Carod, el orador
Me voy a Tortosa a ver un mitin de Josep Llu¨ªs Carod Rovira. Cuando llego al teatro, el acto ya ha empezado y puedo o¨ªr las risas del p¨²blico desde la puerta. Me hab¨ªan dicho que Carod es un buen orador, pero, al ocupar mi butaca, compruebo lo cierto que es. Junto con Piqu¨¦, es el mejor. Administra las pausas, los cambios de volumen y de tono, se acelera, nos mira, y suelta su chiste, que combina con una enjabonada justa.
"Dicen que no hace falta que el presidente sea el m¨¢s votado", pausa, "que tambi¨¦n podr¨ªa ser el segundo m¨¢s votado...", pausa larga. "Y entonces, yo me digo...", pausa muy larga, "?y por qu¨¦ no puede ser el tercero m¨¢s votado?". Esto provoca nuestras risas y aplausos. La platea est¨¢ a rebosar. Entre el p¨²blico distingo al alcalde de Miravet, un hombre jovial y chistoso, que, como saben bien los periodistas, es la alegr¨ªa de cualquier campa?a.
Salgo un momento y me detengo en los carteles de los candidatos, esos en los que se les ve haciendo actos de la vida cotidiana com tu. Benach, por ejemplo, toca la guitarra. A mi lado, dos chicos con una camiseta en la que leo Independ¨¨ncia, tambi¨¦n observan. Les pregunto si tienen edad de voto y me dicen que no, pero que cuando la tengan votar¨¢n a Esquerra "porque es el ¨²nico partido que no pretende pagar el pisito de Felipe y Letizia".
Les pregunto qu¨¦ les parecen los carteles y me dicen que, como estudiantes de m¨²sica, est¨¢n en condiciones de afirmar que Ernest Benach no es un buen guitarrista. Que toca una especie de la menor desplazado bastante raro. A pesar de estar en plena naturaleza, dicen, Benach no les parece un m¨²sico d'esplai. Pasamos de largo por el cartel de Puigcerc¨®s, que, taladro en mano, resulta mucho m¨¢s conmovedor para m¨ª, impresionable mujer, que para ellos.
En cambio, en su p¨®ster, Carod Rovira est¨¢ comprando agua, me parece que con gas. La coge del estante de una tienda de ultramarinos cuando su reloj marca la una menos cinco. Y eso significa que, o bien el candidato de Esquerra ha ido a una gran superficie de esas que no cierran al mediod¨ªa (en lugar de ir a un peque?o comercio) o que ha ido a un peque?o comercio y est¨¢n a punto de cerrar (por lo que Carod ser¨ªa un insolidario).
Detr¨¢s de ¨¦l hay un estante con botes amarillos de una conocida marca de mostaza. Pero a las botellas de agua que coge, en cambio, no se les ve ninguna etiqueta; de este modo nos ahorramos saber si esa agua est¨¢ etiquetada en catal¨¢n. Ya se sabe que lo del carnet por puntos es una cosa, pero conseguir que los empresarios catalanes tambi¨¦n etiqueten en catal¨¢n no se consigue en 20 a?os. Por la misma raz¨®n, supongo que el director de campa?a descart¨® el cava.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.