El Supremo condena a nueve a?os de c¨¢rcel al ex juez Estevill
El fallo ratifica tambi¨¦n la pena de siete a?os para el abogado Piqu¨¦ Vidal por extorsi¨®n
Sentencia firme para ingresar en prisi¨®n. El Tribunal Supremo conden¨® ayer a nueve a?os de c¨¢rcel por cohecho, prevaricaci¨®n y detenci¨®n ilegal al ex juez de Barcelona y ex vocal del Consejo General del Poder Judicial Luis Pascual Estevill, y a otros siete a?os de prisi¨®n por los mismos delitos al abogado penalista Juan Piqu¨¦ Vidal. La sentencia ratifica casi por completo la que dict¨® en 2005 el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC).
La decisi¨®n del Tribunal Supremo pone fin al proceso por corrupci¨®n judicial m¨¢s importante celebrado en Espa?a y concluye que el entonces juez y el abogado "urdieron" un "insidioso plan" para extorsionar a los empresarios a los que el primero investigaba y el segundo defend¨ªa. A principios de los a?os noventa, los empresarios abonaron diversas cantidades de dinero al juez y al abogado para no ingresar en la c¨¢rcel o para salir al cabo de unos d¨ªas de entrar.
La sentencia tambi¨¦n condena a Estevill y Piqu¨¦ a abonar a partes iguales 663.005 euros en concepto de responsabilidad civil o da?os morales a los nueve empresarios perjudicados y se declara la responsabilidad civil subsidiaria del Estado, tal y como reclamaron en el juicio los fiscales del caso, Carlos Ramos y Fernando Rodr¨ªguez Rey. En el caso de Piqu¨¦, ya abon¨® la parte que le correspond¨ªa antes de que se celebrase el juicio, en un intento de atenuar la posible condena.
La condena total contra Estevill es de nueve a?os de c¨¢rcel por seis casos de sobornos, chantajes y actuaciones arbitrarias cometidas entre 1990 y 1994 y por las que cobr¨® 450.759 euros. Los hechos ocurrieron cuando Estevill era juez de instrucci¨®n, primero en la localidad barcelonesa de Terrassa y, posteriormente, en la capital catalana. El Tribunal Supremo s¨®lo excluye una de las siete actuaciones corruptas de Estevill por las que le conden¨® el TSJC, referida al empresario Jos¨¦ Felipe Bertr¨¢n de Caralt. De este industrial es la frase m¨¢s ilustrativa de la trama pronunciada en los d¨ªas del juicio: "El perro que mord¨ªa era Estevill, pero quien llevaba la correa y le azuzaba era Piqu¨¦ Vidal". El Supremo tambi¨¦n condena a Estevill a cuatro meses de arresto por alzamiento de bienes y seis a?os de inhabilitaci¨®n en concurso con el delito de detenci¨®n ilegal.
Estevill tiene 72 a?os y su abogado, Manuel Troyano, explic¨® ayer que en los pr¨®ximos d¨ªas ingresar¨¢ voluntariamente en la c¨¢rcel. ?sa es una de las posibilidades que se abren a partir de hoy para ejecutar la sentencia. Otra variable ser¨ªa esperar a que la sentencia fuese remitida desde el Supremo al TSJC (de Madrid a Barcelona) y que ¨¦ste ¨²ltimo tribunal, en tanto que sentenciador, ordenase su ejecuci¨®n.
La defensa de Estevill rechaz¨® esta posibilidad, as¨ª como la hip¨®tesis de plantear recurso de amparo ante el Constitucional y reclamar la suspensi¨®n de la ejecuci¨®n de la sentencia. "?l ya ten¨ªa asumido que ser¨ªa condenado. Est¨¢ preparado para cumplir la condena y lo afrontar¨¢ con serenidad", explic¨® el abogado.
En el caso del abogado Piqu¨¦ Vidal, de 73 a?os, es muy probable que se produzca una circunstancia parecida, seg¨²n fuentes de su entorno profesional. La entrada voluntaria en prisi¨®n a cualquier hora del d¨ªa evitar¨ªa, adem¨¢s, que el hecho quedase recogido en una fotograf¨ªa.
El que fuera abogado de Jordi Pujol en el caso Banca Catalana ha sido condenado a siete a?os de c¨¢rcel por el delito de cohecho continuado, multa de 6.000 euros por prevaricaci¨®n y tres a?os de suspensi¨®n como abogado. "La justicia se equivoca muy pocas veces", afirm¨® Piqu¨¦ antes del juicio, cuando confiaba en la absoluci¨®n. Estevill calific¨® de "bonita" la sentencia. De la mano de CiU, Estevill lleg¨® a vocal de Consejo General del Poder Judicial, del que fue expulsado cuando fue condenado en 1996 a seis a?os de inhabilitaci¨®n por prevaricaci¨®n. En 2001 fue condenado a siete a?os de c¨¢rcel. Ahora volver¨¢ a la c¨¢rcel. Piqu¨¦ lo har¨¢ por primera vez.
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