El ¨²ltimo mano a mano
Como en 1994 frente a Hill y en 1997 ante Villeneuve, Schumacher vuelve a estar involucrado en una ag¨®nica lucha por el t¨ªtulo
Quince a?os han transcurrido desde que Michael Schumacher se embuti¨® por primera vez en el min¨²sculo habit¨¢culo de un monoplaza de f¨®rmula 1. Tres lustros y siete t¨ªtulos mundiales despu¨¦s de aquella carrera, celebrada en Spa Francorchamps (B¨¦lgica), el alem¨¢n, de 37 a?os y ya en el umbral de la retirada, puede despedirse a lo grande, con su octava corona de campe¨®n mundial. Empatados en la gresca por el t¨ªtulo, bien se imponga Schumacher o lo haga Fernando Alonso, la encrucijada no se solventar¨¢ hasta el final. Se cuentan dos carreras para que el curso 2006 finalice y la pomada est¨¢ m¨¢s abierta que nunca.
A tenor de lo que la tradici¨®n dibuja, ser¨¢ el corredor de Ferrari quien maneje mejor la presi¨®n de aqu¨ª al final porque Schumi es todo un experto en tales circunstancias. Tanto Jacques Villeneuve como Damon Hill pueden dar fe de ello. Ambos se vieron inmiscuidos en una cruda batalla por el t¨ªtulo con el germano en la ¨²ltima carrera del a?o. El resultado de los dos episodios fue diametralmente opuesto y resulta parad¨®jico que fuera el canadiense, que finalmente logr¨® el t¨ªtulo en 1997, quien peor digiriera la estratagema empleada por Schumacher para tratar de amarrar el Mundial. Hill, por su parte, no se hab¨ªa ensa?ado con su rival tres a?os antes y motivos no le faltaban. Ambos llegaron a Australia separados en la tabla por un solo punto, a favor del alem¨¢n, que, a media carrera y tras impactar contra el muro de protecci¨®n, estrell¨® su Benetton-Renault contra el Williams de Hill. Los dos debieron abandonar la carrera y el piloto de Kerpen alcanz¨® su primera corona de campe¨®n.
Villeneuve critica las artima?as del alem¨¢n y afirma que no ser¨¢ recordado como Senna
Mucho peor le sent¨® a Villeneuve una artima?a similar. Al igual que hab¨ªa ocurrido contra Hill, el campeonato se solucion¨® en su ¨²ltima prueba, en Australia, y con Schumacher un punto por delante de Villeneuve en la tabla. Mediaba la carrera cuando el canadiense, entonces a los mandos de un Williams equipado con motor Renault, super¨® a su rival en una curva. El alem¨¢n, impotente, lanz¨® su Ferrari contra el monoplaza del canadiense. El accidente destroz¨® el b¨®lido de il cavallino rampante mientras que a Villeneuve le alcanz¨® la tercera posici¨®n que consigui¨® para firmar el ¨²nico t¨ªtulo mundial que acumula. Aunque ello no satisfizo al hijo de Gilles Villeneuve, muy cr¨ªtico, a¨²n a d¨ªa de hoy, con ciertas actitudes que el heptacampe¨®n alem¨¢n adopta en el asfalto. "Nadie le recordar¨¢ [a Michael Schumacher] como un gran campe¨®n, sino como un piloto sucio y mentiroso", declara Villeneuve en una entrevista publicada por la revista Racing F1. "No creo que Michael vaya a vivir en el recuerdo de muchas personas. Senna o Prost [cuatro veces campe¨®n] obtuvieron un estatus de h¨¦roe que ¨¦l nunca tendr¨¢", opina el corredor canadiense, sustituido este a?o por el polaco Robert Kubica como piloto de la escuder¨ªa Sauber desde el pasado Gran Premio de Hungr¨ªa.
De nuevo Schumacher fue protagonista, hace s¨®lo tres temporadas, cuando se impuso a Kimi Raikkonen y Juan Pablo Montoya en la ¨²ltima carrera del a?o. A falta de dos grandes premios, el alem¨¢n atesoraba una ventaja de dos puntos respecto al colombiano y de siete respecto al finland¨¦s. Montoya se desinfl¨® en Estados Unidos y all¨ª gan¨® Schumacher. Un solo punto precis¨® el germano en la ¨²ltima carrera, en Jap¨®n, para adjudicarse el campeonato, el sexto, entonces, de su palmar¨¦s.
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