El Villarreal saca oro del absurdo
El Betis es mejor que su rival, pero sucumbe y deja a Irureta contra las cuerdas
Un canto al absurdo alejado de la ortodoxia. En un encuentro an¨¢rquico e hist¨¦rico, en el que los errores sumaron m¨¢s que los aciertos, el Villarreal sac¨® provecho de la locura ante un Betis mejorado, condenado por su propio destino y que puso toda la intenci¨®n por revertir su devenir. Irureta cumpl¨ªa 600 encuentros en Primera y tal vez no pueda estrenar centena en el club verdiblanco.
Para los equipos en crisis, nada como adelantarse en el marcador reci¨¦n levantado el tel¨®n. Apenas hab¨ªan transcurridos tres minutos y el Betis ya contaba con un gol a favor tras una falta botada por Miguel ?ngel y cabeceada con suavidad por Edu ante la complaciente mirada de la defensa de futbol¨ªn del Villarreal, que permaneci¨® petrificada, y la salida a ninguna parte de Viera. El Villarreal suele ofrecer en El Madrigal unos minutos de cortes¨ªa a los contrarios. Para que se acomode y tantee. Para que muestre sus intenciones y habilidades. Al Betis no le ven¨ªa a cuento andarse con remilgos. La clasificaci¨®n no le invita al optimismo. Encontr¨®, sin embargo, a un conjunto enfrente que permite el cuerpo a cuerpo, el intercambio de golpes.
VILLARREAL 3 BETIS 2
Villarreal: Viera; Venta, Cygan, Fuentes, Arruabarrena; Senna (Cani, m. 56), Somoza, Marcos (Jos¨¦ Mari, m. 56), Riquelme; Nihat (Tacchinardi, m. 62) y Forl¨¢n. No utilizados: Barbosa; Josemi, Quique ?lvarez y Josico.
Betis: Contreras; Melli, Juanito, Nano, Romero; Rivera, Miguel ?ngel (Sobis, m. 64); Capi (Assun??o, m. 79), Edu, Xisco (Odonkor, m. 62); y Robert. No utilizados: Doblas; Fernando Vega, Fernando y Maldonado.
Goles: 0- 1. M. 3. Edu, de cabeza. 1-1. M. 20. Triangulaci¨®n entre Nihat, Riquelme y Forl¨¢n que culmina el ariete. 1-2. M. 47. Rivera, en boca de gol. 2-2. M. 56. Cygan, de cabeza. 3-2. M. 57. Cani, tras un mal despeje de Juanito.
?rbitro: Meg¨ªa D¨¢vila. Amonest¨® a Miguel ?ngel, Senna, Fuentes, Nano y Forl¨¢n
Unos 18.000 espectadores en El Madrigal.
El Villarreal concedi¨® al grupo de Irureta un primer cuarto de hora para gustarse. Se adelant¨® pronto en el marcador y el placer pudo ser mayor de haber sacado productividad a su manifiesta ambici¨®n inicial. El Villarreal andaba previsible y err¨¢tico, como viene ejerciendo desde que ha comenzado el campeonato, sobre todo en su feudo. Le salvan los recursos de que dispone, entre ellos el generar muchas ocasiones de la nada. En pleno vac¨ªo de juego, colectivo e individual, apareci¨® el de siempre: surgi¨® Riquelme para paralizar a los contrarios y ofrecer un pase a Forl¨¢n para que devolviese el partido al empate inicial.
Cuando la din¨¢mica de un equipo es negativa, muy bien tiene que hacer las cosas para cambiar su presente. El Betis hab¨ªa puesto toda la intenci¨®n y tan s¨®lo le serv¨ªa para empatar ante un soso anfitri¨®n. A pesar de Viera, el portero del cuadro castellonense, que transmit¨ªa desasosiego en la afici¨®n local tras tomar varias decisiones equivocadas que bien pudieron suponer m¨¢s de un disgusto a su equipo. Y la grada se lo hizo saber. La porter¨ªa del Villarreal no levanta discusiones sobre qui¨¦n debe ocupar la titularidad. Tanto Viera como Barbosa transmiten sensaciones negativas.
El Betis se encontr¨® de nuevo con ventaja al comienzo del segundo acto. Marc¨® Rivera tras magn¨ªfica jugada de Edu. Con la lecci¨®n aprendida de los primeros 45 minutos, el cuadro sevillano intent¨® noquear a un Villarreal demasiado blando y previsible. Sin embargo, el gui¨®n se calc¨® al primer acto y fue a peor para los intereses verdiblancos. Cygan estableci¨® el empate tras cabecear una falta botada por Riquelme y, un minuto despu¨¦s, Cani, que apenas llevaba unos segundos en el terreno de juego, aprovech¨® el error de Juanito, impropio hasta en un jugador infantil. El Villarreal, sin f¨²tbol ni ¨¢nimo, ten¨ªa decantado el partido. Y dej¨® al Betis pidiendo hora para el psicoanalista.
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