"Padec¨ª seis cursos de atentados contra mi persona"
La Universidad de Almer¨ªa (UAL) recurri¨® el pasado 5 de octubre la sentencia de un juez que anulaba la resoluci¨®n del vicerrector de Estudiantes, Juan Jos¨¦ Gim¨¦nez, negando la adaptaci¨®n de dos asignaturas pr¨¢cticas de Enfermer¨ªa a Mar¨ªa del Mar Granados (25 a?os), que padece una sordera del 44% en ambos o¨ªdos.
Pregunta. ?Esperaba que la UAL recurriera la sentencia?
Respuesta. La verdad es que he llegado a esperar que no lo hiciera porque la sentencia lo que recoge es mi derecho a la educaci¨®n y pensaba que la Universidad de Almer¨ªa lo iba a entender as¨ª. Lo que ocurre es que siempre he sabido que desde la Escuela de Enfermer¨ªa no est¨¢n dispuestos a hacer las adaptaciones y lo ¨²nico que han repetido hasta la saciedad es que para ser enfermera tengo que recuperar el o¨ªdo. La sensibilidad de quienes gobiernan Enfermer¨ªa es ¨¦sa y desde tal posici¨®n han implicado a la Universidad para que no realice adaptaciones reales ni me permitan estar en igualdad de oportunidades. A pesar de negarlo una y otra vez, con este recurso han demostrado que no est¨¢n dispuestos ni preparados para enfrentarse a personas diferentes a ellos ni a proporcionarles las medidas para que realmente sean miembros de la comunidad universitaria.
"Un profesor siempre me daba la espalda en las clases para que no pudiera leerle los labios"
P. En su escrito de alegaciones la Universidad dice que el hospital no es suyo y que no estaba en su mano realizar la adaptaci¨®n, ?hay m¨¢s implicados?
R. Lo que yo s¨¦ es que en la Universidad de Almer¨ªa hay una Diplomatura en Enfermer¨ªa en la que solicit¨¦ plaza, me la dieron, me matricul¨¦ y estoy sufriendo un calvario desde 1999. ?Que el hospital no es de la Universidad? Ignoro qu¨¦ patrimonio tiene. En la sentencia se recoge que la Universidad no se ha dirigido jam¨¢s al hospital ni a la Junta para pedirles que lo adaptaran.
P. La UAL tambi¨¦n dice que ninguna otra universidad espa?ola ha hecho una adaptaci¨®n como la que usted reclama...
R. Lo que yo reclamo son profesores con filosof¨ªa universitaria, personas capaces de ejercer la docencia con profesionalidad, capaces de adaptarse a las necesidades del alumnado y adaptar los recursos para que su did¨¢ctica sea apropiada. Puede que otras universidades tengan profesores preparados y cualificados para ejercer la ense?anza. De hecho, en Alicante un alumno sordo profundo termin¨® Enfermer¨ªa y en Cantabria hemos localizado un m¨¦dico que tambi¨¦n es sordo de nacimiento.
P. ?En qu¨¦ consiste la adaptaci¨®n que precisa y cu¨¢nto cuesta?
R. No soy adaptadora, no soy t¨¦cnico de accesibilidad ni ingeniero electr¨®nico ni nada por el estilo y ni siquiera es cuesti¨®n de dinero. Tan s¨®lo se trata de que los responsables de Enfermer¨ªa, empezando por su directora, acepten de una vez por todas que las personas sordas podemos ser igual o mejor que ellas.
P. Mientras fue alumna, ?padeci¨® alguna experiencia discriminatoria?
R. No padec¨ª alguna, padec¨ª seis cursos acad¨¦micos de atentados contra mi persona, contra mis derechos como universitaria y contra mis derechos fundamentales. Recuerdo un profesor que siempre daba las clases de espaldas a m¨ª a pesar de mis intentos para verle la boca y leerle los labios y otro, el d¨ªa del examen de final de curso, dio el aviso de que cualquier alumno que se diera la vuelta y mirara hacia atr¨¢s estaba suspenso, a continuaci¨®n se dirigi¨® al final del aula y comenz¨® a dictar las preguntas... En pr¨¢cticas una profesora el primer d¨ªa de clase dijo a todo el grupo que bastaba con acudir a clase para cumplir los objetivos y aprobar. No falt¨¦ a ninguna y aqu¨ª estoy, con esa pr¨¢ctica en el aire.
P. ?Si la actitud de la Escuela de Enfermer¨ªa hubiese sido diferente tendr¨ªa ya el t¨ªtulo?
R. Estoy completamente segura. Despu¨¦s de siete a?os estar¨ªa ya ejerciendo dentro de cualquier unidad hospitalaria, incluso como profesora de la escuela o como t¨¦cnico de la Delegaci¨®n de salud sin necesidad de tener que adaptar ning¨²n hospital.
P. Cu¨¢les son sus planes de vida y en qu¨¦ le afecta carecer de t¨ªtulo en la actualidad...
R. Esta situaci¨®n me ha cambiado la vida. Mi vocaci¨®n es la Enfermer¨ªa y ahora he tenido que desviarme hacia otras cosas en las que no tener el t¨ªtulo limita mis posibilidades. As¨ª, para hacer oposiciones o tienes una diplomatura o s¨®lo puedes acceder a las de limpiadora o conserje. E incluso, en un mismo puesto de trabajo, el salario var¨ªa seg¨²n la titulaci¨®n.
P. ?Cambiar¨ªa algo que el TSJA volviera a darte la raz¨®n?
R. La sentencia favorable posibilitar¨ªa el que recuperara la libertad para estudiar lo que quisiera, donde quisiera y cuando quisiera. La sentencia del juez Rivera ha marcado un hito no s¨®lo para m¨ª, sino para todas las personas sordas o incluso con otra discapacidad. Lo m¨¢s importante es que elimina comportamientos antidemocr¨¢ticos como los que he sufrido en Enfermer¨ªa. Si el TSJA hace firme la sentencia actual, me har¨¢n la persona m¨¢s feliz del mundo y volver¨¦ a la escuela y el que no me aguante que se vaya porque ya no habr¨¢ vuelta de hoja. Por otra parte, ahora hay personas que se cruzan de acera cuando me ven por la calle, que hacen como si no me han visto y eso me dice mucho de d¨®nde est¨¢n los obst¨¢culos para quienes tenemos alg¨²n tipo de discapacidad: en la cabeza de los intolerantes.
P. ?Ha merecido la pena tanta lucha estos a?os?
R. Personalmente me lo he tomado como un reto, pero nadie se merece tener que enfrentarse a situaciones como ¨¦stas. Hay cosas que me apenan profundamente, como el que los profesores que me han puesto m¨¢s pegas y me han insultado con su comportamiento son enfermeros que dicen defender los cuidados integrales de los pacientes desde la individualidad y que han repetido una y otra vez teor¨ªas que se basan en la atenci¨®n y en saber escuchar. No se merecen ser enfermeros, ni siquiera ser formadores de futuros enfermeros, y mucho menos dirigir una escuela.
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