Rel¨¢mpago Powell

Asafa Powell puede con todo. No le importa correr sin rivales que le empujen, sin gente que le obligue a buscar la perfecci¨®n, el ¨²ltimo golpe, el sufrimiento por la victoria. A Powell no le importa correr contra una sombra, contra una sospecha, contra la mancha en que se ha convertido el nombre de Justin Gatlin, coplusmarquista mundial de los 100 -9,77s-, tras haberse dopado con testosterona. Y no le importa viajar en tren, tener que pasar por Londres, Paris, Ly¨®n o Venecia, obligado por la amenaza terrorista que colaps¨® el aeropuerto de Londres. Powell, jamaicano de 23 a?os, igual¨® ayer por tercera vez su r¨¦cord mundial de los 100, al parar el reloj en 9,77s durante la reuni¨®n de Z¨²rich, de la Liga de oro. Fue como un rel¨¢mpago. Una carrera perfecta: 45 zancadas con un viento a favor de 1 metro por segundo para igualar una marca tan espl¨¦ndida que en el r¨¢nking hist¨®rico s¨®lo se le acercan las conseguidas por Gatlin y Montgomery (9,78s). Dos dopados.

La victoria de Powell no es una sorpresa: es la decimotercera consecutiva esta temporada. El chico, una apisonadora sobre la pista, gasta fama de mal competidor. Se le vio hundirse en los Juegos de Atenas, en 2004. No lleg¨® a los Mundiales de Helsinki, en 2005. Y siempre pareci¨® superado por las maneras de los velocistas estadounidenses, los hijos de la velocidad inteligente, gente acostumbrada a los adjetivos gruesos y la competitividad m¨¢xima. Powell no es as¨ª. Powell es otra cosa. Algo mejor.

Powell es jamaicano. Y la lista de sprinters de su pa¨ªs es impresionante: de all¨ª surgi¨® Miller, una gota de agua en el oc¨¦ano de los velocistas estadounidenses que dominaron los Juegos del 68. Jamaicano era Quarrie, clase pura para los 200. Y Bailey, Christie...todos ellos velocistas de ¨¦poca.

Como ellos, Powell hace de la t¨¦cnica su mejor arma. Se vio ayer. Mientras Obikwelu, oro en los 100 y los 200 en los Europeos de Gotemburgo, luchaba contra sus cansadas piernas -10,26s-, Powell se lanzaba suavemente y corr¨ªa relajado, flu¨ªdo, un pez en el agua. Fue el ¨²ltimo en levantar la cabeza, tras la fase de aceleraci¨®n. Ya iba primero. Ya iba lanzado, a 45 kil¨®metros por hora para correr los ¨²ltimos 30 metros. No le import¨® que la pista tuviera fama de lenta. No le import¨® que Gay, segundo, no le espoleara ni un poco (9,84s). Corri¨® en 9,77s. Igual¨® su r¨¦cord: Powell puede con todo.

REUNI?N DE Z?RICH. Hombres: 100 m: 1. A. Powell (Jam.), 9,77s. Mujeres: 5000 m.: 1. T. Dibaba (Eti.) 14m 45,73s.