El tal¨®n de Aquiles de Giuliani
Los hijos del ex alcalde neoyorquino no apoyar¨¢n su campa?a presidencial
Rudolph Giuliani, conocido en todo el mundo como el alcalde de Estados Unidos por su gesti¨®n de la crisis del 11-S, tambi¨¦n tiene su tal¨®n de Aquiles. El aspirante republicano a las presidenciales de 2008 se topa con un problema personal que puede acabar minando sus opciones a la Casa Blanca. Sus controvertidas relaciones extramatrimoniales y la negativa de los hijos de su segundo matrimonio a participar en la campa?a irritan a los sectores m¨¢s puritanos de la sociedad estadounidense.
La escritora Erica Jong anuncia que votar¨¢ a cualquier otro por el trato de Giuliani a las mujeres
La familia es un valor tradicional ensalzado por los pol¨ªticos estadounidenses que tienen la ambici¨®n de hacerse con el control del Despacho Oval, sobre todo por los miembros m¨¢s conservadores del Partido Republicano. Giuliani, sin embargo, se ha casado tres veces, se declar¨® en el pasado favorable al aborto y como alcalde de Nueva York particip¨® en la Gay Parade disfrazado de mujer. ?Pero qu¨¦ pesa m¨¢s en la era posterior a los atentados del 11-S: la familia modelo o la seguridad ciudadana?
El detonante de la crisis que vive Rudy Giuliani surgi¨® a ra¨ªz de una entrevista concedida por su hijo Andrew, de 21 a?os de edad, en la que explicaba que la relaci¨®n con su padre es extra?a, distante, y reconoc¨ªa tener problemas con su madrastra, Judith Nathan, mujer del ex alcalde desde 2003. El joven, que estudia en la prestigiosa Universidad de Duke, uno de los centros educativos donde se forma la ¨¦lite estadounidense, quiere dedicarse al golf y, como su hermana, Caroline, de 18, que en oto?o entrar¨¢ en Harvard, se niega a participar en la comitiva junto a su padre.
Giuliani pide ahora que los enredos en su feudo familiar se mantengan en privado, para poder resolverlos de puertas hacia dentro sin la intromisi¨®n p¨²blica. Pero como recuerdan muy bien en Nueva York, donde no hace mucha gracia que el republicano se presente a las elecciones de 2008, el entonces alcalde de la ciudad de los rascacielos no tuvo ning¨²n problema en anunciar el fin de su matrimonio con Donna Hanover, convocando una rueda de prensa en 2000. Hanover, madre de Andrew y Caroline, le acus¨® poco despu¨¦s de adulterio.
Lo que est¨¢ por ver es si en las pr¨®ximas elecciones el valor tradicional de la familia seguir¨¢ siendo un factor clave para la elecci¨®n del futuro presidente de EE UU. Los analistas dicen que los electores est¨¢n dispuestos ahora a primar m¨¢s la capacidad del futuro comandante en jefe de garantizar la seguridad de sus hijos cuando van al colegio, en lugar de ver c¨®mo gestionan las cosas en su casa o si fumaron porros cuando eran estudiantes en la universidad.
Quiz¨¢s esto explique por qu¨¦ Giuliani encabeza por ahora las encuestas respecto a sus rivales republicanos. John McCain, otro aspirante republicano a las presidenciales, se ha casado dos veces. Sin embargo, Richard Land, responsable de pol¨ªtica p¨²blica de la Iglesia bautista, cree que, aunque los votantes evang¨¦licos pueden llegar a aceptar a un candidato divorciado, el hecho de que Giuliani se haya casado en tres ocasiones puede plantear dudas a muchos votantes conservadores. Es m¨¢s, recuerda que el ex alcalde humill¨® p¨²blicamente a su segunda mujer y a sus dos hijos al anunciar el divorcio en televisi¨®n. "Esto tiene una venta muy dif¨ªcil", remacha.
Los contrincantes dem¨®cratas no est¨¢n haciendo sangre de los problemas personales de Giuliani. La senadora neoyorquina Hillary Clinton ya sufri¨® siendo primera dama las aventuras sexuales de su esposo Bill con la becaria en la Casa Blanca. Y mientras est¨¢ por ver si los enredos familiares acabar¨¢n da?ando al ex alcalde en su nominaci¨®n en el seno del Partido Republicano, la escritora feminista Erica Jong dice que votar¨¢ a cualquier otro aspirante, al considerar que Giuliani "se comporta en su casa como un fascista". "Ninguna mujer con un poco de cabeza le puede votar", concluye.
![Giuliani, en su boda en 2003, con sus hijos Caroline y Andrew.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/P7YCRPJCZ4V6WTOIHZU5STWQFU.jpg?auth=99dc530799cc2f613c7f30fe5d43e5c6839431e788608d13785ff7a893c161f4&width=414)
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