Procesados tres responsables de una empresa por explotaci¨®n laboral de inmigrantes

Trabajaban jornadas de hasta 11 horas. Eran obligados a pagar una penalizaci¨®n de 60 euros por d¨ªa de ausencia, aunque fuese por enfermedad o incluso por sufrir un accidente en las propias instalaciones del taller que los empleaba. Si faltaban tres d¨ªas seguidos, eran despedidos. Y el derecho de vacaciones no exist¨ªa. Estas eran las condiciones en las que trabajaban 38 extranjeros en una nave de Carral (A Coru?a). El empresario y dos directivos de Ferralla Lois est¨¢n ahora en libertad con cargos, dos de ellos tras pagar cada uno una fianza de 3.000 euros.

Una denuncia de Comisiones Obreras (CC OO), que aval¨® posteriormente una decena de inmigrantes en sus declaraciones judiciales, permiti¨® a polic¨ªas de las brigadas de Extranjer¨ªa de A Coru?a y de Madrid, en colaboraci¨®n con funcionarios de Inspecci¨®n de Trabajo, desarticular las pr¨¢cticas delictivas de esta empresa gallega, dedicada a la fabricaci¨®n de productos met¨¢licos. Es una de las m¨¢s importantes del sector y emplea a unas 300 personas.

La operaci¨®n policial, que comenz¨® el 9 de octubre, se sald¨® con la detenci¨®n de tres responsables del taller, acusados de incurrir en un delito contra el derecho de los trabajadores, as¨ª como la de 11 inmigrantes africanos por carecer del permiso legal para residir en Espa?a.

El empresario, un vecino de Ordes de 42 a?os de edad y cuya identidad responde a las siglas de J.D.L., as¨ª como los responsables de Personal de Ferralla Lois, residentes en Ordes y Oleiros, no s¨®lo impon¨ªan a los africanos que empleaban condiciones y penalizaciones laborales ilegales. A los sin papeles les exig¨ªan, como requisito imprescindible para poder trabajar, que presentasen copias de la documentaci¨®n de compa?eros extranjeros que ya hab¨ªan regularizado su situaci¨®n en el pa¨ªs con el fin de hacerles un contrato bajo una falsa identidad. Los responsables de la empresa nunca cumplieron sus promesas de tramitarles permisos legales de residencia y trabajo.

Un ciudadano de Mal¨ª y otro de Camer¨²n, ambos en situaci¨®n irregular, son acusados de un delito de usurpaci¨®n de identidad por trabajar inscritos con la documentaci¨®n de otras personas. Otros nueve africanos, del total de 38 extranjeros empleados en este taller del pol¨ªgono de Os Capelos de Carral, tambi¨¦n fueron detenidos por estancia irregular en Espa?a y se les abri¨® un expediente de expulsi¨®n del pa¨ªs. Con edades comprendidas entre los 48 y 24 a?os, proceden en su mayor¨ªa de Senegal. Dos son de Gambia y otro de Guinea Conakry.

Hablan los sin papeles

Comisiones Obreras se encarga de asesorar y defender a estos inmigrantes que se han atrevido, pese a no tener la documentaci¨®n en regla, a denunciar las condiciones de explotaci¨®n laboral que impon¨ªa esta empresa a sus empleados extranjeros, estuvieran o no en situaci¨®n regular. "Es importante y significativo", rese?a el representante del sindicato Santiago Huertas, porque normalmente los sin papeles s¨®lo acuden a denunciar los abusos laborales cuando ya no tienen relaci¨®n con la empresa, lo que impide a Inspecci¨®n de Trabajo obtener pruebas y tomar cartas en el asunto. En este caso, los inspectores actuaron conjuntamente con agentes de las brigadas de Extranjer¨ªa de A Coru?a y de Madrid. Tras comprobar la situaci¨®n irregular de 11 de los 38 extranjeros empleados en una de las naves que Ferralla Lois tiene en el pol¨ªgono de Carral, fue el testimonio de los propios inmigrantes el que desencaden¨®, el pasado jueves, la detenci¨®n y puesta a disposici¨®n judicial de los responsables de la empresa bajo la acusaci¨®n de explotaci¨®n laboral. Intimidaban a los africanos indocumentados, les induc¨ªan a presentar documentaci¨®n ajena para ser contratados bajo la identidad de conciudadanos de su pa¨ªs, que s¨ª ten¨ªan permiso legal de residencia y trabajo, y les multaba por no acudir a trabajar tras sufrir, por ejemplo, un accidente laboral en el propio taller. "Los empresarios se aprovechaban de que no ten¨ªan los papeles en regla para explotarlos laboralmente", explica Huertas. Los inmigrantes, seg¨²n Comisiones, nunca eran enviados a la mutua de la empresa cuando sufr¨ªan alg¨²n accidente en el trabajo, sino que deb¨ªan acudir a m¨¦dicos de cabecera para que no constara como accidente laboral. Los responsables de la empresa eludieron responder a la llamada de este diario.