ERC s¨®lo pierde dos esca?os y podr¨¢ repetir el tripartito o pactar con CiU

No hubo anoche explosi¨®n de j¨²bilo en el hotel donde Esquerra Republicana (ERC) celebraba la noche electoral, pero s¨ª una enorme satisfacci¨®n por haber resistido y logrado la "doble llave" que deja a los republicanos en situaci¨®n de poder decidir entre formar mayor¨ªa con los otros dos partidos de la izquierda (PSC e ICV) o bien pactar con los nacionalistas de CiU. El l¨ªder del partido, Josep Llu¨ªs Carod, reconoci¨® que el retroceso de 23 a 21 en esca?os "no es una victoria", pero destac¨® que Esquerra "se ha consolidado como el tercer espacio pol¨ªtico" de Catalu?a.

Carod se felicita de tener "una segunda oportunidad" para estar en el Gobierno

Los primeros dirigentes republicanos que expresaron sus impresiones destacaron que "ha fracasado" el empe?o de CiU de plantear las elecciones como un plebiscito entre CiU y el tripartito de las izquierdas.

Carod valor¨® los resultados como un rechazo de los electores a que haya mayor¨ªa absoluta en el Parlamento catal¨¢n y como un mandato para formar un Gobierno de coalici¨®n. "Esquerra es la ¨²nica fuerza imprescindible" tanto para formar mayor¨ªa de gobierno con CiU, el frente nacionalista, o bien con los otros dos partidos de izquierda, PSC e Iniciativa Verds-Esquerra Unida.

"Quiero hacer una afirmaci¨®n de realismo, con toda humildad: Esquerra no ha ganado las elecciones, pero hemos resistido con toda dignidad, tras las campa?as de mentiras, insultos y linchamientos de que hemos sido objeto durante estos tres a?os", dijo Carod ante los medios de comunicaci¨®n y los centenares de militante que acudieron al hotel.

Despu¨¦s de que los sondeos a pie de urna atribuyeran a ERC una horquilla de 21 a 24 esca?os, el escrutinio fue ajustando el resultado real hacia la parte baja, y finalmente qued¨® fijado en 21 diputados. Pero tanto como de sus propios resultados, los dirigentes republicanos estaban pendientes de los que obten¨ªan los dem¨¢s partidos. Confiaban en que CiU no alcanzara los 50 esca?os, como as¨ª ocurri¨® y deseaban que el PSC no bajara de los 40, lo que finalmente no sucedi¨®. Para la propia ERC el objetivo era superar los 20 diputados, que les garantizan seguir manteniendo la posici¨®n de bisagra de que han dispuesto desde 2003.

Carod y el secretario general del partido, Joan Puigcerc¨®s, advirtieron que rechazar¨¢n que la formaci¨®n del Gobierno de la Generalitat "se decida fuera de Catalu?a", lo que suceder¨ªa si el PSOE impusiera al PSC que apoye a un Gobierno de CiU en minor¨ªa en el Parlament o la formaci¨®n de una coalici¨®n entre CiU y PSC. Este es un temor que los independentistas no ocultaban anoche. "Todos sabemos que esta vez puede que no todas las llaves est¨¦n en Catalu?a", dijo Carod.

La comisi¨®n ejecutiva de ERC abordar¨¢ hoy mismo la nueva situaci¨®n pol¨ªtica y preparar¨¢ el inicio de las negociaciones que sin duda habr¨¢ que emprender. Los representantes del partido en estas consultas ser¨¢n Carod y Puigcerc¨®s. El objetivo es volver al Gobierno, aunque ayer no se apunt¨® ninguna preferencia entre las dos opciones que se le abren. Carod quiso lanzar un menaje de que algo ha cambiado a positivo en Esquerra. "Ahora que los electores nos han dado una segunda oportunidad de estar en el Gobierno", dijo, "apostaremos por un Gobierno riguroso, estable, s¨®lido y ambicioso en el ¨¢mbito social y nacional".

La p¨¦rdida de dos esca?os tambi¨¦n va acompa?ada de un descenso del apoyo porcentual al partido independentista, que ha pasado del 16,44% en 2003 al 14,05% de ayer.

Puigcerc¨®s felicit¨® a CiU por ganar las elecciones en "diputados y en esca?os", pero tambi¨¦n le record¨® que "ha perdido el plebiscito que plante¨® entre CiU y el tripartito". ERC, agreg¨®, utilizar¨¢ la "doble llave" que los electores le han dado para decidir a favor de un Gobierno "en clave catalanista y de izquierdas".

Tan contundente como en sus mejores momentos, Josep Huguet, director de estrategia pol¨ªtica en el comit¨¦ de campa?a republicano, se?al¨® que los 48 esca?os de CiU no pod¨ªan calificarse como un "¨¦xito".