La graduaci¨®n de Oubi?a

El m¨¦dico de la selecci¨®n espa?ola, Genaro Borr¨¢s, parec¨ªa un padre que acaba de ver a su hijo reci¨¦n nacido. Ayer, de madrugada, tras la victoria de Espa?a sobre Liechtenstein en el primer partido clasificatorio para la Eurocopa de 2008, el hombre caminaba por los pasillos del estadio Nuevo Vivero, de Badajoz, con la mirada vidriosa y la sonrisa imborrable de las horas felices. "?Has visto a Borja Oubi?a?", preguntaba; "?te ha gustado? ?Deber¨ªas conocerle!".

Genaro piensa en Oubi?a y se r¨ªe. Como m¨¦dico del Celta, le vio crecer desde que lleg¨® a Bala¨ªdos con doce a?os, en 1994. Desde el principio se sinti¨® maravillado con su car¨¢cter. El s¨¢bado, Oubi?a debut¨® con la selecci¨®n. Salt¨® al campo por Albelda y form¨® en la zona ancha con Alonso e Iniesta, otros dos volantes con clase parecida. Futbolistas que, como Cesc o Xavi, definen el estilo del equipo y una forma de entender el juego cada vez m¨¢s arraigada en Espa?a.

El reci¨¦n llegado tiene el mismo gusto futbol¨ªstico que sus colegas, pero incorpora un gen diferenciador. Es gallego, como el doctor, y lo hace sentir desde el primer juicio sobre su debut: "Mi familia estaba m¨¢s impaciente que yo. ?A m¨ª qu¨¦ m¨¢s me da debutar ahora o luego? ?Si al final nos morimos todos!".

Oubi?a cultiva la iron¨ªa y el fatalismo. Esto le da un punto de lucidez raro en su gremio. Tiene 24 a?os y compite desde los seis. Siempre como medio centro. "Empec¨¦ en el Moldeo", recuerda; "jugaba camuflado, con la ficha de otro, porque para ser alev¨ªn necesitabas cumplir siete a?os. Luego pas¨¦ al Gran Pe?a. Con doce, el Celta me llev¨® a un torneo a Portugal".

"Quer¨ªa estar cerca del bal¨®n y el bal¨®n siempre pasa por el medio", explica; "por eso me hice medio centro. Si juegas en otra parte del campo igual te quedas desconectado del juego. Pero en el medio participas en la defensa y el ataque".

Con seis a?os sus referencias no eran Guardiola, ni Mazinho, ni Mauro. "No", dice; "yo miraba a Indurain. Me atra¨ªa su forma de ganar".

Su progresi¨®n fue tard¨ªa. Para los aspirantes a jugar en Primera, criarse en Galicia siempre constituy¨® un h¨¢ndicap. Oubi?a debut¨® en la m¨¢xima categor¨ªa con 21 a?os, de la mano de Miguel ?ngel Lotina. Su actual t¨¦cnico, Fernando V¨¢zquez, siempre consider¨® que deber¨ªan haberle llamado mucho antes. A Oubi?a esto no le preocup¨® excesivamente. Es de los que miden y aprovechan los tiempos. Tanto que ya se ha licenciado en Empresariales. "No me gustaba perder el tiempo y, cuando acab¨¦ el COU, segu¨ª con la misma rutina de estudios", dice; "los jugadores tenemos mucho tiempo libre por la tarde y yo, si no hac¨ªa nada, me aburr¨ªa".

Galicia es uno de los lugares m¨¢s inh¨®spitos para la cantera del f¨²tbol espa?ol. Que un gallego juegue en la Liga ya es complicado. Despu¨¦s de ponerse la camiseta de la selecci¨®n, Oubi?a se paseaba ayer por Las Rozas con aire disperso. Esto era s¨®lo una apariencia. Analiz¨® la situaci¨®n del f¨²tbol de su regi¨®n con elocuencia de catedr¨¢tico: "En Galicia hay s¨®lo dos clubes en Primera y no apuestan por la gente de abajo. Desde el boom del dinero de las televisiones, los de Vigo y A Coru?a tiraron de talonario. No digo que esto sea bueno o malo. Tampoco digo que sea una cuesti¨®n de los clubes. La masa social no respalda una pol¨ªtica de cantera. La gente prefiere tener a su equipo arriba antes que apostar por los j¨®venes. Esto pasa en Galicia a pesar de que existe un sentimiento nacionalista. Hay una cultura que ignora la cantera".

Entonces, ?c¨®mo hizo para entrar en la primera plantilla del Celta? Oubi?a replica con una sonrisa y una sentencia impulsiva: "No tuvieron m¨¢s remedio". Luego quiere matizar: "Por una cuesti¨®n contractual. Me mejoraron la ficha y pas¨¦ de ser el 28 al 25 en la escala salarial. Quieras que no, no es lo mismo quitar al 28 que al 25".

En la selecci¨®n el celtarra se ha encontrado con un grupo de futbolistas en su misma onda. "Compartimos una idea", dice; "todos queremos darle el mismo sentido al juego. No ser¨ªa l¨®gico tener dos equipos en uno. Ni en los clubes ni en la selecci¨®n. Por eso los jugadores que contrata el Bar?a tienen el mismo perfil. Cuando me preguntan por las posibilidades que tenemos de acoplarnos [con Xavi, Alonso, Cesc o Iniesta], yo digo que el Bar?a es la respuesta. All¨ª juegan todos y todos tienen el mismo perfil: Deco, Xavi, Iniesta, Messi, Giuly... Al punto que ahora han llegado Thuram y Zambrotta, que vienen de otra cultura, y les est¨¢ costando entrar".