Bruselas teme que las grandes el¨¦ctricas frenen la competencia energ¨¦tica en la UE

Bruselas teme que la resistencia de las grandes empresas impida desarrollar un modelo energ¨¦tico competitivo en la UE. La Comisi¨®n, que presentar¨¢ un paquete de medidas el pr¨®ximo d¨ªa 10 para aumentar la competencia en el sector, busca alternativas a su propuesta inicial de separar la propiedad entre la generaci¨®n y el transporte de la energ¨ªa con el fin de acabar con el poder de los monopolios. Y es que esta propuesta ha suscitado el rechazo en¨¦rgico de las grandes compa?¨ªas de gas y electricidad que operan en Europa, y de algunos Gobiernos, como el franc¨¦s.

El paquete de medidas para aumentar la competencia y la eficiencia en el sector energ¨¦tico que presentar¨¢ la Comisi¨®n Europea el pr¨®ximo d¨ªa 10, podr¨ªa verse seriamente rebajado si prospera la resistencia de los grandes generadores de gas y electricidad que operan en la UE. Una de las propuestas que baraja el Ejecutivo Comunitario y que est¨¢ despertando mayor oposici¨®n propugna la separaci¨®n de la propiedad entre las actividades de generaci¨®n, transporte y distribuci¨®n para facilitar la efectiva entrada de nuevos competidores en el mercado y abaratar los precios.

Bruselas ha puesto de manifiesto que la situaci¨®n actual de pr¨¢ctico monopolio ejercido por las grandes compa?¨ªas establecidas hist¨®ricamente, en los mercados de gas y electricidad, supone una seria desventaja competitiva especialmente para las empresas peque?as y medianas.

La iniciativa de optar por una medida m¨¢s firme como la divisi¨®n de la propiedad de las distintas actividades de producci¨®n, transporte y comercializaci¨®n, ha sido consecuencia del desinter¨¦s mostrado por los Estados Miembros en transponer correctamente las directivas comunitarias del gas y electricidad de 2003 que ya exig¨ªan la separaci¨®n legal de estas actividades.

El comisario de Energ¨ªa, Andris Piebalgs, ha abierto expedientes contra la mayor¨ªa de Estados, unos 20 por la directiva de electricidad y una docena por la de gas, por no haber establecido en su legislaci¨®n nacional la obligaci¨®n de que estas actividades fueran desempe?adas por sociedades distintas aunque pertenecieran al mismo grupo. Las grandes empresas hist¨®ricamente establecidas como E.ON y RWE en Alemania, y EDF y GdF en Francia, tienen la sart¨¦n por el mango al poseer las redes de transporte y fijar las condiciones en que estas instalaciones pueden ser utilizadas por los terceros que quieren entrar en el sector. En la pr¨¢ctica las condiciones ofrecidas no resultan rentables y, por tanto, la competencia no es posible.

La propuesta de separaci¨®n de propiedad, anunciada tanto por la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, como por el propio presidente de la Comisi¨®n, Jos¨¦ Manuel Durao Barroso, ha tropezado con la oposici¨®n del presidente franc¨¦s Jaques Chirac, y la canciller alemana, Angela Merkel, que no han dudado en asumir la protecci¨®n de sus respectivas empresas nacionales de gas y electricidad, aut¨¦nticos poderes f¨¢cticos en los pa¨ªses industrializados. El propio Barroso consciente de esta posici¨®n de rechazo ya se expres¨® con extrema prudencia el pasado 30 de noviembre. "Intentamos proponer", manifest¨®, "nuevas medidas sobre la separaci¨®n de propiedad y sobre un regulador para liberar los mercados de energ¨ªa en beneficio de los consumidores".

Piebalgs, que es a quien corresponde presentar la propuesta a¨²n no se ha pronunciado, "ni renunciado a la divisi¨®n de propiedad", seg¨²n fuentes pr¨®ximas a su departamento. "Lo que quiere el comisario", se?alan las mismas fuentes, "es una separaci¨®n efectiva que aumente la competencia de manera real".

La forma alternativa que se baraja es el modelo escoc¨¦s donde un Operador Independiente del Sistema de Transmisi¨®n es el gestor de la red de transporte. Las instalaciones de transporte puede seguir siendo propiedad de cualquiera de las compa?¨ªas hist¨®ricas del sector, pero la gesti¨®n es efectuada por una sociedad de servicios completamente independiente, con sus propios accionistas.

Estas gestoras decidir¨¢n las inversiones necesarias con independencia de sus propietarios a los que pagar¨ªan un canon por el uso de la red y no tienen obligaci¨®n alguna de informar de las condiciones que fijan a sus clientes. No obstante, la complejidad de este sistema alternativo tampoco ofrece excesivas garant¨ªas y parece ser m¨¢s consecuencia de la presi¨®n de las grandes empresas que el resultado de un an¨¢lisis de las opciones m¨¢s ventajosas.