Una cadena de actuaciones m¨¦dicas fallidas agrav¨® el estado de Castro

Una grave infecci¨®n en el intestino grueso, al menos tres operaciones fallidas y varias complicaciones mantienen al dictador cubano, Fidel Castro, postrado con pron¨®stico muy grave, seg¨²n fuentes m¨¦dicas del hospital Gregorio Mara?¨®n de Madrid. En este centro trabaja Jos¨¦ Luis Garc¨ªa Sabrido, jefe del servicio de Cirug¨ªa, que viaj¨® a visitar a Fidel Castro en diciembre pasado. Garc¨ªa Sabrido descart¨® que Castro sufra c¨¢ncer. Un diplom¨¢tico cubano admiti¨® ayer que Castro sufre "problemas de cicatrizaci¨®n".

Seg¨²n las fuentes consultadas, Castro, de 80 a?os, sufr¨ªa antes del verano (transfiri¨® el poder en julio) una severa inflamaci¨®n del intestino grueso denominada diverticulitis. Se trata de bolsas an¨®malas en el intestino inflamadas que pueden llegar a infectarse y sangrar, causando hemorragias, de forma parecida a una apendicitis. Seg¨²n la periodista brasile?a Claudia Furiati, autora de la biograf¨ªa autorizada de Castro La historia me absolver¨¢, publicada en 2001, Castro ya padeci¨® diverticulitis hace m¨¢s de 20 a?os.

En esta ocasi¨®n, sin embargo, Castro ha sufrido esta enfermedad de forma m¨¢s severa. En verano, el l¨ªder cubano sangr¨® de forma abundante por el intestino. Esta adversidad le llev¨® a la mesa de operaciones, seg¨²n las mismas fuentes m¨¦dicas. Su estado, adem¨¢s, se vio agravado porque la infecci¨®n se extendi¨® causando una peritonitis, la inflamaci¨®n de la membrana que recubre los ¨®rganos digestivos. En esta primera operaci¨®n, el cirujano procedi¨® a retirarle una parte del intestino grueso, el sigma, y otra del recto, las m¨¢s afectadas por la diverticulitis. El cirujano tuvo que escoger entre dos procedimientos: el primero consiste en una ileostom¨ªa, la apertura de un ano artificial en el abdomen durante unas semanas mientras se recupera la parte del colon afectada. Durante este periodo, el paciente evacua en una bolsa hasta que una segunda intervenci¨®n conecta el intestino grueso con el recto para recuperar la din¨¢mica natural. El cirujano, en cambio, opt¨® por la segunda t¨¦cnica, que conecta directamente el colon transverso (la parte central del intestino grueso) con el recto.

La evoluci¨®n de Castro no fue buena. La infecci¨®n que sufr¨ªa impidi¨® que el empalme entre el colon y el recto cicatrizara y su abdomen se inund¨® de heces, causando otra peritonitis. En una segunda intervenci¨®n, los m¨¦dicos limpiaron y drenaron la zona infectada, suprimieron todo el intestino grueso y le realizaron un ano artificial.

Tras la segunda operaci¨®n, Castro tampoco cicatriz¨® bien. Adem¨¢s, su salud se agrav¨® con una afecci¨®n en la v¨ªa biliar. Una de las fuentes m¨¦dicas se?ala que sufri¨® una colecistitis aliti¨¢sica (una inflamaci¨®n de la ves¨ªcula biliar y de las v¨ªas biliares que se atribuye a la falta de riego sangu¨ªneo y tambi¨¦n a la manipulaci¨®n quir¨²rgica). Esta situaci¨®n tiene una alt¨ªsima mortalidad (alrededor de un 80%). Otra fuente se?ala que la dolencia de Castro oblig¨® a implantar en la v¨ªa biliar una peque?a pr¨®tesis fabricada en Corea. Pero ¨¦sta fall¨® y tuvo que ser sustituida por otra de origen espa?ol.

En diciembre, cuando Garc¨ªa Sabrido le visit¨®, se dudaba si someter a Castro a otra operaci¨®n. El paciente ten¨ªa una herida en el abdomen que liberaba al d¨ªa m¨¢s de medio litro de fluidos (prote¨ªnas, l¨ªquidos e iones), lo que causaba "una p¨¦rdida severa de nutrientes". Castro sufri¨® una regresi¨®n de su masa muscular y ha requerido alimentaci¨®n intravenosa.

Un diplom¨¢tico cubano admiti¨® ayer en Quito (Ecuador) que Castro sufre "problemas de cicatrizaci¨®n" que impiden su recuperaci¨®n, informa Reuters.