Arquitectura de hoteles
El equipo de Felipe S¨¢ez de Gordoa es autor del Puerto de Am¨¦rica de Madrid, en el que participan Foster, Nouvel o Hadid
FELIPE S?EZ DE GORDOA dirige, junto a su hermano Juan Carlos y Pedro Apaolaza, SGA Estudio de Arquitectura, una firma que desde Vitoria viene firmando decenas de hoteles en Espa?a y Europa. No se puede hablar de especializaci¨®n, pero s¨ª de un gusto por esta tipolog¨ªa constructiva que desde hace dos siglos resulta clave en el paisaje urbano y definidora de la imagen de una ciudad. Su aportaci¨®n m¨¢s conocida en estos ¨²ltimos a?os es el Hotel Puerta de Am¨¦rica en Madrid, en cuya decoraci¨®n han participado colegas como Zaha Hadid, Norman Foster o Jean Nouvel. En la actualidad, el estudio trabaja con C¨¦sar Pelli en la torre Iberdrola de Abandoibarra, en Bilbao.
Cuando Felipe y Juan Carlos S¨¢ez de Gordoa y Pedro Apaolaza se enfrentaron al proyecto del hotel Puerta de Am¨¦rica, en Madrid, no ten¨ªan ni idea de lo que se les ven¨ªa encima. Una cosa es dise?ar un edificio, algo en lo que ya ten¨ªan sobrada experiencia, y otra, enfrentarse a las ideas de 12 arquitectos y dise?adores de prestigio internacional, que reconvirtieron las correspondientes plantas en un reflejo de su visi¨®n del interiorismo hotelero.
Felipe S¨¢ez de Gordoa (Vitoria, 1945), no se arrepiente, ni mucho menos, de la experiencia. Le ha servido para corroborar algunas certezas que ya manejaba en los ¨²ltimos a?os: "La arquitectura era un arte desconocido. Desde Eiffel, el mundo era de los ingenieros, que ten¨ªan m¨¢s predicamento. De repente, la arquitectura se ha puesto de moda, como bien se observa en el Pa¨ªs Vasco, y la gente en la calle conoce los nombres de los m¨¢s c¨¦lebres, como si fueran artistas de cine".
Y, claro, al Puerta de Am¨¦rica, los clientes acuden en busca de su arquitecto preferido. Y, ah¨ª, S¨¢ez de Gordoa discrepa con el sentir mayoritario. "Prefieren las de Zaha Hadid, quiz¨¢s la m¨¢s llamativa, pero yo me quedo con Norman Foster, que por menos dinero consigue un acabado mejor y con materiales m¨¢s caros, como el vidrio y el cuero".
El arquitecto de Vitoria trabaj¨® con todos ellos, de una manera u otra, pero el profesional brit¨¢nico le sorprendi¨® por su capacidad para asumir el edificio. "Tiene una fachada orientada al Sur, que impone una gran luminosidad a las habitaciones. La mayor¨ªa optaron por eludir este fen¨®meno. Foster apost¨® por una decoraci¨®n que integraba el Sol, con lo que la habitaci¨®n parece mayor". Y ello sin olvidar el cap¨ªtulo del espacio, siempre tan marcado por la distribuci¨®n del edificio. "Por ejemplo, proyect¨® unos ba?os muy especiales, que, a excepci¨®n del inodoro, se integraban en la habitaci¨®n de una manera muy elegante y sorprendente", se?ala.
Los hoteles son lo suyo, sin duda. Desde que en 1992 empezaron con el Ciudad de Vitoria en la capital alavesa y el Castilla Plaza en Madrid, sus proyectos alojan a miles de ciudadanos en varias ciudades de Espa?a. Ahora han comenzado a trabajar en Europa, tras inaugurar en los ¨²ltimos meses sendos establecimientos en Santander y Huesca. "Bratislava, Londres y Berl¨ªn son nuestros pr¨®ximos objetivos", dice.
S¨¢ez de Gordoa recuerda c¨®mo el proyecto depende siempre del programa del promotor. "El arquitecto no es un especialista; hay que darle un programa. Lo m¨¢s libre es una iglesia, que es la casa de Dios; y lo m¨¢s dif¨ªcil, un hospital". Ahora bien, el Puerta de Am¨¦rica tambi¨¦n ha marcado un antes y un despu¨¦s en su trabajo. "A partir de aqu¨ª, habr¨¢ concepciones distintas: uno seguir¨¢ la l¨ªnea de Arata Isozaki o la de Eva Castro, tambi¨¦n participantes en el Puerta de Am¨¦rica".
Alumno de S¨¢enz de Oiza, Cano Laso o Rafael Moneo, titulado por la Polit¨¦cnica de Madrid, compa?ero de Peridis ("todo un fen¨®meno, que termin¨® la carrera un curso antes que el resto de los compa?eros, porque curs¨® la mitad de las asignaturas por libre"), S¨¢ez de Gordoa reflexiona sobre la nueva arquitectura espa?ola: "Goza de un gran reconocimiento, y eso tambi¨¦n se aprecia en la obra que se encuentra en las ciudades, que ha permitido que la gente comience a entender los nuevos proyectos. En el Puerta de Am¨¦rica, muchas plantas recibir¨ªan un rechazo furibundo hace unos a?os; ahora sus habitaciones son las m¨¢s solicitadas por los clientes".
Los problemas constructivos que implicaban muchos de estos dise?os pusieron de los nervios a los responsables de la obra: "Hab¨ªa estructuras que pr¨¢cticamente eran imposibles de ejecutar, pero al final se consigui¨®, aunque los materiales no fueran especialmente caros". Y con la variedad de dise?os en las plantas, la complicaci¨®n en la intendencia. S¨¢ez de Gordoa comenta un detalle esclaredor: cada planta del hotel madrile?o de cinco estrellas cuenta con una lencer¨ªa y ropa de cama propias, lo que supone todo un quebradero de cabeza para la direcci¨®n del establecimiento. El precio de la fama.
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