Sublime Bar?a
Los azulgrana golean al Villarreal despu¨¦s de cuajar una actuaci¨®n estelar con la mejor versi¨®n de Ronaldinho
Feliz y dichosa, pa?uelo en mano y de pie, como mandan las ocasiones solemnes, la hinchada del Camp Nou abraz¨® entusiasmada a su querido Bar?a. Un reencuentro sublime en un d¨ªa insospechado, como acostumbran a producirse los grandes acontecimientos. Largamente extra?ado y a?orado, por m¨¢s aval que le diera el liderato, ayer reapareci¨® la versi¨®n m¨¢s art¨ªstica del Barcelona. Fue un equipo m¨¢s reconocible que nunca, virtuoso como ninguno, siempre delicado, finalmente estupendo en el juego. Ya no cont¨® s¨®lo los goles, como en Mallorca o Sof¨ªa, sino que anoche recuper¨® su explendor futbol¨ªstico. Volvieron a marcar Ronaldinho, Gudjhonsen e Iniesta. A diferencia de encuentros anteriores, sin embargo, el Bar?a tuvo pase, verticalidad, continuidad y sustancialidad. Musicalidad. Acostumbrada desde el verano a un estado de alerta permanente, la afici¨®n agradeci¨® un ejercicio liberador como el saboreado ante el Villarreal. Acab¨®, al menos de momento, el manual de supervivencia en el estadio, y el Bar?a se sinti¨® alegre y jovial, como si fuera Fred Astaire en un sal¨®n de baile o Mohamed Al¨ª en un ring, o, como es el caso, Ronaldinho en un campo de f¨²tbol.
BARCELONA - 4 VILLARREAL 0
Barcelona: Vald¨¦s; Zambrotta, Thuram, Puyol, Gio; Iniesta, Edmilson (Oleguer, m. 77), Deco; Giuly (Xavi, m. 67), Gudjohnsen (Ezquerro, m. 72) y Ronaldinho. No utilizados: Jorquera; Belletti y Sylvinho.
Villarreal: Barbosa; Javi Venta, Fuentes, Cygan, Arruabarrena; Cani, Senna, Josico (Tacchinardi, m. 46), Marcos; Jos¨¦ Mari (Guille Franco, m. 46) y Forl¨¢n. No utilizados: Viera; Pe?a, Josemi, Somoza y Pereira.
Goles: 1-0. M. 34. Ronaldinho transforma un penalti cometido sobre Gudjohnsen. 2-0. M. 54. Gudjohnsen remata de cabeza un centro de Iniesta. 3-0. M. 69. Iniesta remata de media chilena un centro de Zambrotta. 4-0. M. 87. Ronaldinho controla con el pecho un centro de Xavi y bate a Barbosa con una tijereta.
?rbitro: P¨¦rez Lasa. Amonest¨® a Cygan, Zambrotta, Fuentes, Cani, Arruabarrena, Ronaldinho y Tacchinardi.
78.417 espectadores en el Camp Nou. Se guard¨® un minuto de silencio por Joaquim Xicoy, ex presidente del Parlamento catal¨¢n, y de Francesc Mitjans, arquitecto del Camp Nou.
Reapareci¨® el delicioso Ronaldinho y tambi¨¦n el entra?able Bar?a. Los azulgrana se marcaron un partido admirable por lo bien pensado, mejor jugado y felizmente resuelto ante un Villarreal desfigurado, dimisionario desde que tom¨® un penalti discutible, presa de la melancol¨ªa del ausente Riquelme, falto de la aceleraci¨®n de Nihat, entregado a Forl¨¢n, un pistolero que acude siempre al Camp Nou con el rifle con el que abati¨® a Eto'o en el litigio por el pichichi.
Quiso y no pudo Forl¨¢n, y el Villarreal, que se apag¨® con el tiempo, v¨ªctima de la velocidad del Barcelona, especialmente despierto, r¨¢pido en las transiciones, muy enfocado al ¨¢rea contraria. Atacaba r¨¢pido y raso el Bar?a, activado por el juego minucioso y exquisito de Iniesta, el excelente instinto futbol¨ªstico de Deco y la habilidad y el desequilibrio del mago Ronaldinho, mejorado con el paso de los d¨ªas, seguro de su ascendiente, a gusto con su rol de astro.
El partido nunca estuvo en punto muerto para suerte de la gent blaugrana, convencida de que los s¨ªntomas que ofrec¨ªa la jornada eran un certificado que garantizaba la victoria. Agradeci¨® el Barcelona el aseo y tambi¨¦n la mansedumbre del Villarreal, y madur¨® el encuentro desde la intensidad con la precisi¨®n y la grandeza de los equipos con estilo. Estirado como estaba el campo, los azulgrana alcanzaron la cancha adversaria por los dos costados, a partir de Giuly y de Ronaldinho, con los extremos o los interiores, y tambi¨¦n desde el balc¨®n del ¨¢rea, impulsados por la jerarqu¨ªa de un excelso Edmilson,
El gol se daba por descontado en el Barcelona. Por m¨¢s que Barbosa se acreditara como un prometedor portero, las llegadas azulgrana se suced¨ªan con tanta frecuencia que en la grada se apostaba por el minuto y el autor del tanto, sin ¨¢nimo de faltar a nadie, ni al rival, igualmente entregado a la causa barcelonista, como tambi¨¦n el ¨¢rbitro, que pit¨® penalti cuando Gudjhonsen cay¨® en el ¨¢rea despu¨¦s de sentir la pierna de Cygan. Asistido en largo por Ronaldinho, el ariete es infalible cuando se da media vuelta: es gol o penalti.
No perdon¨® Ronaldinho, asistente y goleador al mismo tiempo, nuevamente jugador universal. El brasile?o arrastr¨® al equipo hacia una actuaci¨®n estupenda por m¨¢s que desde la rivalidad se pueda apuntar al ¨¢rbitro, intervencionista en el penalti y pasivo cuando Gudjhonsen cabece¨® un centro de Iniesta en una acci¨®n discutible de fuera de juego, por m¨¢s que no lo pareci¨®. Gudy finiquit¨® el encuentro y abund¨® en la autoridad futbol¨ªstica del Barcelona, muy por encima del Villarreal y de P¨¦rez Lasa.
A Pellegrini le faltaron jugadores para combatir el despliegue del Bar?a, que despu¨¦s se adorn¨® con jugadas maravillosas y goles tan bellos como serenos. El tanto de Iniesta fue especialmente celebrado, por ser quien era el autor y por la dificultad del remate, pues el volante remat¨® con una media chilena. Nada comparable, en cualquier caso, con el gol de Ronaldinho por imposible: Xavi templ¨® al segundo palo y el brasile?o par¨® la pelota con el pecho, se dio media vuelta para evitar a Cygan al tiempo que remataba de espaldas con la derecha al palo imposible del meta. Un giro prodigioso y un remate celestial. La mejor manera para poner el punto final a un partido que el Bar?a sabore¨® especialmente por esperado y finalmente encontrado.
Ha vuelto Ronaldinho y tambi¨¦n el Bar?a m¨¢s seductor, campe¨®n de Liga y de Europa, justamente cuando se recelaba de su momento de juego. As¨ª de imprevisibles y caprichosos son los genios. Y el Bar?a fue ayer puro arte.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.