El concejal de urbanismo de Burriana vot¨® y tramit¨® un PAI en el que tiene una parcela

El concejal de Urbanismo de Burriana, Javier Perell¨® (PP), es propietario de una parcela, ubicada en una franja costera del mismo municipio. El terreno, de poco m¨¢s de 1.000 metros cuadrados, con un aprovechamiento del 0,50%, est¨¢ incluido en un Programa de Actuaci¨®n Integrada (PAI) presentado por la sociedad Urbacon Levante, perteneciente al grupo Azvi. Sin embargo, su inter¨¦s directo en el desarrollo urban¨ªstico no ha sido ¨®bice para que ¨¦l mismo haya tramitado todo el expediente e incluso votara para la aprobaci¨®n y adjudicaci¨®n del mismo. Los propietarios exigen la intervenci¨®n del Consell.

El edil reconoce que compr¨® el solar dos meses antes de que se presentara el programa

Parte de los propietarios han recusado a Perell¨® porque entienden que carece de imparcialidad

El procedimiento no est¨¢ exento de irregularidades y, de hecho, su aprobaci¨®n est¨¢ sometida a un dictamen t¨¦cnico que habr¨¢ de determinar su legalidad. En cualquier caso, la zona a desarrollar cuenta con otros dos h¨¢ndicaps. Por una parte, es colindante al otro pol¨¦mico PAI de Burriana, el Pedrera-Port, que provoc¨® una crisis dentro del mismo grupo popular dadas las m¨²ltiples irregularidades y, por otra, la nueva zona a desarrollar est¨¢ ubicada sobre un importante yacimiento ¨ªbero-romano, el Torre d'Onda, tal como determina un informe arqueol¨®gico.

La fecha de adquisici¨®n de la parcela por parte de Perell¨® y su esposa, en r¨¦gimen de gananciales, no dista de la de presentaci¨®n del PAI. Seg¨²n el propio expediente, esta fue escriturada en enero de 2003, tres meses despu¨¦s de que se presentara el PAI. Sin embargo, el propio Perell¨® asegur¨® contar con un documento privado fechado en julio de 2002, es decir, dos meses antes de que se presentara el programa. En cualquier caso, entre esas fechas, julio de 2002 y enero de 2003, los propietarios oficiales recibieron de la promotora una primera notificaci¨®n que anunciaba el proyecto. Todos, excepto el due?o oficial de la parcela que despu¨¦s pas¨® a manos de Perell¨®. Su nombre figura tachado, de acuerdo el acta notarial por la que se present¨® el programa. Las "anomal¨ªas" en las notificaciones obligaron a un env¨ªo posterior aunque ¨¦ste se hizo a trav¨¦s de un sistema que s¨®lo certifica el env¨ªo y no el contenido. El caso es que el propietario de la parcela de Perell¨® s¨ª recibi¨® notificaciones posteriores, ya que en enero de 2004 el propio concejal present¨® un escrito en el Ayuntamiento solicitando que remitieran los comunicados de las actuaciones a su esposa, como propietaria de una parte del terreno afectado. El popular reclam¨® este derecho, como cualquier otro propietario, pero no aport¨® la escritura de propiedad que s¨ª han tenido que presentar el resto de propietarios.

La tramitaci¨®n del PAI ha sido dirigida por Perell¨® como concejal de Urbanismo, sin que el hecho de tener inter¨¦s directo en ¨¦l haya supuesto ning¨²n obst¨¢culo. De hecho, fue el propio Perell¨® quien propuso la contrataci¨®n de una asistencia jur¨ªdica externa para fundamentar la adjudicaci¨®n a la empresa, que no ten¨ªa competidores. Pero en este caso, tambi¨¦n existe un baile de fechas ya que el abogado retir¨® la documentaci¨®n del ayuntamiento tres meses antes de ser contratado.

En el momento de votar la adjudicaci¨®n del proyecto, Perell¨® no se abstuvo como s¨ª hizo la portavoz del grupo municipal socialista, Iolanda Porcar, ya que un familiar cuenta con una vivienda en la misma zona aunque ¨¦sta date de hace d¨¦cadas.

As¨ª, un grupo de propietarios ha presentado una recusaci¨®n contra el concejal de Urbanismo al entender que "carece de la necesaria imparcialidad, al ser parte interesada por ser propietario de terrenos". El art¨ªculo 28 de R¨¦gimen Jur¨ªdico de las Administraciones P¨²blicas y del Procedimiento Administrativo Com¨²n establece que es motivo de abstenci¨®n el "tener inter¨¦s personal en el asunto de que se trate o en otro en cuya resoluci¨®n pudiera influir la de aqu¨¦l". Por eso, los propietarios, despu¨¦s de que se les desestimaran sus alegaciones, consideran que Javier Perell¨® no debi¨® participar en ninguna fase del procedimiento y que su recusaci¨®n podr¨ªa anular toda la tramitaci¨®n que estar¨ªa "viciada" desde el principio.

Los vecinos sostienen que puesto que las caracter¨ªsticas que el Plan General de Ordenaci¨®n Urbana otorgaba al suelo han sido modificadas, su variaci¨®n ha de ser aprobada por la Consejer¨ªa de Territorio. El PP se comprometi¨® a solicitar un informe t¨¦cnico que determinara qu¨¦ administraci¨®n es competente para su aprobaci¨®n pero, de momento, no se ha presentado. Adem¨¢s, la empresa ha entregado, junto al proyecto de reparcelaci¨®n, una segunda modificaci¨®n que tambi¨¦n encierra variaciones estructurales como son los porcentajes de edificabilidad.