El traje de flamenca mira al pasado

El talle, algo m¨¢s bajo. Las mangas, largas. El cuerpo, como siempre: que realce la figura de la mujer. El Sal¨®n Internacional de la Moda Flamenca (Simof) ha ofrecido un a?o m¨¢s (ya van 13) y durante cuatro d¨ªas, la vanguardia del vestido m¨¢s tradicional. Y es que, es en el traje de gitana donde se unen las ¨²ltimas tendencias de la moda, respetando las ra¨ªces m¨¢s andaluzas. Como atestiguan las 90 firmas expositoras, 32 desfiles profesionales y m¨¢s de 1.000 vestidos presentados en pasarela -con precios que oscilan entre 350 y 5.000 euros-, la moda flamenca est¨¢ en auge. Adem¨¢s, por primera vez han acudido tres empresas importadoras japonesas invitadas por la Agencia Andaluza de Promoci¨®n Exterior, Extenda, con el objetivo de impulsar y fomentar las relaciones comerciales con este pa¨ªs, principal mercado de la moda flamenca en el extranjero.

El de flamenca es de los pocos trajes regionales que evoluciona y marca tendencias cada a?o. Pero es una prenda conservadora. Dise?adores y expertos lo saben y todos coinciden en respetar la tradici¨®n. El traje de gitana es entallado, alegre y con volantes. "Tiene formas muy tradicionales y nos gusta as¨ª", resume Maril¨® Montero, presidenta del jurado encargado de premiar a los mejores dise?adores noveles de esta edici¨®n, de los que destac¨® "la valent¨ªa de trabajar sobre un traje de toda la vida". Y ?c¨®mo ser¨¢ el traje de este a?o? "El que m¨¢s sensual haga a la mujer", dice Montero. Para lograr el objetivo los distintos dise?adores lanzan sus propuestas con un punto en com¨²n. La moda flamenca sigue este a?o la misma tendencia que la moda de la calle, explican Pilar Vera, Mari Carmen Cruz y Carmen Ca?averal.

La pasarela Simof mira tambi¨¦n al pasado. Se recuperan los volantes canasteros de los a?os cincuenta y los trajes tobilleros de los sesenta. Las dos d¨¦cadas siguientes tienen asimismo su aportaci¨®n: vuelos desde la cadera, volantes de capa, fruncidos y talles bajos.

El traje enterizo ha vuelto con fuerza, "con las nejas que abren dando mayor comodidad y m¨¢s vuelo", asegura Ca?averal. Los vestidos se complementan con mangas largas llenas de volantes. Tejidos, los de siempre. El raso o el popel¨ªn se renuevan a?adi¨¦ndoles elast¨¢n, que aporta comodidad con la misma textura de siempre. Tambi¨¦n se ver¨¢n el sat¨¦n, la organza y las sedas junto a mucho patchwork y superposici¨®n de tejidos. Y abundante colorido combinado con el rojo m¨¢s flamenco. Uno de los m¨¢s demandados este a?o, es el marr¨®n chocolate, que se unir¨¢ a los ampl¨ªsimos escotes en pico, redondos y coraz¨®n.

Ca?averal recuerda la importancia de los complementos: "Con ellos un buen traje es mejor y uno medio, mejora". Flores, mantoncillos y mucho brillo; mandan los metales como el oro, la plata y el cobre. Pilar Vera sentencia: "La moda flamenca es la m¨¢s favorecedora que existe, en 30 a?os de experiencia no he encontrado a ninguna mujer que no se encuentre guapa de flamenca".