El Banco de Espa?a estima en el 3,6% la rebaja del IRPF, la mitad que el Gobierno

La rebaja del impuesto sobre la renta que ha entrado en vigor este a?o es t¨ªmida y perjudica a algunos ahorradores. Un estudio del Banco de Espa?a cifra en el 3,6% la reducci¨®n media del impuesto, algo m¨¢s de la mitad de lo estimado por el Gobierno, que calcul¨® un 6%. Los asalariados y los pensionistas constituyen los colectivos m¨¢s favorecidos, en particular los de rentas medias y bajas, pero hay un sector cuyas rentas resultan perjudicadas. Se trata de los ahorradores, especialmente los que perciben dividendos. Su situaci¨®n es "menos favorable" tras la reforma fiscal.

La reforma fiscal que elabor¨® el Gobierno el a?o pasado ha entrado en vigor sin incidencia, al menos por el momento, en los datos de recaudaci¨®n. Aunque el Ministerio de Econom¨ªa a¨²n no ha ofrecido informaci¨®n espec¨ªfica sobre el impacto de la rebaja del IRPF, los ingresos tributarios no revelan desaceleraci¨®n en ese impuesto. Todo lo contrario: Hacienda ha recaudado un 14% m¨¢s hasta febrero.

Este escenario es coherente con el estudio del Banco de Espa?a sobre los efectos de la reforma fiscal, que rebaja del 45% al 43% el tipo m¨¢ximo del impuesto, reduce de cinco a cuatro los tramos, eleva los m¨ªnimos personales y familiares y unifica el tratamiento del ahorro, con un tipo del 18%, frente a la casu¨ªstica existente antes de 2007. El texto, Una simulaci¨®n de los efectos de la reforma del IRPF sobre la carga impositiva, cifra en el 3,6% la ca¨ªda media. Con ese porcentaje, el tipo medio efectivo (es decir, despu¨¦s de aplicarle las deducciones) se reduce medio punto porcentual respecto a la norma anterior. Antes de que entraran en vigor las novedades, Econom¨ªa estim¨® la rebaja media en un 6%.

El Banco de Espa?a advierte de que hay que tomar sus conclusiones "con cautela", pues se trata de una simulaci¨®n basada en datos de la declaraci¨®n de la renta de 2002. Con todo, la instituci¨®n realiza un an¨¢lisis muy pormenorizado por tramos de renta y tipo de contribuyente. La mitad de los declarantes con ingresos m¨¢s bajos ven aliviada su factura fiscal un 9,5%. Y quienes perciben m¨¢s de 25.137 euros brutos al a?o "s¨®lo observar¨ªan una reducci¨®n de su carga por debajo del 3%".

Pese a todo, una buena parte del beneficio fiscal se concentrar¨¢ en los ricos del IRPF: "M¨¢s del 37% de la rebaja fiscal que se derivar¨ªa de la reforma se concentrar¨ªa en el 10% m¨¢s rico de los declarantes, dado que su aportaci¨®n a la recaudaci¨®n total se sit¨²a por encima del 55%", asegura el informe.

El beneficio fiscal tambi¨¦n difiere seg¨²n se realice la declaraci¨®n de forma individual o conjunta. A las del primer tipo -representan el 67,7% del total- les corresponde una reducci¨®n del 3,2%, frente al 5% de las conjuntas.

Aumentan las diferencias

Las mayores diferencias radican en el tipo de renta que percibe el contribuyente. Las distancias entre los tipos aplicables a los asalariados, los pensionistas y los ahorradores "se acent¨²an con la reforma". Los m¨¢s afortunados son los pensionistas, con una reducci¨®n del 8% en la cuota (lo que finalmente se abona, una vez aplicadas la tarifa y las deducciones). Les siguen los perceptores de rendimientos de actividades empresariales y profesionales, que pagar¨¢n casi un 4% menos. A continuaci¨®n se sit¨²an los asalariados, con una rebaja del 3,3%. Y en la cola figuran los ahorradores, que "pr¨¢cticamente no ven modificada su carga", pues la cuota que pagan cae de media algo m¨¢s del 1%. Pero ese colectivo es poco homog¨¦neo.

Mientras quienes cobran intereses pagar¨¢n un 33% menos por esos capitales, los perceptores de plusval¨ªas aportar¨¢n a Hacienda un 9% m¨¢s. Menci¨®n aparte merecen los dividendos. La nueva ley elimina la deducci¨®n por doble imposici¨®n a cambio de fijar un m¨ªnimo exento de 1.500 euros. Ese nuevo tratamiento "entra?ar¨ªa un incremento impositivo del 1,3%".

Respecto a la progresividad del impuesto (mayor aportaci¨®n relativa a medida que suben los tramos de renta), el Banco de Espa?a considera que aumenta "de manera moderada". Pero al mismo tiempo la reforma disminuye los efectos redistributivos del impuesto, ya que disminuyen los recursos disponibles para realizar el reparto.