Mart¨ªn Berrocal, condenado a 30 meses de c¨¢rcel por fraude en ayudas al aceite

El Juzgado de lo Penal n¨²mero 2 de Ja¨¦n ha condenado al empresario taurino Jos¨¦ Luis Mart¨ªn Berrocal a dos a?os y medio de prisi¨®n por un delito de falsedad en documento p¨²blico y otro contra la Hacienda p¨²blica, adem¨¢s del pago de una multa de 600.000 euros, por cobrar de forma ilegal m¨¢s de 381.000 euros en concepto de subvenciones europeas a la producci¨®n de aceite de oliva. La defensa ha anunciado que recurrir¨¢ ante la Audiencia Provincial la sentencia, que est¨¢ por debajo de los cuatro a?os de prisi¨®n que ped¨ªan la Fiscal¨ªa y la Junta de Andaluc¨ªa, que ejerci¨® la acusaci¨®n particular.

Mart¨ªn Berrocal fue enjuiciado el pasado 29 de noviembre acusado de unos hechos que se remontan a la campa?a olivarera 1996-97, cuando el conocido ganadero, de 74 a?os, ejerc¨ªa el cargo de administrador ¨²nico de cuatro empresas agr¨ªcolas ubicadas en distintas localidades de la provincia jienense, que gestionaban m¨¢s de 200.000 olivos de regad¨ªo con una producci¨®n de aceituna superior al mill¨®n y medio de kilos por cosecha y que daban trabajo en cada campa?a a unas 200 personas.

La sentencia del magistrado del titular del Juzgado de lo Penal n¨²mero 2 de Ja¨¦n, Jos¨¦ Mar¨ªa Ca?ada Cl¨¦, considera probado que, a trav¨¦s de estas sociedades, Mart¨ªn Berrocal expidi¨® cuatro certificados falsos de molturaci¨®n de aceituna con el fin de percibir la correspondiente subvenci¨®n.

"Nunca pens¨¦ que pod¨ªa haber irregularidades; yo me fiaba de mi gente al firmar los documentos", declar¨® durante el juicio el empresario, que destac¨® que, al tener conocimiento de las imputaciones que pesaban sobre ¨¦l, consign¨® en el juzgado el importe de las cantidades cobradas de modo fraudulento.

Fueron inspectores del Estado y de la Junta de Andaluc¨ªa los que incoaron el expediente sancionador contra las sociedades gestionadas por Mart¨ªn Berrocal. Uno de ellos, Pedro ?ngel Castellanos, inspector de la Agencia del Aceite de Oliva, dijo que constat¨® la existencia de irregularidades al comprobar que no hab¨ªa orujo (residuo obtenido en la extracci¨®n del aceite de oliva) ni consumo de energ¨ªa el¨¦ctrica con relaci¨®n a la aceituna declarada por el condenado para optar a las ayudas comunitarias.

Por su parte, la defensa de Mart¨ªn Berrocal sosten¨ªa que las certificaciones para optar a las ayudas europeas las exped¨ªa Aproliva (una asociaci¨®n de productores de aceite de oliva) con los datos facilitados por las almazaras del propio Mart¨ªn Berrocal, que viv¨ªa en Madrid y que apenas visitaba sus fincas en la provincia jienense. Respecto al orujo, indicaron que se empleaba como combustible en las calefacciones de una nave de cr¨ªa de cerdos de la firma Hijos de Andr¨¦s Molina, colindante con las fincas olivareras.