Euskadi, sin alternativas a la deslocalizaci¨®n

"No es nuevo". Empresarios, sindicatos y profesionales de la econom¨ªa dan la misma respuesta ante el goteo constante de deslocalizaciones en Euskadi en particular y en el conjunto de Espa?a en general. La respuesta no implica resignaci¨®n. Cada uno aporta sus soluciones y todos lo ven como un resultado inevitable de la globalizaci¨®n para el que es preciso "anticipar" soluciones; algo que, a su juicio, no se hace a¨²n en Euskadi. Existe un consenso sobre la necesidad de buscar una pol¨ªtica industrial m¨¢s ambiciosa para hacerle frente.

Mari Carmen Gallastegi, catedr¨¢tica de Econom¨ªa de la UPV, lleva tiempo estudiando un fen¨®meno que no se circunscribe a Euskadi. Apunta que como primera causa de la marcha de la deslocalizaci¨®n est¨¢ el coste de los factores productivos (mano de obra, capital, energ¨ªa, transporte...) y luego otros como infraestructuras, servicios o estabilidad institucional. Sin embargo, duda de que el precio de los factores de producci¨®n se refleje realmente en el c¨¢lculo de los costes que hacen las empresas para tomar la decisi¨®n de cambiar de aires. Gallastegi reflexiona sobre el coste del transporte que es considerado muy barato en Europa, pero que no est¨¢ bien evaluado. "?Y el cambio clim¨¢tico? ?Y la congesti¨®n en las carreteras?", se pregunta.

Confebask cree que Euskadi ya no cuenta con la ventaja de ser intensivo en mano de obra en la UE

Las centrales quieren un pacto social impulsado por el Gobierno vasco para anticipar el problema

Eduardo Ar¨¦chaga, responsable de temas econ¨®micos de la patronal Confebask, considera que "las reglas de juego de la globalizaci¨®n" han hecho que Euskadi "ya no tenga la ventaja de ser intensivo en mano de obra frente a los diez pa¨ªses nuevos de la UE". Ar¨¦chaga cree que aumentar¨¢n las deslocalizaciones de las multinacionales, porque sus plantas compiten entre s¨ª, y tambi¨¦n que habr¨¢ empresas vascas que se internacionalicen. Considera que eso ha pasado siempre y que sobrevivir¨¢n las econom¨ªas m¨¢s din¨¢micas que ofrezcan alternativas. Las que apuesten por la innovaci¨®n. Tambi¨¦n pide mayor flexibilidad laboral.

Gallastegui va m¨¢s all¨¢. Coloca la innovaci¨®n entre las viejas recetas para hacer frente al problema, junto a los incentivos fiscales o el ambiente general. Asegura que es necesario ser "m¨¢s novedosos" en la respuesta; algo que est¨¢ por hacer en el conjunto de Espa?a. La catedr¨¢tica de Econom¨ªa considera necesario renovar todo el sistema de financiaci¨®n, apostar por el capital-riesgo y no tener miedo al fracaso. Asegura que en EE UU salen adelante dos de cada 100 empresas y no pasa nada. Cree que hay que elaborar pol¨ªticas que se anticipen a los cierres y aseguren las recolocaciones de las plantillas, y apoyar a las empresas locales para que salgan fuera.

Para defender su tesis mira al ¨²ltimo caso, el de la empresa Reckitt Benckiser, en G¨¹e?es, que ha anunciado el traslado de la producci¨®n al Reino Unido, a Polonia y a Portugal. Asegura que -salvo en Polonia, y por un periodo de no m¨¢s de diez a?os- los costes de la mano de obra, financieros, de energ¨ªa y de impuestos son similares. "Se mueven porque les interesa", dice, "pero deben compensar a los perdedores" con alg¨²n fondo de seguros salariales. "Son procesos que hay que gestionar, aunque sea imposible pararlos", apunta Gallastegi.

A esta anticipaci¨®n de soluciones, suma dos grandes preocupaciones sobre las que no se act¨²a suficientemente: el sistema educativo y la inversi¨®n en I+D+i. "El conocimiento no es a¨²n un valor reconocido, como lo es ganar dinero", asegura Gallastegi, quien lamenta la alta tasa de fracaso escolar y el diferencial de inversi¨®n tecnol¨®gico con Europa. "Se debe primar el conocimiento y la excelencia", insiste.

Los sindicatos, que reconocen la deslocalizaci¨®n como fruto de la globalizaci¨®n, apuntan directamente a las instituciones vascas y a sus pol¨ªticas. El secretario general de ELA, Jos¨¦ Elorrieta, en una entrevista en Deia el pasado mi¨¦rcoles, asegur¨® que la pol¨ªtica industrial vasca es vulnerable. Pidi¨® cambios y vaticin¨® que no se har¨¢ nada. Pilar Collantes, secretaria de acci¨®n sindical de UGT Euskadi, considera que las instituciones vascas deben desarrollar "con tiempo" planes en los que se consideren factores como la innovaci¨®n, la calidad o el medio ambiente. La base, seg¨²n Collantes, es la competitividad y un acuerdo posterior con las fuerzas sociales, empresarios y sindicatos.

Eduardo Garc¨ªa, de CC OO Euskadi, asegura que su central le mand¨® al Gobierno, cuando sac¨® su plan de competitividad, varias iniciativas en la misma l¨ªnea de los apuntado por Gallastegi. Le gustar¨ªa contar con un observatorio que permita un diagn¨®stico com¨²n y anticipe soluciones. As¨ª, se lamenta de que en cinco a?os los estudiantes vascos tengan el mismo n¨²mero de horas educativas que en Europa en cuatro a?os. Reclama un apoyo real a la internacionalizaci¨®n y una conexi¨®n mayor entre el sistema educativo y las empresas.

"Si competimos por costes laborales, estaremos siempre cerca de la deslocalizaci¨®n", indica Garc¨ªa quien pide un gran pacto social, al igual que Collantes, para poder hacer frente al problema. La dirigente de UGT critica que sea factible llegar a acuerdos entre los principales sindicatos en temas como el euskera y que resulte imposible alcanzarlos en el ¨¢mbito social. Por ello, hace un llamamiento al lehendakari Ibarretxe, para que condicione la actuaci¨®n del responsable de Empleo, Joseba Azkarraga, porque cree que es imprescindible.

"La deslocalizaci¨®n es un arma estrat¨¦gica de las empresas. Los economistas creemos que el libre comercio es bueno y produce beneficios, aunque hay perjudicados. No nos queda m¨¢s remedio que gestionarlo", subraya Gallastegi. La catedr¨¢tica considera que Euskadi ser¨¢ capaz de hacer frente a la salida de empresas de su territorio si se crea una actividad alternativa, como lo hizo en los a?os ochenta con la reconversi¨®n de los sectores tradicionales en crisis.