La aver¨ªa de un tren causa m¨²ltiples retrasos en Cercan¨ªas por tercera vez en una semana

Por tercera vez en una semana, los usuarios de Cercan¨ªas volvieron a sufrir ayer retrasos superiores a los habituales. Esta vez el origen no fueron las obras del AVE, sino la aver¨ªa de un tren Euromed a la altura de El Prat, lo que afect¨® a la l¨ªnea C-2, que comunica Barcelona con Vilanova i la Geltr¨² y Sant Vicen? de Calders. El tren, con unos 150 pasajeros, parti¨® a las 9.00 horas de Sants para llegar a Valencia a las 12.00 y a Alicante antes de las 14.00. Pero a los 20 minutos, pasada la estaci¨®n de El Prat, se par¨® en medio y durante una hora y media tapon¨® el paso de los trenes en direcci¨®n al Garraf.

Los usuarios del Euromed esperaron hasta saber qu¨¦ ocurr¨ªa y, al fin, llegaron las explicaciones. Personal de Renfe les explic¨® que el tren se hab¨ªa averiado y deb¨ªan esperar a que fuera remolcado hasta El Prat. Muchos pasajeros eran personas que deb¨ªan llegar puntualmente a Valencia y Alicante para asistir a reuniones de trabajo. Hubo quien no pudo aguantar la espera. Ante la falta de informaci¨®n sobre cu¨¢ndo se solventar¨ªa el problema, algunos optaron por bajarse del tren y caminar por las v¨ªas hasta el casco urbano para intentar llegar al aeropuerto de El Prat y coger un avi¨®n hacia Valencia. Finalmente, tras hora y media, el tren fue conducido a la estaci¨®n, con lo que la v¨ªa C-2 hacia Vilanova qued¨® abierta y pudieron circular el resto de los trenes.

La falta de megafon¨ªa en el interior de los trenes es uno de los problemas que Renfe est¨¢ intentando solucionar. Fuentes de la empresa sugirieron que el mecanismo (un segundo canal de transmisi¨®n) estar¨¢ listo a finales de este a?o.

El Euromed ocup¨® la v¨ªa n¨²mero 2 de El Prat, destinada a la parada de trenes en direcci¨®n a Vilanova, l¨ªnea que permaneci¨® inh¨¢bil durante toda la ma?ana. Renfe tuvo que redistribuir las entradas en la estaci¨®n de los convoyes en direcci¨®n al Garraf, desvi¨¢ndolos hacia la v¨ªa que ocupan las unidades que se dirigen al aeropuerto. Por los altavoces, mecanismo de informaci¨®n que s¨ª funciona, se comunicaba a los usuarios que hab¨ªa demoras de 20 minutos en todos los trenes y que los convoyes se mantendr¨ªan parados en las estaciones m¨¢s tiempo de lo habitual. En la pr¨¢ctica, los retrasos superaron los 40 minutos.

En la estaci¨®n de El Prat, los pasajeros del Euromed continuaron pacientemente ocupando sus asientos tras ser informados de que una locomotora los arrastrar¨ªa de nuevo hasta Sants, donde podr¨ªan acceder a otro Euromed. Sin embargo, el tiempo pasaba y nada se mov¨ªa. Javier Viver era consciente de que ya no llegaba a tiempo a su cita laboral. Junto con otros usuarios se baj¨® del tren y se march¨® a pie y arrastrando una maleta hasta el centro de El Prat, a 10 minutos de distancia, para coger un taxi. Consigui¨® llegar a Sants a las 12.00, la hora a la que lo esperaban en Valencia.

En ese momento Renfe hab¨ªa cambiado de idea. Liberadas las v¨ªas, el siguiente tren hacia Valencia par¨® en El Prat para rescatar a los pasajeros de la unidad averiada. Eran las 11.38 cuando los usuarios que no se hab¨ªan marchado consiguieron partir. Renfe se comprometi¨® a devolver el importe de los billetes.

"He optado por el Euromed porque pensaba que no fallar¨ªa, porque con el avi¨®n siempre hay retrasos", explicaba acongojada Loli P¨¦rez, de Alicante, cuando ya hac¨ªa m¨¢s de dos horas que hab¨ªa salido de Sants y continuaba en El Prat. "Yo utilizo desde hace tres a?os el Euromed y va m¨¢s o menos bien. Peor es el avi¨®n", consider¨® Enric Lluc. Otros no se mostraron tan resignados. Josep Oliva ten¨ªa una reuni¨®n a las 13.00 a la que no podr¨ªa asistir. "Hace dos horas y media que hemos salido de Barcelona. ?C¨®mo puede ser que tarden tanto en arrastrar un tren? ?Esto es la Renfe!", exclam¨® con desesperaci¨®n. Arturo Lloret y Gl¨°ria Orozco se quejaron de que el martes el Euromed que les transport¨® de Alicante a Barcelona estuvo una hora parado. "De r¨¢pido tiene poco", afirmaban. Otro ejecutivo tan enfadado que no quiso ni dar su nombre se march¨® por su propio pie. "He tenido que anular la reuni¨®n. Llevamos una muy mala temporada", dijo.

Cuando el Euromed se fue, en El Prat quedaron decenas de usuarios de otros trenes que acumulaban retraso debido a la aver¨ªa. "Aqu¨ª nunca se cumplen los horarios. Hoy vuelvo a llegar tarde al trabajo", explic¨® Antoine Garc¨ªa, trabajador del aeropuerto. Otra usuaria habitual se declar¨® "acostumbrada" a los desajustes: "No es hoy, es cada d¨ªa. Cuando no hay una aver¨ªa, los trenes pasan entre 5 y 10 minutos m¨¢s tarde".