En armon¨ªa con el delta
Una visita en Venezuela a los waraos, ind¨ªgenas de la desembocadura del Orinoco
El delta del Orinoco (24.533 kil¨®metros cuadrados) es el segundo m¨¢s grande del mundo y el tercero m¨¢s caudaloso. Tiene m¨¢s de 300 ca?os de importancia, algunos de m¨¢s de 600 kil¨®metros de largo y hasta 100 metros de profundidad, y otros estrech¨ªsimos seg¨²n c¨®mo est¨¦ de crecida la vegetaci¨®n. Las mareas del oc¨¦ano Atl¨¢ntico, con unos 300 kil¨®metros de costa, influyen en el nivel de las aguas, aparte de las corrientes del r¨ªo y la crecida en la ¨¦poca de lluvias.
El r¨ªo Orinoco es comunicador de gentes, transmisor de vida que recoge ofrendas en cada afluente de las distintas culturas asentadas en su cuenca, en la que actualmente viven 15 etnias diferentes.
El Orinoco -o la "serpiente enroscada" o el "tejido de aguas" en lenguas ind¨ªgenas-, cuando llega al final y se abre en cientos de islas y ca?os, se encuentra con un secreto bien guardado: los ind¨ªgenas waraos, que tienen una sabidur¨ªa de alt¨ªsimo valor ecol¨®gico sobre el mundo vegetal y la vida en el agua, que nadie conoce mejor que ellos. Viven en el delta desde hace m¨¢s de 4.000 a?os.
Costumbres ancestrales
Los waraos fueron los primeros habitantes del continente americano que vio Col¨®n. Hoy hay unos 30.000, y son la segunda etnia m¨¢s numerosa en Venezuela. Gracias a su aislamiento han tenido muy pocos cambios, y, preocupados por el deterioro de su entorno natural, mantienen intactas su lengua y sus costumbres. Bartolom¨¦ de las Casas los tuvo bajo su jurisdicci¨®n, aunque los misioneros no se establecieron en sus tierras porque dec¨ªan que ning¨²n ser humano podr¨ªa sobrevivir en un sitio as¨ª. Durante la colonizaci¨®n consiguieron sacar de los ca?os a algunos waraos de la periferia y llevarlos a las reducciones (pueblos creados por los misioneros para evangelizar a los ind¨ªgenas), pero por poco tiempo, ya que casi siempre se escapaban y regresaban a sus aguas bajas del delta.
No necesitan salir de la zona. De las aguas sacan infinitos pescados y la tierra les regala frutas y verduras. De la palma moriche (Mauritia fexuosa) lo aprovechan todo, como del cerdo los espa?oles. Del tronco extraen la harina para hacer el pan; una bebida que puede ser dulce si se toma seg¨²n brota de la corteza, o alcoh¨®lica si se deja fermentar; gusanos (Ruyncophora palmarum), que son como los chopitos, ricos en prote¨ªnas y grasas. Sacan tambi¨¦n tablones para la construcci¨®n de suelos. Con los frutos del racimo hacen zumo y mermelada, y, una vez desgranados, los huesos sirven como le?a menuda. Del cogollo sacan una verdura: el palmito, primo del internacionalmente famoso; fibras para hacer hilos, y sogas para tejer sus famos¨ªsimos chinchorros, taparrabos, cajas y alpargatas. Con las hojas construyen el techo de la casa, hacen astas para arpones, boyas para las redes de pesca, flechas para cazar aves y se pueden utilizar como vela en navegaci¨®n.
Entradas de agua salada
Hoy sus problemas los causa el dique-carretera que se construy¨® en los a?os sesenta del siglo pasado para sacar los minerales que se produc¨ªan en el vecino Estado de Bol¨ªvar. Baj¨® el nivel de agua dulce de muchos brazos y ca?os, y entr¨® el agua salada alterando el equilibrio ecol¨®gico. Otro de sus problemas son los cada vez m¨¢s numerosos colonos ganaderos de b¨²falos, que necesitan grandes extensiones de tierra inundable.
