'Soldados de papel' documenta los recortables de la Guerra Civil

La Guerra Civil tuvo un inesperado escenario b¨¦lico en los juguetes y unas tropas fr¨¢giles en los soldados de papel y cart¨®n de los recortables de la ¨¦poca. Milicianos, legionarios, pilotos, marinos, caballer¨ªa mora y en general todos los contingentes de ambos bandos, adem¨¢s de personajes como Durruti, Miaja o Garc¨ªa Oliver, fueron convertidos en figuras troqueladas para que los ni?os reprodujeran en miniatura las batallas que libraban sus padres. Hoy ese material, de naturaleza delicada y perecedera, es un tesoro para coleccionistas y lo ha documentado concienzudamente un libro a la vez encantador y terrible que viene a poner su granito de arena en la recuperaci¨®n de la memoria hist¨®rica: Soldados de papel, recortables de la Guerra Civil (1936-1939), de Ricard Mart¨ª y Manuel Ortega (Editorial Salvatella).

La obra, profusamente ilustrada, recoge juntos como no lo estuvieron en su d¨ªa a soldados de uno y otro bando, con su equipamiento, sus armas, carros de combate, ca?ones, aviones, barcos y hasta submarinos. Entra?ables y nost¨¢lgicas, las figuritas no dejan de tener un lado siniestro, pues, como se?alan los autores, prolongaron en el terreno de la infancia la propaganda de guerra imponiendo las ideas y las im¨¢genes de un bando sutilmente en los ni?os. El libro rastrea la producci¨®n de los troquelados y apunta curiosidades, como la reconversi¨®n de algunas figuras para adaptarlas al ej¨¦rcito de los vencedores; as¨ª, "la armada fiel" deviene "los alegres marineros".