Estruendosa biograf¨ªa

Basada en la vida real de una ociosa jovencita de millonaria familia pero con muy malas compa?¨ªas, que un buen d¨ªa se l¨ªa la manta a la cabeza y se convierte en -lo han le¨ªdo bien-, cazarrecompensas, Domino es un trepidante, pero mayoritariamente estruendoso veh¨ªculo de acci¨®n hecho a la medida del imparable estrellato de la joven

Knightley, a quien uno puede adivinar de cuando en cuando en el encuadre.

Lo de adivinar tiene su miga, porque el responsable de la funci¨®n, Tony Scott, hace en ella, y para nuestra desgracia, lo que m¨¢s le gusta: fragmenta el encuadre hasta la extenuaci¨®n, monta planos que rara vez pasan de los tres o cuatro segundos, todo para, es de suponer, evitar que el inter¨¦s decaiga. Y si no lo hace no es por el envoltorio con que nos presenta la historia, sino porque ¨¦sta es consistente y, como querr¨ªan los c¨¢nones, llena de ruido y furia.

Si es usted capaz de resistir que apenas le dejen ver lo que ocurre en el encuadre, tal vez sea ¨¦sta su pel¨ªcula; en caso contrario, v¨¢yase usted comprando una buena dosis de analg¨¦sicos, porque el dolor de cabeza parece al final asegurado.