El coche de Granados incendiado est¨¢ a nombre de una constructora de Valdemoro

La investigaci¨®n del incendio intencionado que calcin¨® el domingo un veh¨ªculo que usaba el consejero de Presidencia de Esperanza Aguirre, Francisco Granados, ha descubierto que el coche estaba a nombre de una constructora de Valdemoro, Grandes Locales de Negocios. Granados explic¨® ayer que el veh¨ªculo es de su esposa, pero que el concesionario en el que lo compr¨® no ha tramitado a¨²n el cambio de titular por problemas burocr¨¢ticos.

?sta es la raz¨®n que da el alto cargo de la Comunidad de Madrid para justificar que el veh¨ªculo siga inscrito a nombre de una constructora que opera en el municipio de Valdemoro desde hace a?os.

Granados fue alcalde de esa localidad hasta 2003, cuando entr¨® a formar parte del Gobierno de Esperanza Aguirre como consejero de Transportes e Infraestructuras. Ahora es el titular de Presidencia. Adem¨¢s, fue elegido secretario general del PP de Madrid hace casi dos a?os.

El portavoz del Grupo Popular en la Asamblea de Madrid, Antonio Beteta, pidi¨® ayer a la Fiscal¨ªa General del Estado y a los cuerpos y fuerzas de seguridad que investiguen urgentemente si el incendio en el domicilio del consejero de Presidencia, Francisco Granados, tiene o no que ver con el caso de Ciempozuelos, donde ha dimitido el alcalde socialista, Pedro Torrej¨®n, por un esc¨¢ndalo urban¨ªstico de supuesto cobro de comisiones ilegales y recalificaci¨®n masiva de suelo r¨²stico.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, fue ayer la encargada de anunciar que la polic¨ªa hab¨ªa encontrado un acelerador de fuego en el interior del veh¨ªculo de Granados -el de su esposa, que ¨¦l utiliza a veces y que est¨¢ a nombre de dicha constructora- y manifest¨® su confianza en que se localice a los culpables del incendio intencionado.

Los hechos tuvieron lugar el pasado domingo, cuando se declar¨® un fuego en el bloque de viviendas de Valdemoro en el que reside Granados. El siniestro calcin¨®, entre otros veh¨ªculos, el perteneciente a su esposa.

La investigaci¨®n policial, que se inici¨® desde el mismo d¨ªa del incendio, ha deparado alguna sorpresa, ya que en los documentos del coche donde se inici¨® el fuego, que utilizaba el consejero Granados, no aparec¨ªa ni su nombre ni el de su mujer, supuesta propietaria del veh¨ªculo.

El coche en cuesti¨®n estaba a nombre de una constructora con numerosos intereses en el municipio de Valdemoro: Grandes Locales de Negocios.

El consejero se explica

Granados dio ayer a EL PA?S la siguiente explicaci¨®n a este hecho: "El pasado mes de julio mi esposa compr¨® un Mini Cooper descapotable de segunda mano en un establecimiento de Valdemoro y, a cambio, dej¨® un escarabajo. El hecho de que el veh¨ªculo est¨¦ a¨²n a nombre de esa empresa se explica por el retraso burocr¨¢tico en los tr¨¢mites para la transferencia de titularidad". Francisco Granados neg¨® tajantemente que su esposa, Nieves Alarc¨®n, tuviera ning¨²n v¨ªnculo con dicha firma constructora, ni laboral ni societario.

Un directivo del concesionario, Car Valdemoro, ubicado f¨ªsicamente en un pol¨ªgono construido por la citada inmobiliaria, ratific¨® la versi¨®n dada a este peri¨®dico por el consejero de Presidencia: "Es verdad que la mujer del consejero compr¨® el Mini Cooper, que era una joya porque estaba en muy buen estado y era descapotable, y a cambio dej¨® un escarabajo. ?La culpa de que todav¨ªa est¨¦ a nombre de la inmobiliaria? Pues en parte m¨ªa y en parte de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, que lleva un retraso de meses en dar de alta los coches. Como la venta se produjo en julio, y en agosto no se hizo nada por vacaciones, m¨¢s el retraso de Tr¨¢fico, pues, total, nos hemos puesto en estas fechas".

Lo que sigue sin aclararse es la causa de dicho incendio. Mientras Granados no atisba qu¨¦ mano oscura podr¨ªa estar detr¨¢s de un fuego intencionado, la Guardia Civil no cree en la tesis de un suceso fortuito.

El consejero de Presidencia declar¨® tras el incendio que no pensaba que el siniestro estuviera relacionado con un ataque directo contra su persona y asegur¨®, en los primeros momentos, que pensaba que el fuego era fortuito.