Espa?ol en Australia

Leo con inter¨¦s el art¨ªculo sobre El mundo que aprende espa?ol, y como docente de la lengua en Australia, coincido con la apreciaci¨®n de que la lengua espa?ola tiene un grand¨ªsimo futuro en esta parte del mundo. El inter¨¦s por la cultura hispana, en todas sus vertientes y expresiones, es notable y debiera por ello influir en las autoridades a la hora de destinar mayores recursos a la ense?anza de la lengua en este pa¨ªs.

Lo que el art¨ªculo no explica -ignoro si el libro, el cual no he podido leer por motivos evidentes, lo menciona- es la p¨¦sima situaci¨®n a la que se ha visto abocada la ense?anza de la lengua en Australia, donde el intrusismo profesional, el amiguismo, la incompetencia y la ignorancia est¨¢n a la orden del d¨ªa. Cualquier persona de habla hispana puede pasar por ser un especialista, sea cual sea su formaci¨®n o falta total de ¨¦sta. Hace unos a?os yo me mesaba los cabellos que no tengo cuando mi superior se empecinaba en ense?arles a sus estudiantes a pedir un bocadillo de "paquete" (sic) en una cafeter¨ªa espa?ola. La misma persona dio una tarde una clase magistral sobre las oraciones subordinadas casuales... y bien pudiera a?adir muchos m¨¢s ejemplos de desvar¨ªos, desmanes y desprop¨®sitos. No est¨¢ de m¨¢s pedir el apoyo de autoridades, colegas y expertos peninsulares, para que los que hacemos el esfuerzo de difundir la hermosa lengua de Cervantes en Australia no tengamos que soportar la ineptitud que nos rodea a diario en forma de intrusismo carente de profesionalidad.