Talleres de libertad
La c¨¢rceles y las ONG organizan cursos y actividades culturales para facilitar la vuelta a la sociedad de los reclusos
"Llevo aqu¨ª dos a?os y me quedan otros dos, por una pelea", dice un marinero. ?Cuatro a?os de c¨¢rcel por una pelea? "Bueno, es que hubo sangre", replica. Los presos del centro penitenciario Sevilla II han trabajado durante todo el a?o en un musical basado en la vida de Crist¨®bal Col¨®n. Ellos act¨²an y tambi¨¦n han compuesto la letra y m¨²sica de las canciones. Muchas horas en el estudio de grabaci¨®n. Largas tardes de ensayos. Y ayer, la funci¨®n a la que estaban invitados sus familiares y amigos.
El p¨²blico va llenando asientos y los presos ultiman detalles. Col¨®n busca su peluca, Torquemada abraza a su madre, los marineros y sus mujeres rodean la guitarra y calientan la voz y las palmas. Unas veinte personas componen el reparto. Y no hay que olvidar a los escen¨®grafos, t¨¦cnicos de luces y de sonido. Paulino, Pau, tiembla de emoci¨®n. "Mira mi mano", dice. Y eso que asegura que en la calle hac¨ªa malabares.
"La vida en la c¨¢rcel es muy dura y m¨¢s mon¨®tona; esto nos ayuda a distraernos y nos divierte", explica Miguel, que no s¨®lo se ha apuntado al teatro. "Por las ma?anas hago horticultura, tambi¨¦n soy el librero; cuanto m¨¢s haga uno, mejor. As¨ª te quitas de l¨ªos". Con el teatro se divierten y preparan su vuelta a la calle. "La vida es tambi¨¦n una actuaci¨®n", dice Francisco. "Hemos tenido un fallo en la vida y por eso ahora estamos apartados de la sociedad, pero que nadie tema nuestra vuelta".
Entre bambalinas, Paco Herrero, un cantautor que lleva 17 a?os trabajando junto a los presos. Su iniciativa consiste en la reinserci¨®n social por la v¨ªa de la profesi¨®n art¨ªstica. "Con estas actividades su autoestima crece, tambi¨¦n les ayuda en la rehabilitaci¨®n de toxicoman¨ªas", explica. Podr¨ªa decirse que Paco les ense?a a tocar la guitarra para que abandonen los delitos. "Aqu¨ª descubren una profesi¨®n y talentos que ten¨ªan dormidos, como dec¨ªa un antiguo alumno: He cambiado mi fama de bandolero por una guitarra, una p¨²a, un cancionero". Funciona. Porque de este proyecto han salido artistas y en las calles muchos piden dinero a cambio de una canci¨®n.
Nerea lleg¨® a la c¨¢rcel por m¨¢s hurtos de la cuenta en unos grandes almacenes y enganchada a las drogas. "Tengo ganas de salir, para empezar de cero", cuenta, "aunque esto es duro, aqu¨ª he vuelto a sacar lo que ten¨ªa aparcado en el cerebro". A¨²n tiene que pasar cinco meses entre rejas y mejor aprovechar el tiempo. Como dice Paco, una c¨¢rcel es una f¨¢brica de cosas.
Desde el escenario, Pau gui?a un ojo a su familia. La tripulaci¨®n de Col¨®n est¨¢ cerca de amotinarse. No les queda comida, apenas tienen agua. Llevan mucho tiempo esperando avistar tierra. La canci¨®n del acto recuerda qui¨¦n ha compuesto su letra: "Es larga la condena y m¨¢s larga la espera".
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