"La memoria es fantasiosa, quiz¨¢ porque tendemos a inventarnos a nosotros mismos"

A Felipe Ben¨ªtez Reyes (Rota, 1960) le persiguen los fantasmas del pasado, esos recuerdos de hechos que ocurrieron que la memoria devuelve reconvertidos en otras cosas. Y a esa lucha de diferencias entre lo que uno ha sido y entre lo que uno cree haber sido escribe en su nuevo poemario La misma luna, que publicar¨¢ la editorial Viso antes de que acabe el a?o. La obra fue recientemente galardonada en Valdepe?as con el I Premio de Poes¨ªa en Lengua Castellana Viaje del Parnaso, dotado con 18.000 euros. Seg¨²n el jurado, se trata de un libro "formado y muy rotundo", cuyo autor "tiene un evidente sabor literario y una voz personal".

Pregunta. ?Qu¨¦ se esconde bajo La misma luna?

Respuesta. Fundamentalmente, una serie de poemas que especulan sobre el sentido del fluir del tiempo mediante procedimientos expresivos muy variados. Se tratar¨ªa, no s¨¦, de reconocerse en el v¨¦rtigo de lo transitorio, de aprender a instalarse en la sucesi¨®n del tiempo con una cierta coherencia moral y emocional. Buscamos un s¨ªntoma de permanencia en lo fugitivo, pero la memoria es una abstracci¨®n llena de trampas. Creo que llega un momento en que uno no sabe muy bien cu¨¢l es la diferencia entre lo que ha sido y lo que cree haber sido, aunque la sospecha apunta a que todo es un espejismo prodigioso de fugacidad y que lo ¨²nico permanente es al fin y al cabo esa conciencia melanc¨®lica de fugacidad, la indefinici¨®n de uno mismo ante s¨ª mismo. De ah¨ª la imagen recurrente de la luna: algo que es siempre lo mismo pero que no siempre es igual.

"La poes¨ªa tiene una capacidad de supervivencia asombrosa"

P. ?Se vuelven a pasear fantasmas del pasado por este poemario?

R. El fantasma principal es siempre uno mismo. El pasado es un recinto fantasmag¨®rico en el que s¨®lo tienen cabida los fantasmas. Cuando uno se pone a recordar, el recuerdo depende en gran medida del tipo de emoci¨®n con que se emprenda. Los recuerdos no son inalterables, porque tienen mucho de conjetura. La memoria de nuestra identidad est¨¢ mediatizada por el presente, y por eso es poco fiable como fuente de informaci¨®n. La memoria es fantasiosa, quiz¨¢ porque tendemos a inventarnos a nosotros mismos, y no necesariamente por inclinaci¨®n al delirio, sino por mero sentido de la supervivencia. Necesitamos saber algo de nosotros para poder ser nosotros y, si no lo sabemos, lo inventamos, y las invenciones no son verdaderas o falsas. Son lo que son. Invenciones.

P. Usted ha explicado que este poemario reci¨¦n premiado le ha llevado siete a?os de trabajo. ?Qu¨¦ es lo que principalmente ha motivado este prolongado proceso de escritura?

R. Quiero creer que la prudencia. En esto, la veteran¨ªa s¨®lo otorga un grado mayor de incertidumbre. La poes¨ªa es un g¨¦nero que requiere mucho respeto, aunque tal vez sea el que menos se respeta.

P. ?Cada vez le cuesta m¨¢s escribir poes¨ªa?

R. No se trata exactamente de una medida de esfuerzo. La pr¨¢ctica de la poes¨ªa exige sobre todo mucha convicci¨®n, y las convicciones a veces se debilitan. Tambi¨¦n hay un factor de necesidad; es decir, que el poema surja de una necesidad verdadera, no de una simple ocurrencia sometida artificiosamente a una disciplina ret¨®rica, porque de ah¨ª no suele salir casi nada.

P. ?Sobrevivir¨¢ la poes¨ªa a las venideras generaciones?

R. Supongo que s¨ª. Lo que habr¨ªa que ver es si sobreviven las generaciones venideras. La poes¨ªa tiene una capacidad de supervivencia asombrosa, en cualquier tiempo, en cualquier pa¨ªs y en las circunstancias m¨¢s adversas. Supongo que porque la poes¨ªa afecta a lo m¨¢s privado de uno mismo, y eso resulta inexpugnable.

P. Le incluyen a usted en la llamada Generaci¨®n de los 80. ?Se siente bien incluido en este grupo?

R. Una generaci¨®n es un fen¨®meno mec¨¢nico, por decirlo de alg¨²n modo. Como el de un reloj. La generaci¨®n no se elige: te viene dada. En cualquier generaci¨®n hay rasgos comunes, pero lo importante es que haya rasgos individuales, y en la m¨ªa los hay, de modo que no hay de qu¨¦ preocuparse.

P. ?Qu¨¦ retos literarios tiene pendientes? ?Hay algo que tenga ganas de escribir y todav¨ªa no ha hecho?

R. El reto principal es siempre la p¨¢gina siguiente. En mi caso, no tengo perspectivas m¨¢s amplias, y prefiero que sea as¨ª. Los proyectos fara¨®nicos abruman y pueden acabar paraliz¨¢ndote. En estos d¨ªas estoy revisando una novela que acabo de terminar. Y cuando digo revisando estoy hablando en realidad de reescritura, que es un proceso m¨¢s complicado a veces que el de la escritura misma, porque ya no est¨¢s preocupado por los hallazgos, sino por los errores.