n, Miquel ?ngel Ripeu, que nos cuenta la historia de sus ancestros desde una barca a punto de hundirse en Nueva Orleans, se nos explica la evoluci¨®n del jazz. Este hilo narrativo viene acompa?ado de otro, el de un productor de espect¨¢culos franc¨¦s que ha viajado a Nueva Orleans en busca de una nueva Jos¨¦phine Baker para montar un remake de La revue n¨¨gre. El resultado es un espect¨¢culo tan did¨¢ctico como entretenido.

La esclavitud, la segregaci¨®n racial, las influencias cubanas sobre el jazz y su nacimiento, la ley seca, el Ku Kux Klan, el sue?o de Martin Luther King, el boogie boogie y los blues, y el Waldorf Astoria de Duke Ellington son algunas de las escenas que, junto a las de la revista negra en Par¨ªs, conforman este montaje trufado de estupendos n¨²meros musicales a partir de temas tan conocidos como Saint-James Infirmary, Oh when the saints, The joint is jumping y J'ai deux amours. Vistosas coreograf¨ªas ejecutadas por un magn¨ªfico cuerpo de baile (?y qu¨¦ cuerpos!) llenan el escenario de puro ritmo negro a todo color, el del vestuario, el de la m¨²sica en directo, el de las voces y el de las im¨¢genes que se proyectan sobre unos paneles m¨®viles que dan paso a la escalinata del music hall parisiense. Destacan entre los int¨¦rpretes la joven Nicole Rochelle, que revive a la m¨ªtica Jos¨¦phine Baker con sus carrillos hinchados, sus rodillas dobladas, sus movimientos dislocados, su meneo de caderas bajo el cintur¨®n de pl¨¢tanos; el tambi¨¦n joven Kendrick Jones, con su virtuoso n¨²mero de claqu¨¦, y el veterano Michel Dussarrat, que encarna al productor franc¨¦s y, un poco al estilo del maestro de ceremonias que interpret¨® para Cabaret, al presentador de la revue. Contagioso.