Dar un pase¨ªto por la selva es introducirse entre la tupida y ensortijada vegetaci¨®n y aparecer en un escenario rom¨¢ntico, amplio y con poca luz. Al poco, aparecen, iluminadas por los rayos que se cuelan, numerosas especies vegetales y animales con colores, texturas y olores naturalmente ex¨®ticos. El caminar se disfruta utilizando m¨¢s ma?a que fuerza, sin prisas y con botas de agua. El suelo firme es de lo m¨¢s inseguro y resbaladizo; cuando apoyas el pie, nunca sabes hasta d¨®nde se hundir¨¢ la bota en el fango, o si eso que parece firme ser¨¢ rama, ra¨ªz, semilla o serpiente. Una cosa curiosa es que no hay piedras.
Las casas se levantan paralelas al r¨ªo, bien ancladas en la tierra con pilotes de mangle, como las ra¨ªces de los ¨¢rboles. El techo est¨¢ construido a dos aguas y tejido de palma de temiche, sirvi¨¦ndoles para colgar todas sus pertenencias. No tienen paredes para que circule mejor el aire. Cada casa tiene dos espacios independientes, uno para la cocina y el otro para todo lo dem¨¢s; ambos espacios, comunicados por un puente-embarcadero, el mismo que une todas las casas de la comunidad.
Las curiaras son el objeto m¨¢s valorado desde que son muy peque?os, ya que aprenden a navegar en ellas casi antes de andar, y son muy necesarias para la vida en el agua. Para su construcci¨®n se precisa un solo tronco adulto de cachicamo (Calophilum sp.), que se vac¨ªa con hacha y machete y se pule con cepillos. Despu¨¦s se le prende fuego durante horas, mientras se van colocando travesa?os cada vez m¨¢s largos para dilatar la madera, y para poder navegar cuando se enfr¨ªe. Se hacen a medida del usuario.
Ahora, en el conuco (huerto familiar) cultivan ocumo chino, yuca dulce y amarga, ca?a de az¨²car, bananas y pi?as que antiguamente s¨®lo recolectaban.
No tienen una organizaci¨®n pol¨ªtica con representantes definidos, sino que cada jefe de familia decide dentro de su clan familiar y no tiene ninguna autoridad superior que le ordene o gu¨ªe. La familia se organiza en funci¨®n de las mujeres, que no abandonan la casa, y son los hombres los que pasan a formar parte de su comunidad.
Termitas aplastadas
Hay mosquitos todo el a?o y sus picaduras son muy distintas, lo que crea muchos problemas. Los repelentes del mercado est¨¢n dise?ados para determinadas especies estudiadas, pero quedan muchos mosquitos desconocidos para los que el repelente es caramelo. Hay que ech¨¢rselo encima de la ropa en aerosol y usar tejidos frescos con la trama lo m¨¢s tupida posible. Lo m¨¢s eficaz es el remedio warao, que consiste en cortar un trozo de colmena de comej¨¦n (un tipo de termita), meter la mano para que se llene de estos insectos y espachurrarlos sobre la piel seg¨²n corren por tu cuerpo. Sueltan un olor que no resulta desagradable a las personas y repele en el acto a los mosquitos que te picaron la noche anterior... y se olvida su olor al respirar el perfume de la flor del cacao silvestre o de las orqu¨ªdeas.
GU?A PR?CTICA
Datos b¨¢sicos- Venezuela tiene m¨¢s de 25 millones de habitantes.- Prefijo telef¨®nico: 0058.- Moneda: un euro equivale a casi tres bol¨ªvares.C¨®mo llegar- La mayorista Kuoni (www.kuoni.es) ofrece un paquete (11 d¨ªas / 9 noches) desde 1.748 euros m¨¢s tasas y suplementos. Estancia de tres d¨ªas y tres noches en el delta del Orinoco. El precio incluye vuelos, alojamiento con desayuno, gu¨ªa y traslados.- La mayorista Mundicolor (www.mundicolor.es) ofrece un paquete (13 d¨ªas / 11 noches) desde 2.610 euros m¨¢s tasas y suplementos. Estancia de dos d¨ªas y dos noches en el delta del Orinoco. El precio incluye vuelos, alojamiento y traslados.Informaci¨®n- Turismo de Venezuela(www.mintur.gob.ve). - Embajada de Venezuela en Madrid(www.venezuela.es; 915 98 12 00)- www.venezuelaturistica.com.- www.venezueladigital.net.
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