?Arquitectura-espect¨¢culo?

El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla, Emilio Carrillo, mantiene que los l¨ªmites que establece el nuevo plan urban¨ªstico de la ciudad para la zona sur de La Cartuja son "inamovibles": un "m¨¢ximo de edificabilidad de 68.000 metros cuadrados", de los que no podr¨¢ dedicarse a usos comerciales m¨¢s de 48.000. "La ¨²nica explicaci¨®n que encuentro para justificar que los estudios invitados al concurso superen todos los 80.000 metros cuadrados construidos es que est¨¦n contabilizando zonas de acceso, porches y entradas, en el total", a?ade.

Los datos que la empresa promotora facilit¨® a los estudios arquitect¨®nicos ya se despegaban de los l¨ªmites municipales: se les propuso una edificabilidad para el uso de oficinas que pod¨ªa llegar hasta los 66.500 metros cuadrados y otros 18.500 metros cuadrados para servicios. En total, 17.000 metros cuadrados m¨¢s que lo previsto en el PGOU. El proyecto de la empresa incluye tambi¨¦n la construcci¨®n de un aparcamiento subterr¨¢neo con 2.500 plazas para los usuarios de la torre y otras 1.500 plazas rotatorias para otros empleados de La Cartuja.

Aunque la decisi¨®n final la tomar¨¢ Puerto Triana, Urbanismo analiza los proyectos para confeccionar el plan especial para la zona. "Tenemos el compromiso de llevar el Plan Especial Puerto Triana para su aprobaci¨®n al consejo de gobierno local del 11 de diciembre", asegura Carrillo. "Nuestro equipo ha estudiado, hasta ahora, las propuestas de Pelli, Valode et Pistre y Arquitect¨®nica. De ¨¦stas, la torre dise?ada por C¨¦sar Pelli es la que presenta menos dificultades t¨¦cnicas. El trabajo de Arquitect¨®nica es de una gran esbeltez y belleza, pero lo consideramos el de mayor dificultad t¨¦cnica; mientras que en la torre del estudio franc¨¦s creemos que la antena tan alta (220 metros) acarrear¨ªa problemas medioambientales y no cumple las ordenanzas de telecomunicaciones de Sevilla", a?ade.

Para el arquitecto Jos¨¦ Ram¨®n Sierra, autor de la rehabilitaci¨®n del Monasterio de Santa Mar¨ªa de las Cuevas, entre otros proyectos, las propuestas presentadas por los cinco estudios son "superficiales y carecen de inter¨¦s". "Me da la impresi¨®n de que son trabajos que est¨¢n por debajo de la capacidad de sus autores, puesto que todos tienen obras de gran calidad. Parecen proyectos realizados para epatar", argumenta Sierra. Seg¨²n el arquitecto y artista pl¨¢stico, si en el encargo se pide una arquitectura singular se est¨¢ apostando por la "arquitectura-espect¨¢culo". "Un proyecto de esta envergadura no debe resolverse como un encargo entre particulares. Los arquitectos proponen un edificio singular porque es lo que le han pedido. Pero la ciudad deber¨ªa de dotarse de alg¨²n instrumento que le permitiese garantizar la calidad arquitect¨®nica de sus grandes proyectos. No se trata s¨®lo de que se cumpla el PGOU, sino de velar por la calidad", arguye Sierra, quien tambi¨¦n es profesor en la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Sevilla.

En este sentido, Jos¨¦ Ram¨®n Sierra pone de ejemplo al Ayuntamiento de Barcelona, que ha creado comisiones de calidad para los distintos distritos de la ciudad. Sierra forma parte de la comisi¨®n del centro hist¨®rico Ciudad Vieja y Ensanche. Cada comisi¨®n est¨¢ integrada por dos arquitectos locales, otro de fuera de la ciudad, un ingeniero y una persona del mundo cultura. "Estas comisiones dan un informe sobre la calidad del proyecto y cuenta con profesionales tan prestigiosos como Ricky Burdett que es el director de esta ¨²ltima Bienal de Arquitectura de Venecia", afirma. Para Sierra, en el caso de la torre de Puerto Triana la altura es "un tema secundario". "Lo que debemos aclarar es s¨ª esa torre es una necesidad de la ciudad de Sevilla o un acto propagand¨ªstico", concluye.

En opini¨®n del arquitecto Francisco Torres, autor de la rehabilitaci¨®n del palacio de Altamira en Sevilla, el problema del concurso no radica en la altura del edificio sino en su integraci¨®n en el entorno. "No tengo demasiada informaci¨®n de los anteproyectos pero, en principio, no me atrae ninguno. Las im¨¢genes que he visto me desanimaron a analizarlos. Creo que los edificios, cuanto m¨¢s grandes deben ser m¨¢s simples. Lo que se nos ha ofrecido parece arquitectura de segundo orden", sentencia.